JUEVES 6 DE ABRIL DE 2000

* Difícil o imposible, llegar a 5 millones de analfabetos

Educables, 14.8 de 36 millones en rezago escolar, dice el INEA

* Presentó su nuevo modelo de enseñanza para los adultos

* Centrará esfuerzos en las mujeres, sobre todo madres jóvenes

Claudia Herrera Beltrán * De los 36 millones de mexicanos en rezago educativo (analfabetos, sin primaria o secundaria), 14.8 millones son "educables", informó ayer el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA). Señaló que es difícil o imposible atender al resto (21.2 millones) debido a que son ancianos, tienen alguna discapacidad, viven en comunidades pequeñas u obtienen ingresos muy bajos.

Al detallar el nuevo modelo de enseñanza para adultos, que comenzará a funcionar formalmente este año, el INEA informó que sus acciones se enfocarán sobre todo a este grupo de más de 14 millones de personas con rezago educativo, en especial a los jóvenes.

El director del instituto, José Antonio Carranza, indicó que los esfuerzos se centrarán en las mujeres, particularmente las madres jóvenes, porque su preparación garantiza que no se reproduzca el retraso en las siguientes generaciones, ya que casi siempre se aplica la fórmula: madre educada, hijo educado. Los jóvenes también son prioritarios, porque son más fáciles de atender y representan la fuerza laboral presente y futura del país, y su educación garantiza mayor civilidad social.

De acuerdo con el informe que dio a conocer el INEA, 55 por ciento de los mexicanos adultos no tiene educación básica completa, la mayoría vive en el sur del país y cada año son 650 mil los que se suman al rezago educativo.

Del análisis se desprende que es difícil o imposible atender a 5 millones de mexicanos que no saben leer y escribir debido a varios factores: 2 millones son mayores de 60 años, la mitad vive en comunidades menores de 500 habitantes, la cuarta parte es población indígena, uno de cada cinco padece de alguna discapacidad severa que le impide totalmente aprender con métodos tradicionales, las familias de las dos terceras partes de ellos tiene ingresos menores a un salario mínimo.

Ante ello, refiere: "sólo alrededor de 1.6 millones están en posibilidades de aprender", inclusive, si se enfocan los esfuerzos a este grupo, la reducción de la tasa de analfabetismo (ahora de 10 por ciento respecto a la población total) "será mucho más alcanzable".

Según las estadísticas, 8 millones de mexicanos sin primaria tienen bajas o nulas "condiciones de educabilidad" por causas similares a los analfabetos, aunque es mayor el número con esperanzas de superar esta situación.

De los 18.2 millones sin secundaria, indica que 10 millones son educables. La mayoría tiene problemas para su atención: más de la mitad son menores de 45 años y habitan en comunidades urbanas; además, en términos productivos ųañade el INEAų representan la fuerza laboral presente y futura del país.

Señaló que el número de certificados en secundaria se duplicó en 1999 respecto a 1995. Así, de un millón que se otorgan actualmente en el sistema educativo nacional, 320 son de adultos.

Interés para la vida

El nuevo modelo edicativo, aseguró el director del INEA en conferencia de prensa, representa un cambio total en relación con el anterior: es flexible, porque se estudia a través de pequeños cursos, considera los conocimientos de los educandos, no fomenta la memorización y enseña cosas de interés para los adultos.

Esta estrategia se aplicó primero en Aguascalientes y en seis ciudades de otras entidades, y en el transcurso del año se extenderá a cinco estados, para que al finalizar el 2000 sumen 30 mil los adultos incorporados a este sistema con miras a que en los siguientes años sean 2.4 millones.

Así, los educandos pueden escoger entre 40 módulos, en los que estudian temas cercanos a su vida, tales como los problemas en el hogar, en el trabajo y en la comunidad; cómo ser buenos padres, cómo cuidarse de las enfermedades y combatir adicciones, la administración de un negocio, e incluso, cómo tomar decisiones al tiempo que fomenta relaciones de género equitativas.

Con la organización por módulos, explicó, el adulto deja de ver como una misión imposible su educación. Por ejemplo, si quiere obtener su certificado de primaria sólo necesita aprobar 7 módulos básicos y cuatro optativos, mientras que para secundaria requiere siete cursos esenciales y seis diversificados.

Además de ayudar a los adultos a superar sus carencias educativas, el INEA pretende que mejoren su calidad de vida, cuenten con elementos para continuar aprendiendo, reconozcan y hagan uso de sus actitudes y valores, mejoren su autoestima y reafirmen su compromiso personal y con la sociedad.