VIERNES 7 DE ABRIL DE 2000
* Le exige inmediato arreglo político en Chechenia
Recomienda la APCE iniciar proceso para expulsar a Rusia
* Quedó anulado el plazo de dos meses para acabar la guerra
Juan Pablo Duch, corresponsal, Moscú, 6 de abril * Tras una jornada de acalorados debates, la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE), reunida en Estrasburgo, Francia, concluyó su análisis de la situación en Chechenia con decisiones sorprendentes y en medio de un escándalo.
Contrariamente a lo que se esperaba de la votación de hoy, una enmienda de último momento logró anular el plazo de dos meses que el proyecto de resolución final daba a Rusia para acabar la guerra de Chechenia.
De tal modo, la APCE recomienda al consejo de ministros de relaciones exteriores del Consejo de Europa iniciar el procedimiento para expulsar a Rusia del organismo, "si no realiza de inmediato avances sustanciales, acelerados y demostrables" para un arreglo político en Chechenia.
Los avances que se exigen "de inmediato" --y no después del 31 de mayo, como decía el borrador consensuado de documento sometido a votación-- son decretar un alto el fuego e iniciar negociaciones con representantes chechenos, entre otros puntos que Rusia se niega a cumplir por considerarlos "injerencia en sus asuntos internos".
Asimismo, la resolución final aprobada mantiene la recomendación a los gobiernos de los países miembros del Consejo de Europa de empezar a presentar demandas contra Rusia en la Corte Europea de derechos humanos, acusándola de violar dichos derechos en Chechenia.
Los parlamentarios rusos no consiguieron apoyo suficiente para ninguna de sus enmiendas, entre ellas la de incluir la disposición de Rusia a comenzar negociaciones con el gobierno de Aslan Masjadov "sólo después de que éste condene públicamente el terrorismo internacional, ordene a sus hombres deponer las armas y entregue a la justicia rusa a los principales criminales de guerra chechenos".
El representante de Masjadov, Bagab Tutakov, no pudo ofrecer una respuesta articulada sobre si era cierto que los combatientes islámicos fusilaron ayer a nueve prisioneros rusos, pero protagonizó un bochornoso incidente, durante uno de los recesos, al agredir a golpes a un diputado de Daguestán, Gadzhi Makashev, y amenazarlo de muerte. Las cámaras de la televisión rusa registraron puntualmente el hecho.
El incidente sirvió de prólogo para lo que vendría después. La sesión de la APCE terminó en escándalo al abandonar la sala los delegados rusos, en protesta por la decisión adicional --posterior a la aprobación del documento final-- de suspender su derecho de voto, aunque ratificaron sus credenciales.
"En esas condiciones no podemos seguir trabajando aquí. La responsabilidad es suya. Que les aproveche", afirmó indignado el jefe de la delegación, Dmitri Rogozin.
En Moscú, la reacción oficial no se hizo esperar y la cancillería expresó su "profunda preocupación" por las sanciones de la APCE, y advirtió que mañana mismo "se tomarán las medidas adecuadas".
En lenguaje menos diplomático, el presidente de la Duma, Guennadi Selezniov, estalló: "Es un error histórico y colosal. šBasta! Nos arreglaremos sin ustedes, maestros europeos". Y, tras lanzar que "Europa tiembla cada vez que Estados Unidos mueve las cejas", amenazó: "No saben con quién están tratando".
Rusia tiene muy presente que la APCE tomó una decisión sin precedentes y confía en que no se llegue finalmente a la expulsión. De hecho, desde que se fundó el Consejo de Europa en 1949, como un organismo para promover los derechos humanos, la democracia y la cooperación en la Europa de la posguerra, ningún país ha sido expulsado. El último intento de suspender a un miembro se dio en los años 60, después del golpe militar en Grecia, pero el régimen de Atenas se retiró antes de que se adoptara la decisión final. Turquía también abandonó voluntariamente en dos ocasiones la Asamblea Parlamentaria entre 1981 y 1985, y luego en 1995 al invitarse a parlamentarios kurdos.
Ahora, recae en el consejo de ministros de relaciones exteriores del Consejo de Europa instrumentar la recomendación de la APCE y Moscú tratará de influir en que dicho procedimiento se dilate lo más posible.
Tampoco puede ser durante mucho tiempo, pues en la siguiente sesión de la Asamblea, prevista para junio, el consejo de ministros tiene que rendir cuentas.
Consciente de que las sanciones de la APCE dañan no sólo el prestigio internacional del país, sino la imagen del presidente electo Vladimir Putin dentro de la propia Rusia, el Kremlin procurará contrarrestar sus efectos internos. Acaso esto último explique que el video Crímenes de guerra en Chechenia que la delegación rusa optó por no mostrar en Estrasburgo, dado que contiene escenas "muy fuertes, que no puede resistir ninguna persona normal", será transmitido este viernes por el principal canal de la televisión del Estado en horario triple A.