DOMINGO 26 DE MARZO DE 2000

Ť El grupo Marionetas de la esquina recrea estampas del México antiguo


El siglo de mis abuelos, recuerdos de trapo

Ť En la obra dirigida por Lourdes Pérez Gay, los guiñoles despiertan la imaginación de los niños

Mónica Mateos Ť El grupo teatral Marionetas de la esquina muestra en su reciente montaje que el más gruñón de los abuelos siempre es el mejor compañero de un niño, porque posee un valioso secreto: su memoria de proezas. ƑSe imaginan ser nietos del hombre que construyó el primer refrigerador de la ciudad de México? ƑO del primer piloto que voló sobre la Catedral Metropolitana?

teatro-marionetas-cna-jpg En la obra El siglo de mis abuelos, los títeres Paco y Eloísa despiertan una mañana, refunfuñando porque alguien ha roncado mucho durante la noche y no dejó dormir al otro. Esperan la visita de sus nietos, Marifer y Aldo, quienes se convierten, junto con el público, en los afortunados confidentes de la pareja de ancianos que han vivido 100 años y miles de anécdotas.

Escrita por Amaranta Leyva, becaria del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Morelos, la historia gira en torno de los tramposos y exagerados recuerdos de Paco, quien estuvo a punto de ocasionar una tormenta en pleno teatro porque a cada rato decía: "šque me caiga un rayo si estoy mintiendo!", y el cielo relampagueaba entre risas de varios pequeños espectadores.

Los abuelos demuestran que jugar a las coleadas es más divertido que el Nintendo, y de paso enseñan cómo se escuchaba música cuando no existían los discos compactos. Pancho Villa y Emiliano Zapata aparecen en la imaginación de Paco, quien quiere presumirle a sus nietos que él también peleó en la Revolución. Pero Eloísa se encargará de decirle a sus nietos que la única hazaña heroica del abuelo es haberla enamorado.

En esta puesta en escena, dirigida por Lourdes Pérez Gay, Marionetas de la esquina recrea con sus guiñoles el cine en blanco y negro, los tranvías que recorrían Chapultepec, la llegada a Veracruz de los 500 niños refugiados españoles, la nacionalización petrolera que efectuó Lázaro Cárdenas, los organilleros llevando serenatas, y los pasos de chárleston que en nada se parecen al actual slam: "Ƒa eso que llaman música? ƑBailes?, šlos de mi tiempo!", dice Paco.

Diversión y aprendizaje

La compañía ha realizado 16 montajes con 12 diferentes técnicas de títeres y temáticas. Además, ha impartido más de 400 talleres y cursos para profesionales de artes escénicas, maestros de diferentes niveles educativos, responsables de guarderías, hospitales, bibliotecas y sitios de recreación.

Su principal compromiso es "seguir inventando escenarios donde podamos demostrar que los títeres son tanto para niños como para adultos, siempre y cuando estimulen la imaginación, tratando que diversión y aprendizaje sean una sola cosa".

La obra El siglo de mis abuelos se presenta sábados y domingos a las 13:30 en el teatro Salvador Novo, del Centro Nacional de las Artes (Tlalpan esquina Río Churubusco, Country Club). Y si alguien quiere enterarse de más aventuras de los abuelos Paco y Eloísa, la cita es en el Canal 22, los jueves a las 17 horas.