JUEVES 30 DE MARZO DE 2000

Liberan dos zonas arqueológicas de SLP

Anoche se cerró el trato, por al menos un millón y medio de pesos, cuando se le dio el primero de tres pagos a Joaquín Muñoz Mendoza, con lo que se liberan las dos principales zonas arqueológicas de San Luis Potosí, que permanecían en poder del historiador, quien había asegurado que no las entregaría mientras Teresa Franco estuviera al frente del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Propietario de una y custodio de la otra, el director de la Fundación Eduard Seler aseguró el año pasado que tenía un programa de seis temporadas, que tan pronto terminara la gestión de Franco las nuevas autoridades aprobarían.

Las ocho demandas interpuestas en su contra, el ''acoso" al que él y su esposa fueron sometidos, al grado que -según Muñoz- por intervenciones de Franco el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología le había retirado a su fundación el apoyo institucional, no habían sido suficientes para convencerlo de negociar.

Acusaciones mutuas de malversación, demandas por daños al patrimonio con cotizaciones del mercado negro (el INAH tenía demandado por 10 millones de dólares a uno de los propietarios del terreno), despidos no consumados con base en supuestos documentos profesionales falsos (a la esposa de Muñoz), intervención de la Procuraduría General de la República. Ningún recurso legal fue del todo suficiente hasta ahora para convencer a Muñoz en su batalla contra el INAH, que ciertamente era más defensiva que ofensiva.

ƑMal negocio?

Su caso, incluso, trascendió hace un par de meses en la reunión que en Izamal, Yucatán, sostuvo Francisco Labastida, a iniciativa de su esposa María Teresa Uriarte, con diversas personas relacionadas con el patrimonio cultural. La versión que en aquella ocasión se dio del asunto, sin embargo, no favorecía a Muñoz.

Perito de los trabajadores e investigadores en la demanda que se interpuso en Teotihuacan contra el INAH, Muñoz adquirió apenas a finales de 1998 el terreno de Tamohi (El Consuelo) en un millón 300 mil pesos, y el año pasado dijo a este diario: ''No está a la venta. La fundación lo compró porque desde 1995 se cerró cuando el dueño, Fito Durán, los corrió (a los investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia), porque no hacían bien su trabajo arqueológico".

En Comunicación Social del gobierno del estado de San Luis Potosí, manifestaron que oficialmente tendrán información hasta la próxima semana. Sin embargo, trascendió que Muñoz Mendoza por lo menos recuperó el costo de los terrenos que hace dos años pagó a Fito Durán.

En el caso de los terrenos de Tantoc, que custodiaba la fundación Seler, no se sabe la cantidad que se pagó a Angel Castrillón, aunque si se toma en cuenta la base en que fue vendido el inmueble hace dos años a Muñoz, el precio podría duplicarse a los 3 millones de pesos.

Sin embargo, si se pagó de acuerdo con el avalúo oficial que hace Cabin (poco probable) seguramente fue un mal negocio, porque de acuerdo con el propio Muñoz ''esos avalúos son de risa, cuando un terreno vale 20 mil, ofrecen 6 mil". (Renato Ravelo)