JUEVES 6 DE ABRIL DE 2000

* Se repetiría la reglita de oro de cada presidente priísta, advierte


El abanderado del tricolor taparía corruptelas: Fox

Juan Manuel Venegas * Si Francisco Labastida gana los comicios del 2 de julio se repetirá la reglita de oro de que cada presidente priísta que llega, no hacer sino tapar las corruptelas que cometió su antecesor. Esa reglita, alertó el candidato presidencial de la Alianza por el Cambio, Vicente Fox Quesada, empieza ya a regir también entre los secretarios de Estado procedentes y educados en el mismo sistema.

Por ello, agregó, desde ahora "denuncio que estamos volviendo a ver el mismo manoseo de las variables económicas, como es el tipo de cambio, igual que lo vimos en diciembre de 1994. Denuncio al señor Ernesto Zedillo como el directamente responsable de este manoseo, porque nos está dejando un peso sobrevaluado y sujeto a una posible devaluación. Están jugando con fuego sobrevalorando el peso, para hacer creer al elector y al ciudadano que hay una economía funcionando y exitosa".

Ante cerca de 2 mil estudiantes de la Universidad Iberoamericana, Fox pidió considerar esto a la hora de juzgar, en las urnas, al gobierno de Zedillo: "Despertemos, porque con tal de querer mantenerse en el poder, se están volviendo a llevar al país entre las patas, tal y como sucedió en 1994"

El guanajuatense dijo todo lo anterior en el discurso con el que se presentó ante el estudiantado del campus ciudad de México de esa casa de estudios. Y todo parecía que pintaba bien para el candidato, con un público a fin que para entrar al auditorio donde se realizó el acto tuvo que presentar su credencial de amigos de Fox o de militante de Acción Nacional, según denunciaron algunos estudiantes a quienes se les impidió el acceso al salón José Sánchez Villaseñor.

Pero no sólo los foxistas se hicieron presentes. Tan pronto inició la sesión de preguntas y respuestas, desde el campus de Tijuana, vía satélite (el foro estaba conectado a los planteles de la Iberoamericana en León, Torrreón, Guadalajara, Puebla y esa ciudad fronteriza), una jovencita empezó a ensombrecer la mañana del candidato: "Usted no necesita de actitudes vulgares para ganar adeptos. ƑDígame si los va a dejar o no?".

Fox, visiblemente molesto por el comentario y pregunta, atajó con un seco "ta'bien. Buen consejo. Gracias".

Y a partir de ahí, al panista ya se le vio incómodo. Y aunque él mismo, al azar, sacó de una gran copa los nombres de los estudiantes que lo interrogarían, no tuvo buena suerte y tres de ellos, de plano, le echaron en cara algunas de sus pinceladas públicas. Jorge García, por ejemplo, lo increpó por sus "incongruencias" en torno al IPAB, pues por un lado, en Estados Unidos dijo que no tiene nada que ver en los negocios de sus hermanos que tienen créditos pendientes en el instituto y, por otro, en su libro A Los Pinos, reconoce que cuando se retiró de la política no tuvo de otra "más que endeudarse en dólares" para sacar adelante los negocios familiares.

A este joven los organizadores lo quisieron callar, pero los mismos alumnos que llenaron el auditorio lo impidieron, aplaudiéndole y gritándole al "maestro represor", en coro: "šDéjenlo hablar!". De cualquier forma, García salió regañado por Fox, quien le devolvió el calificativo de "incongruente" una vez que el chavo no supo recordar cuándo y a quién declaró Fox en Estados Unidos su desconocimiento en torno al IPAB y los créditos de sus hermanos.

El mayor momento de tensión vino cuando Juan Pablo Piña, estudiante de derecho, le hizo ver que no se podía creer en él, cuando un día declara ser de "centro-izquierda", otro es "colosista"... pero finalmente representa "partidos de derecha". También le demandó al candidato "medirse" en sus acusaciones públicas contra Zedillo y otros priístas porque "el que afirma prueba, y usted no ha probado nada de lo que ha dicho".

Para entonces, Fox no estaba incómodo... estaba molesto, más cuando su hija Ana Cristina (estudiante de esta universidad) le hizo llegar por medio de su jefa de Prensa, Martha Sahagún, una señal de alerta: los estudiantes que lo increpaban pertenecían al grupo "Jóvenes priístas, todos con Labastida" y Piña resultó ser "hijo del ex gobernador de Puebla, Mariano Piña Olaya". Eso decían las tarjetas que Sahagún le transmitió a Vicente, quien al despedirse, no reparó en darle su llegue a los molestos muchachos:

"A los jóvenes que trabajan con Labastida, les pido que consideren que hay otras opciones... y en todo caso, pídanle que venga él, que no los ande mandando a ustedes, como si fueran sus representantes..."

 

En Neza, no prendió a la raza

 

Fox Quesada siguió sus actividades de ayer con un mitin vespertino en la explanada del palacio municipal de Ciudad Nezahualcóyotl. Y continuaron los males, porque la idea que tuvieron los organizadores de llevar al grupo Cañaveral terminó por opacar al candidato presidencial.

Sí, llenaron la plaza, pero los cerca de 3 mil nezatlenses que acudieron no hicieron más que vitorear a los músicos. La raza iba al baile, no a un mitin político. Y eso terminó por molestar a Fox, quien hasta desdeñó a la prensa local.

--ƑNecesitaba al grupo Cañaveral para llenar la plaza? ųpreguntó un informador.

--Puedes ahorrarte el tiempo y no preguntar tonterías ųreviró el candidato.