SABADO 18 DE MARZO DE 2000

* Exigen la regularización de sus vehículos; habrá solución, dice funcionario


Mitin frente a Hacienda de dueños de autos chocolate

Fabiola Martínez * Integrantes de la Unión de Transportistas Independientes de la República Mexicana realizaron ayer un mitin frente a las oficinas de la Secretaría de Hacienda (avenida Hidalgo, centro), para exigir la regularización de sus vehículos ųtrailer, tractocamiones y pipasų, los cuales fueron armados en México pero con motor y cabinas de fabricación estadunidense. Se calcula que en el país hay miles de conductores con este mismo problema.

Debido a lo anterior, alrededor de 22 mil personas aglutinadas en esta organización, y que poseen placas expedidas por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, no han podido acreditar la tenencia de los automotores.

El problema se generó en la década pasada, cuando los conductores pagaron sus derechos en el ahora extinto Registro Federal de Automóviles, por lo que las autoridades hacendarias desconocen tales gestiones.

Ante ello, los transportistas ųencabezados por Enrique Hernández Chávezų realizaron un plantón en el Monumento de la Revolución, mismo que retiraron 70 días después con la promesa de la Secretaría de Hacienda para dar solución a esta problemática.

José Guzmán, administrador central de Comercio Exterior de Administración General de Auditoría Fiscal Federal, se comprometió a revisar los documentos de cada uno de los camiones, para evitar que éstos sean sancionados en las carreteras o decomisados por la propia dependencia.

Dijo que no hay una estimación del número total de conductores que serían beneficiados con este programa ųcoordinado con la Secofių, y que para ello revisarán los archivos del anterior registro federal de automóviles, las constancias de regularización y las facturas de las partes importadas. "El problema está en vías de solución", señaló.

Más tarde, alrededor de 70 vehículos avanzaron por la avenida Reforma rumbo a la embajada de Estados Unidos en México, para exigir a esa representación que impida la venta de autopartes y motores "chatarra e incluso robados".

Allí fueron atendidos por Carlos Mejía, secretario segundo de Asuntos Políticos de la embajada, quien los escuchó y dijo que "tomaba nota de sus peticiones".