JUEVES 23 DE MARZO DE 2000
* Los fondos fueron liquidados a Banco Unión ese mismo año, dice a diputados
Fuera del Fobaproa, el dinero que Cabal entregó al PRI en 94: Corta
* "Es una farsa", acusa Rodríguez Prats; hay un delito de omisión, expresa Padierna al funcionario
Ciro Pérez Silva y David Aponte * Los recursos que Carlos Cabal Peniche entregó al PRI (20 millones de pesos) para financiar las campañas electorales de Ernesto Zedillo y Roberto Madrazo fueron "liquidados" hace seis años, no representaron un "quebranto" para Banco Unión y ni siquiera llegaron al Fopabroa, informó ayer en forma sorpresiva el secretario ejecutivo del Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB), Vicente Corta Fernández.
Sin embargo, nunca aclaró quién o quiénes liquidaron los montos que tenía el tricolor en dichos fideicomisos.
El funcionario acudió a San Lázaro para reconvenir a los diputados, responderles en el mismo tono en que lo cuestionaron los legisladores, recomendarles modificar la ley del secreto bancario y darles la noticia de que el PRI no le debe nada al Fobaproa por aquellos fideicomisos que inyectó con recursos de su banco el ahora detenido en Australia.
La información citada causó sorpresa entre los propios legisladores del partido oficial y una fuerte condena de las oposiciones.
ųƑY quién pagó? ųpreguntaron los reporteros al diputado del tricolor Omar Alvarez Arronte.
ųNo sé ųrespondió, aturdidoų; aquí venimos a enterarnos, junto con todos los demás, que no debemos nada. Pero, para ser sincero, no sé quién haya pagado.
"No se pidieron listas ni nombres"
Durante una comparecencia de dos horas y media con los integrantes de la Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda, Corta refutó a los diputados sus exigencias de que informara sobre montos y responsables de los créditos irregulares que cayeron a la panza del Fopabroa:
"No se pidieron listas ni nombres. Mediante informes rendidos el 15 de noviembre y el 10 de diciembre de 1999 y el 15 de marzo de 2000 se atendió en tiempo y forma la solicitud de la Cámara de Diputados", expuso.
Agregó que el instituto no puede violar las leyes que los propios legisladores han elaborado. Los instó a que modifiquen los actuales marcos legales para evitar abusos y a que emprendan la modernización del marco normativo del crédito, que incluye la Ley de Concursos Mercantiles, la Miscelánea de Garantías y el secreto bancario.
"La sociedad exige honestidad y congruencia. Resulta inconsistente que alguien alegue atacar la impunidad y al mismo tiempo defienda las leyes obsoletas que la han hecho posible. No es concebible que quienes se llaman a sí mismos progresistas se resistan al cambio de leyes que permiten los abusos que hoy condenan", expuso.
Manifestó que la lucha contra la impunidad no debe ser utilizada para lucrar políticamente. Ello la envilece y la obstruye, opinó. La única forma de vencer este enemigo es con un combate común, añadió en su exposición.
En las dos rondas de preguntas, los diputados de oposición Gustavo Pedro Cortés (PT), Alberto Cifuentes (PAN) y Dolores Padierna (PRD reclamaron a Corta información de los fideicomisos del PRI en Banco Unión y los fondos canalizados por Cabal Peniche.
Acompañado de los cuatro vocales del IPAB, Corta sorprendió a los diputados con la revelación de que el tricolor nada debe a Banco Unión. Aquí sí fue pródigo en datos, cifras, fechas y procedimientos.
"El 7 de marzo (de 2000) recibimos, a raíz de las pesquisas, información de la CNBV, a través del interventor de Banco Unión, que señala que el préstamo quirografario por 20 millones de pesos, otorgado por esa empresa el 16 de febrero de 1994 ųpagaré 9,257 con vencimiento al 15 de agosto de 1997ų, aparece en los registros contables como liquidado el 31 de agosto de 1994, por lo que esta operación no causó quebranto alguno" al establecimiento bancario, aseveró.
Juan José Rodríguez Prats, panista, montó en cólera y abandonó la reunión entre gritos de "esto es una farsa". Ante los reporteros exclamó que los vocales del IPAB pudieron haberse "vendido". Todo es parte de la "alianza de las complicidades", gritó.
