ASTILLERO Ť Julio Hernández López

No era fácil entender la razón por la cual el ex gobernador de Durango y ex líder nacional priísta, Maximiliano Silerio Esparza, había sido enviado a Jalisco como delegado del comité nacional priísta.

El estilo demagógico de Maximiliano, las acusaciones de corrupción y autoritarismo que había acumulado en su tierra natal, y su maquillado aire rural, parecían ser marcas extremadamente adversas para quien pretendiese enlazar los intereses del PRI con una sociedad de alta e influyente densidad urbana que ha preferido arrolladoramente al PAN en materia de elecciones.

Un encarguito del jefe

La misión para la que fue enviado a Jalisco tan peculiar personaje (aparte de entretenerlo en tareas partidistas para quitarle de la cabeza la pretensión de ser nuevamente senador) era la de preparar el camino y controlar las previsibles molestias del sector agrario priísta a la hora en que se postulara como principal candidato al Senado a Raymundo Gómez, el empresario salinista-cordobista, y ahora zedillista-Ƒgamboista? que se ha enriquecido entre otras cosas mediante el trabajo campesino mal pagado.

Maximiliano fue comisionado con toda anticipación para apagar las rebeldías del líder estatal cenecista y aspirante a la senaduría, Ramiro Hernández, quien se conformó con una suplencia, y de cenecistas como Rafael González Pimienta, quien ha sido subsecretario de la Reforma Agraria.

Ese el único caso en el que la estructura formal del priísmo fue usada para trabajos sucios o en el que quedaron fuertemente lastimados personajes priísta relevantes.

Núñez, abandonado a su suerte ante madracistas

En Tabasco, por ejemplo, las candidaturas al Senado ratificaron la hegemonía madracista sobre la política local. Los aspirantes que quedaron son Georgina Trujillo, hija del ex gobernador Mario Trujillo, uno de los aliados de Roberto Madrazo. Georgina era presidenta municipal de El Centro (la demarcación que incluye Villahermosa) y se le mencionaba como posible precandidata madracista a la gubernatura. La segunda candidatura fue para Oscar Cantón Zetina, miembro de la familia que entre otras de sus hechuras periodísticas tiene los diarios Tabasco Hoy y México Hoy, tan vinculados al madracismo como queda de manifiesto con la postulación de Oscar, quien preside la fundación Colosio en aquella entidad.

El damnificado de aquellas tierras del sureste ha sido Arturo Núñez, presunto candidato de Los Pinos a la gubernatura, a quien no sólo no se le abrió ningún espacio importante sino que, por el contrario, se le deja como único posible premio de consolación, en caso de perder la contienda interna local frente al gallo de Madrazo, el diputado local Manuel Andrade, acogerse a la versión que circula allá de que el delegado, Pedro Joaquín Coldwell, hará que se incluya en la lista plurinominal de senadores a quien no gane la candidatura tabasqueña.

Bajaron del ring al kid Oceguera

Otro miembro de la llamada "burbuja" de San Lázaro, Rafael Oceguera, cuya pasión priísta le ha llevado en más de una ocasión a argumentar con los puños y no con razones, también fue incluido contra su voluntad en el club labastidista de los desairados. Había anunciado Rafael con enérgica voz que se apuntaría como aspirante a la senaduría en cuanto se abrieran los registros, pero a la hora de la verdad fue "convencido" de que se abstuviera de tales fiebres democráticas y dejara que fuese candidato sin riesgo Lauro Díaz Castro, gran amigo de Francisco Labastida, a quien éste empujó desde la Secretaría de Gobernación para que fuese candidato a gobernador y no el cetemista Juan S. Millán. Así fue anotado Díaz Castro, y como segunda fórmula la de la señora Marta Tamayo Morales. Oceguera se quedó a la orilla del ring, como el campanero, cuando él quería reivindicar sus lauros de kid.

