JUEVES 27 DE ABRIL DE 2000

* Tres días de alegatos en la corte en torno a la Caravana de la Muerte


Se inicia el juicio de desafuero en Chile contra Augusto Pinochet

* Gobierno y ejército deben mantenerse al margen, advierte el presidente Ricardo Lagos

Afp, Dpa, Ap, Pl y Reuters, Santiago, 26 de abril * Este miércoles comenzó en la Corte de Apelaciones el histórico proceso de desafuero contra Augusto Pinochet, luego de que el pleno de magistrados rechazó la última petición de la defensa para que el ex dictador fuera previamente sometido a exámenes médicos.

Durante tres días, a partir de este miércoles, el panel de 21 magistrados escuchará los alegatos de los abogados querellantes y de la defensa en torno al caso de la llamada Caravana de la Muerte, la primera denuncia contra el ex dictador y que fue tomada como base por el juez Juan Guzmán para pedir el desafuero de Pinochet.

La primera audiencia, prevista para las 15 horas local, comenzó con 40 minutos de retraso debido a que el panel de jueces primero tuvo que resolver nuevamente y por tercera vez consecutiva rechazando otra petición de la defensa para que el acusado fuera sometido a diagnósticos médicos y evitar así el arranque del juicio.

La defensa "sufrió un nuevo traspié", señaló el abogado querellante Eduardo Contreras, al comentar la decisión de la Corte. De hecho, los defensores pinochetistas querían frenar el juicio y ahora con el veredicto el proceso sigue su marcha, declaró a su vez el dirigente izquierdista Juan Andrés Lagos.

Ricardo Rivadeneira, uno de los abogados de Pinochet, admitió que los jueces desestimaron el recurso que presentaron, y que ahora "van a resolver si existen o no sospechas de que el senador Pinochet ha participado en hechos delictuosos". No obstante, se mostró confiado en la honorabilidad, independencia y neutralidad de la justicia.

La Corte resolvió que la práctica de exámenes clínicos al acusado podrá realizarse al término de los tres días de los alegatos, pues de hecho el proceso podría prolongarse hasta un mes. Pero la jurista Carmen Hertz dijo que este no era tiempo de exámenes, sino que esto se puede dar una vez que el senador vitalicio sea desaforado.

La audiencia de hoy, con la intervención de la relatora Soledad Melo sobre los sucesos de la Caravana de la Muerte ųuna comitiva militar que en octubre de1973 ejecutó a más de 70 opositores políticosų dio inicio a puerta cerrada, ya que sólo a partir del jueves tendrán acceso dos periodistas locales y dos corresponsales extranjeros.

Horas después, la sesión fue interrumpida por la hora y ante el voluminoso resumen sobre más de 10 tomos ų3 mil 500 páginasų del caso de la Caravana de la Muerte. Pero, la exposición continuará este jueves a la misma audienciapinocho hora, y proseguirá con los alegatos de los querellantes, del Consejo de Defensa del Estado y de la defensa.

En tanto que el edificio de la Corte se encontraba fuertemente acordonado por la policía, que mantenía a distancia a partidarios y adversarios del anciano ex militar, el presidente Ricardo Lagos afirmó que el país espera con calma el desenlace del proceso de desafuero y que todos acatarán el fallo final que emitan los magistrados.

"Chile está tranquilo y las instituciones funcionan", y tanto el gobierno como el ejército deben mantenerse al margen del caso porque humildes y poderosos están sujetos a las leyes, dijo Lagos. Subrayó que así se lo hizo saber al comandante en jefe del ejército, general Ricardo Izurieta, a quien recibió en su despacho.

Pero el saldo de la jornada fue de ocho personas arrestadas, tres jóvenes antipinochetistas atropellados accidentalmente por un auto oficial y un cómico que parodiaba a Pinochet resultó golpeado. La policía mantenía el control de la zona, con carros lanza-agua y fuerzas antidisturbios desplegadas en los alrededores.

Pinochet se mantuvo en su residencia de Santiago mientras se desarrollaba el primer día del juicio de desafuero, en tanto que un sondeo de opinión arrojó que 56 por ciento de los chilenos es partidario de que el ex dictador sea juzgado por los tribunales de justicia, y 87 por ciento cree que debe retirarse del Senado.

A la fecha Pinochet enfrenta 91 querellas en su contra y de ser desaforado tendría que encarar las graves acusaciones que se le hacen tras el golpe militar de 1973, comenzando por el presente caso de la Carvana de la Muerte, un comando que al frente del ex general Sergio Arellano Stark asesinó a 76 presos políticos.

En Londres, Amnistía Internacional se congratuló por el inicio de las audiencias en la Corte de Apelaciones de Santiago, que se encargará de decidir la suerte de Pinochet. Señaló que este es un primer paso positivo 'hacia la destrucción de la impenetrable barrera que protegió a Augusto Pinochet desde hace más de un cuarto de siglo".