Padierna tronó contra el funcionario: "Hay un delito de omisión en ustedes por estar ocultando este tipo de información y sólo fincar responsabilidad contra los que son sus enemigos, pero los que son sus amigos ni siquiera los comentan".
La reunión terminó entre los reclamos de la oposición por la "actuación parcial" de los funcionarios del IPAB y el beneplácito del PRI por la noticia.
Los reporteros rodearon a Corta y le hicieron toda clase de preguntas: "Entonces, Ƒlos 20 millones ya fueron finiquitados? ƑQuién pagó el crédito? ƑCon esto queda libre de culpa el PRI?"
ųDe acuerdo con nuestra información, fueron liquidados. No tenemos ninguna evidencia de que haya habido quebranto a Unión ni al IPAB. Ni acusamos ni liberamos de culpa a nadie. Simplemente cumplimos con la ley. En los casos en que haya evidencia de algún ilícito, venga de donde venga, vamos a actuar con todo rigor.
Pero ya no respondió a la pregunta de si el tricolor había quedado exonerado. Lo cierto es que Corta resolvió una disputa de dos años: los famosos fideicomisos del PRI en Banco Unión, en una reunión de dos horas con diputados federales.
Al mediodía y en el mismo tenor, ese partido cerró toda posibilidad de abrir el archivo secreto que contiene la lista de operaciones irregulares en el Fobaproa, con el argumento de que el IPAB "ya cumplió" con su mandato.
Pero la negativa priísta a dar su clave de acceso al sistema de cómputo no es el único obstáculo: las bancadas de PAN y PRD no llegaron a un consenso para presentar al pleno un punto de acuerdo que permita a la Cámara abrir la información clasificada.
Frente a la disputa política, el panista Fauzi Hamdan dejó en claro que legalmente ya no hay posibilidades de actuar en contra de quienes cometieron actos ilícitos que cayeron al rescate bancario, en el periodo 1993-1994 (en el tiempo de las campañas electorales de hace seis años).
Antes del inicio de la sesión plenaria ųla oposición pretendía llevar un punto de acuerdo para que la Cámara de Diputados aprobara la apertura del expediente secretoų las bancadas del blanquiazul y el sol azteca no alcanzaron una postura común ante la negativa del PRI de entregar su password.
Incluso, el panista Juan Bueno Torio reveló que al interior de su fracción parlamentaria no había consenso al respecto.
En un anteproyecto, los perredistas buscaban que el pleno de la Cámara ordenara "hacer pública la lista de las operaciones irregulares" reportadas en la auditoría del canadiense Michael Mackey.
El coordinador de los diputados perredistas, Pablo Gómez Alvarez, aseguró que PRI y PAN ya "se pusieron de acuerdo para bloquear esa información", porque ellos son los creadores del Fobaproa y el IPAB y, por tanto, tienen que estar a favor de la "cobertura" de las operaciones irregulares.
Los legisladores panistas y perredistas llevaron sus acusaciones a tribuna. Los primeros dijeron que los del sol azteca hacen escándalos y no aportan información. Los segundos aseguraron que los blaquiazules sirven de tapadera al PRI y a los malos manejos en el rescate bancario.
"Quiero decirles que le enviamos una carta al diputado (Enrique) Jackson (líder de la bancada del PRI), quien públicamente ha dicho que no aportará las claves para acceder al archivo. El diputado (Carlos) Medina (coordinador del PAN) ha dicho que sí. El archivo lo tiene Fauzi Hamdan y es como dejar a Juan Diego en manos de (Guillermo) Schulenburg, el ex abad de la Basílica (de Guadalupe)", punzó el perredista Alfonso Ramírez Cuéllar.
El legislador panista Humberto Treviño rechazó que su partido pretenda obstaculizar la información de los manejos irregulares en el Fobaproa: "Ponemos nuestra quinta parte de la solución al apoyar que se entregue esa llave". Sin embargo, no sería correcto mezclar a los "beneficiarios" con los "bandidos", precisó.
El PRI aprovechó el pleito entre panistas y perredistas para cerrar cualquier posibilidad de entregar su clave para abrir el archivo secreto del Fobaproa, con el argumento de que el IPAB ya envió la información requerida por la Cámara.
La víspera, un grupo de diputados priístas sostuvo una reunión con el secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco, quien les pidió que no cedieran en ese punto, según trascendió ayer en San Lázaro.