Jiménez Macías denuncia camarilla local perversa

Otro ejemplo de innecesarias lastimaduras a personajes institucionales se dio en San Luis Potosí con otro importante diputado federal, Carlos Jiménez Macías, quien había sido confirmado a las dos de la mañana del sábado reciente como uno de los dos candidatos a senadores por aquella entidad, pero horas antes de que fuese a registrarse como aspirante, ya con gente citada para acompañarle a la ceremonia, fue bloqueado por lo que el siempre ortodoxo Jiménez Macías calificó como una "camarilla local perversa", que habría "operado" para dejarlo fuera de la candidatura. Carlos habló de perversiones, truculencias, aberraciones, desaseos políticos y otras linduras. En su lugar quedó Yolanda Eugenia González y como segunda fórmula Antonio Esper. Carlos nunca quiso reconocer que el golpe en su contra fue fraguado por un diputado local que encabeza el Congreso potosino y que, junto con uno de los grupos empresariales y periodísticos locales más fuertes, promovieron cartas de bajo perfil en las candidaturas titulares para hacerle espacio al joven Pablo Valladares como suplente, y encaminarlo a la búsqueda de ganar en el 2003 la gubernatura, uniendo así los poderes político y económico en esta entidad.

Otros damnificados del huracán Fran-est-emil

La lista de agravios internos es larga: en Nayarit se dejó fuera a Lucas Vallarta, quien suponía que tenía en la bolsa la candidatura a senador por haber sido meses atrás candidato a gobernador, y haber defendido a su partido frente a la aplanadora del hombre más rico del pueblo, Antonio Echavarría.

El imperio de Rubén Figueroa

En Guerrero, el gobernador sin licencia, Rubén Figueroa, colocó a su fiel escudero, Héctor Vicario, como uno de los candidatos a senador, y a otros dos seguidores en las respectivas suplencias. Al gobernador con licencia, René Juárez, sólo se le permitió meter al ex coordinador del Congreso, Héctor Astudillo. Hubo un principal damnificado, Florencio Salazar Adame, quien había dejado la Secretaría General de Gobierno para buscar la senaduría. Además de él, quedaron enojados: Nezahualcóyotl de la Vega, Efraín Zúñiga y Efrén Leyva, entre otros.

El sombrero y la pirámide siguen mandando

En Tamaulipas, el gobernador en funciones, Manuel Cavazos Lerma, hizo avanzar a Laura Alicia Garza de la Secretaría General de Gobierno a una candidatura al Senado, desde donde podrá continuar con las tareas de vocinglería salinista que la señora desplegaba antes en otras funciones legislativas. El otro candidato es Oscar Loubbert, quien llegó a ser secretario particular de Manuel Camacho y de Luis Donaldo Colosio, y que era secretario de Desarrollo Social de Manuel Yarrington, es decir, de Tomás Cavazos, bueno, del gobierno de Tamaulipas. Desde luego, todos los demás grupos políticos locales se sienten desplazados por el acaparamiento cavacista. Para cubrir el hueco de la señora Laura Alicia Garza, los finos estrategas del salinismo ensombrerado y piramidal piensan en Paloma Guillén Vicente, presunta hermana del subcomandante Marcos. Por cierto, otro miembro de esa familia intentó ser candidato priísta a la presidencia del municipio potosino de Ebano, con tan mala suerte que fue uno de los aspirantes internos que menos votos consiguió.

Otro empacho frente a los hambrientos ha sido el de Roberto Albores Guillén, quien colocó como candidatos a José Antonio Aguilar Bodegas y a Arelli Madrid. Aguilar había sido su carta para el relevo gubernamental, y Madrid había sido su secretaria de Gobierno. No debe ser mucha la alegría de Sami David David ante la voracidad de su correligionario.

šLancen salvavidas (aunque sean plurinominales)!

Y, antes de que se termine el espacio, una lista apresurada de inconformes: Fernando Baeza en Chihuahua; Ricardo Monreal en Zacatecas (perdón, Monreal ya no es priísta, aunque de cualquier manera no debe estar muy feliz con el retorno de Genaro Borrego; Wintilo Vega en Guanajuato (quedó en segundo lugar, pero él quería el primero); el gobernador Joaquín Hendricks en Quintana Roo, pues le metieron a Addy Joaquín Coldwell y a un borgista; el gobernador Melquiades Morales en Puebla, pues no metieron a su hermano Jesús (aunque, para salvar el orgullo regional, el mandatario de Tlaxcala si metió a su esposa como candidata a senadora por el PRD); y los cetemistas de Nuevo León (Raúl Caballero a la cabeza) por la postulación de Juan Manuel Parás.

Y faltan las postulaciones a las senadurías por la vía plurinominal... Y las de diputados federales...

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