Bernardo Bátiz Vázquez
Fuerzas armadas y petróleo: temas clave
MIENTRAS QUE OTROS CANDIDATOS discuten con cuántos dedos se pueden hacer señales más procaces o si hay que enseñar a niños que apenas saben el español la lengua inglesa, Cuauhtémoc Cárdenas puso en el tapete del debate nacional dos temas trascendentes: el de las fuerzas armadas y el de la soberanía económica de nuestra nación.
En el mitin organizado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) para conmemorar el sexagésimo segundo aniversario de la expropiación petrolera, la campaña de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano a la Presidencia de la República dio muestra, nuevamente, de la diferencia de estilos entre la seriedad de sus planteamientos y la superficialidad de las que llevan a cabo sus contrincantes del PRI y del PAN.
El candidato Cárdenas, a la sombra del altísimo arco oriental del Monumento a la Revolución -en una de cuyas columnas se encuentran los restos de su padre-, pronunció un discurso muy significativo y posiblemente el más importante en lo que va de la campaña.
Tocó, entre otros, dos temas que los demás candidatos no se han atrevido a desarrollar con la claridad de conceptos y la convicción de Cárdenas: el petróleo y el Ejército.
En un punto crucial de su discurso recordó que fueron generales los que llevaron a cabo la expropiación del petróleo, motivo de la celebración de ese día en todo el país.
Petróleo y generales, dos conceptos diferentes, unidos en un discurso de campaña con motivo del tema de la soberanía nacional; se propuso, ahí, que los militares dejen de hacer funciones de policía persiguiendo a bandas de delincuentes, y que vuelvan a su función de garantes de la soberanía nacional, propuesta con la que Cárdenas demostró que no confunde, como otros, la seguridad pública con la seguridad nacional.
Las fuerzas armadas existen, según la Constitución, para proteger la seguridad nacional, que puede ser puesta en riesgo desde el exterior por una potencia extranjera, y en el interior por una rebelión armada.
La policía, preventiva o judicial, federal o local, está en cambio al servicio de la seguridad pública; su misión es cuidar las vidas, los intereses particulares y la persecución de los diferentes delitos.
Para el combate al narcotráfico y a la delincuencia organizada, se propuso un cuerpo de policía especializado, bien entrenado y bien seleccionado, así como combatir la corrupción oficial que ha llegado a muy altos niveles.
El otro tema básico, tratado por el candidato presidencial de la Alianza por México, fue el de la soberanía nacional en materia económica. Petróleos Mexicanos (Pemex) es la empresa más grande de Latinoamérica; piedra angular de nuestra economía, fue rescatada en 1938 de manos de los extranjeros que la manejaban para su beneficio.
Poner esta industria con razones o pretextos, o sin ellos, abierta o encubiertamente, en manos de extranjeros es no sólo retroceder a una época superada, sino confesar falta de confianza en nuestra propia patria, en nosotros y quizás incapacidad personal; sólo se pueden atrever a esta duda quienes por educación, formación e intereses han perdido todo sentido patriótico.
ƑCómo puede decirse que somos un Estado soberano si no somos dueños de lo que hay en nuestro país y tenemos que buscar inversionistas y empresas extranjeras para que vengan a administrar lo que es nuestro?
Estar orgullosos de que se haya incrementado la inversión extranjera, y esperar esta inversión para salir adelante, es signo de pérdida de dignidad y de desorientación intelectual.
Para quienes dicen que todas las campañas son superficiales y de baja calidad, sin propuestas y sin temas de fondo, ahí queda el discurso de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano para el análisis y la discusión; lo menos que pueden hacer sus contrincantes es expresar sus convicciones al respecto y el verdadero debate nacional estará en camino.
Los votantes del próximo 2 de julio podrán escoger entre posiciones totalmente diferentes en cuestiones de veras importantes para el futuro de la nación.