VIERNES 12 DE MAYO DE 2000

López Obrador y el DF

 

* Horacio Labastida *

Se dice, se afirma, se cuchichea y hasta escándalos propagandísticos se hacen con motivo de las acciones oficiales y no oficiales que, así lo aseveran unos y otros, nos conducen ahora por caminos anchos hacia la democracia anhelada por los defeños desde el pasado más remoto; y ahora que en la ciudad de México se presenta la gran oportunidad de acentuar ese paso a la democracia, iniciado el día en que Cuauhtémoc Cárdenas triunfó durante las elecciones de 1997, los asustadizos echan mano de toda clase de argucias leguleyas y no leguleyas para intentar excluir de la contienda al candidato Andrés Manuel López Obrador, quien a base de una estrategia de cercanía cotidiana con los ciudadanos, aun en los barrios más modestos, ha logrado atraerse las suficientes simpatías para apuntalar un triunfo de su partido en los comicios del próximo 2 de julio.

El candidato López Obrador es un distinguido tabasqueño por su abierta adhesión a los paradigmas democráticos forjados en México a través de las luchas del pueblo por romper opresiones y adueñarse del propio destino. Si la democracia es ejercicio de la soberanía del pueblo en sus múltiples aspectos, no hay duda alguna de que López Obrador en las bellas tierras de Garrido Canabal ha batallado incansablemente porque tal soberanía se refleje en las decisiones y los actos gubernamentales. Pero del mismo modo que en Tabasco es un tabasqueño intachable por su entrega al pueblo que lo acunó, López Obrador también desde estudiante en la universidad y como político ha dado pruebas evidentes no sólo de una luenga residencia en nuestra capital, sino sobre todo de una íntima, constante y activa preocupación y ocupación por los problemas a las veces aperplejantes que aquejan a nuestra maravillosa urbe. López Obrador es tan tabasqueño como defeño, y por esto tiene pleno derecho a participar honestamente como candidato a la jefatura del DF, junto con los representantes de los otros partidos. Es importante destacar que el candidato panista Santiago Creel reconoció ese derecho de López Obrador y solicitó al PAN el retiro de las ridículas objeciones con que se ha buscado bloquear el ya perceptible triunfo de López Obrador.

Aparte del leguyelismo vacuo de los apelantes a la resolución del IFE a favor del PRD, que esperamos sea rechazado en la sentencia del Trife, cuenta una espléndida novedad en la sociedad política. Al lado de la democracia formal inventada por la burguesía revolucionaria de finales del siglo XVIII, se han venido consolidando métodos que buscan identificar la voluntad ciudadana con el acto de gobierno, y al efecto la añosa democracia que aniquiló a la monarquía absoluta, ve florecer a su lado una innovadora democracia directa, cuyo propósito es consultar las decisiones trascendentales del Estado en los consensos de la sociedad civil. No basta elegir a la autoridad y confiar en que ésta cumpla los compromisos que adquirió con los ciudadanos; ahora se quiere que la autoridad consulte una y otra vez, inclusive su legitimidad y permanencia en el cargo, con la mayoría de la población, y entonces la participación de esta mayoría se convierte en una prístina expresión de la soberanía nacional: su rechazo por parte de la autoridad implicaría la negación de la democracia. Y precisamente esto es lo que significa la asamblea que se congregó el pasado 5 de mayo en el Zócalo --alrededor de 150 mil capitalinos-- para expresar un deseo colectivo de gran significación: la plena aceptación de la candidatura de López Obrador al DF, y el repudio a las impugnaciones de PRI, PAN y PARM al registro del perredista.

Es obvio que muy pronto el Trife resolverá sobre dichas impugnaciones, y vale preguntarnos ahora, Ƒlos magistrados de ese tribunal escucharán y entenderán la voz del pueblo?; y a propósito viene a nuestra memoria lo que se comentaba y decía en las tertulias de los célebres letrados del siglo XVII español: si no oyes la palabra de Dios, caerás en el infierno, y si no oyes la palabra de Fuente Ovejuna, caerás en el mundo animal. *