JUEVES 6 DE ABRIL DE 2000
* El técnico no quiso polemizar con Rergis y terminó ofreciéndole disculpas
Si había ofrecimientos, era de los directivos: Arias
* No sólo en el Atlante-Angeles nos calificaron de vendidos, pero nadie gana perdiendo, afirmó
Miguel Angel Ramírez * Raúl Arias indicó ayer que nunca supo de algún ofrecimiento económico para que los jugadores del Atlante se dejaran ganar y el Angeles se salvara del descenso en 1988, como sugirió el ahora técnico de los azulgrana, Eduardo Rergis. Sin embargo, no pudo negar la existencia de ese tipo de incentivos. "Piensa lo que vale una franquicia; si los había eran de parte de los directivos o de la gente que está alrededor del futbol, pero no creo que un técnico o un jugador pueda verse involucrado en eso", explicó.
Arias, quien regresó ayer de Acapulco, donde el Necaxa jugó un partido amistoso, pidió disculpas a Rergis "por meterme en donde no me llaman". Aceptó que hizo mal en criticar el trabajo de su colega en el Atlante, y puntualizó que no iba a entrar en polémicas, pese a quedar en entredicho, porque defendía los colores azulgrana en esa temporada 87-88.
"Siempre pasa", aseguró, y añadió que "no es la primera vez que se habla de un partido como ese". Se justificó recordando que dos fechas antes del compromiso contra el Angeles, el Atlante había sido eliminado "por Pumas, me parece, 1-0, entonces, prácticamente ya no teníamos nada que hacer", mientras su rival "sí peleaba todo, su salvación.
"Entonces, pues es algo normal que sucede en el futbol, como en el partido antepasado con Pumas, que nos gana 3-0 y no por eso vamos a ser los más malos o los peores, Ƒno? Y esa situación de motivación, pues solamente la gente de futbol la sabemos". señaló.
Dijo que nunca supo de algún ofrecimiento. "Directamente así, nada", apuntó, y aprovechó la oportunidad "para hacer una reflexión. Si eso existiera en nuestro futbol, si esas situaciones económicas existieran y prevalecieran, pues Tigres nunca hubiera descendido o en los últimos años ya hubiera sido campeón".
Un colega le señaló que en la televisión pasaron ayer la escena del segundo gol del Angeles, y se apreciaba que él no mostraba entrega en la marca. "Así, con agresividad", contestó, agregando que no se acordaba. "Préstame el video para verlo". Lo único que recordaba, confesó, fue que les pasaron por arriba, y apeló a la comprensión de todos, porque ellos ya sentían que estaban de vacaciones, mientras los del Angeles se jugaban la vida en ese encuentro.
En relación con la versión de que José Antonio García, el dueño del Atlante en ese entonces, incluso fue al vestidor a reprocharles su actitud en la cancha, aseguró que no lo recordaba, "pero si sucedió, no es la primera ni la última vez que un directivo se enoje porque su equipo está jugando mal".
Tampoco le extrañó que la prensa los calificara de vendidos. "Antes era más común", indicó, y lo vivió en el Potosino, León, Atlante y "en Correcaminos, pero yo les aseguro que nadie gana nada perdiendo; y menos un equipo de futbol".
ųSe pierde en la cancha, pero se gana en el bolsillo.
ųNo, te aseguro que no. Perdí una final con Correcaminos, yo de técnico, y te aseguro que se hubiera reflejado más en mi vida, si hubiera quedado campeón. Pero una cosa como esa, de tanta vergüenza, de tanto mérito, pues también se malinterpreta. Y así como esa hay muchísimas, porque es difícil satisfacer al aficionado, al directivo nuevo, a la gente que de casualidad está en el futbol, y que no entiende que existe una vocación por esto.