La Jornada jueves 30 de marzo de 2000

José Luis Manzo
México, peón de Estados Unidos

Quisiera estar equivocado cuando afirmo que el gobierno de México es el peón petrolero de Estados Unidos. Pero la realidad, terca, me desmiente. No creo en la teoría de la conspiración, aquélla según la cual el mundo exterior está al acecho y se pone de acuerdo para perjudicar a México. Pero creo en los hechos y en los actos de nuestros gobernantes, en la interpretación que puedo hacer de ellos con mi escasa inteligencia y los abundantes recursos de análisis que están disponibles para cualquier observador. ƑEs falta de patriotismo de nuestros gobernantes? ƑConocen realmente el país al que dicen pertenecer y gobernar? ƑEs carencia de inteligencia o de independencia mental? Tal vez un poco de todo eso. El resultado final es que, por la manera en que actúa y los resultados que obtiene en materia de política petrolera internacional, puede concluirse que el gobierno mexicano está al servicio de los intereses estadunidenses, y no al de los mexicanos. Palabras duras; pero más dura es la realidad que les da sustento.

Antes de la reunión de la OPEP que se inició este lunes 27 de marzo, el gobierno mexicano anunció, o más bien, amenazó, con dar marcha atrás a parte del recorte a sus exportaciones de petróleo implementadas durante 1998 y 1999. Con ello logró ablandar a la OPEP. El primer resultado fue que comenzó una tendencia a la baja de los precios del petróleo, particularmente de la canasta de crudos de la OPEP, cuyo precio cayó de 27.80 dólares el barril hace dos semanas, a 25.42 la semana pasada; más lo que se acumule esta. El segundo resultado fue que la OPEP anunció finalmente que incrementará su oferta en un millón 450 mil barriles diarios a partir del primero de abril próximo.

ƑQué va a pasar ahora en el mercado internacional? ƑSerá el inicio del derrumbe del precio? Todo parece indicar que así será. El aumento de la oferta puede acercarse a los dos millones de barriles diarios, si consideramos el aumento en las exportaciones de países como Noruega, México e Irak. A esta cantidad se agregarán cerca de 2 millones de barriles diarios que, según la Agencia Internacional de Energía, dejan de consumirse a principios de abril, porque termina el periodo invernal. Esto dará como resultado un alza de los inventarios cercano a los 4 millones de barriles diarios, lo que saturará nuevamente el mercado y provocará más temprano que tarde una sobre oferta, que a su vez podría impulsar una caída estrepitosa de los precios.

ƑQué alternativas tenía México ante el anuncio de que la OPEP incrementará sus exportaciones de petróleo? Una alternativa, a la que por lo visto ya se renunció, es no aumentar sus exportaciones de crudo. Como buen sirviente que no quiere sufrir innecesariamente, el gobierno de Ernesto Zedillo podría haber alegado que México ya le había hecho el trabajo sucio a Estados Unidos, al presionar para que fueran los integrantes de la OPEP quienes incrementasen sus exportaciones, dando por resultado final que Estados Unidos y otros grandes consumidores puedan disponer de petróleo importado a precios más bajos. Alcanzado ese objetivo, Ƒqué caso tendría para México incrementar sus exportaciones de petróleo a un precio más bajo? ƑPara qué malbaratar su petróleo, cuando otros ya lo están haciendo en beneficio de Estados Unidos?

Ello no obstante, el gobierno mexicano decidió llegar al colmo del servilismo. Por medio del secretario de Energía, Luis Téllez, el martes 28 de marzo anunció su decisión de incrementar las exportaciones de petróleo en 150 mil barriles diarios por ahora, volumen destinado en lo fundamental al mercado estadunidense.

El gobierno de México podría aplicar una política petrolera más activa e inteligente. Independientemente de la escasa o nula defensa de nuestra soberanía nacional, nuestros gobernantes actuales muestran una carencia absoluta de sentido comercial. A pesar de que el petróleo es una de las herramientas de negociación más poderosas que existen en el mundo actual, no saben usarlo. Si el presidente Bill Clinton manifiesta al mandatario mexicano su preocupación porque los precios del petróleo están muy altos, Zedillo podría revirar manifestándole su preocupación porque la pesada deuda externa impide el desarrollo económico de México. ƑQuieres que te dé petróleo? Quítame el embargo al atún y las trampas que haces para impedir que productos mexicanos altamente competitivos como el aguacate, el vidrio, el acero y el tomate rojo entren a tu mercado. ƑQuieres petróleo mexicano suficiente y barato? Permite que los tráilers mexicanos entren libremente a Estados Unidos, como los tuyos entran a México.

En lugar de adoptar esta actitud y negociar globalmente, el gobierno de Zedillo se muestra entusiasta y dispuesto a cooperar para que bajen los precios del petróleo, incrementando sus exportaciones y presionando a otros productores para que también lo hagan. No se plantea siquiera la posibilidad de aplicar una diplomacia petrolera inteligente para estabilizar el mercado petrolero internacional, definiendo un límite máximo al precio del crudo para no afectar gravemente a los países consumidores y un límite mínimo para no perjudicar las finanzas de los países productores. En lugar de ello, se actúa con prisa plegándose a las presiones estadounidenses. Esta es la clase de gobernantes que padecemos hoy en día. Además de antipatriotas, son poco imaginativos y malos comerciantes.

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