SABADO 13 DE MAYO DE 2000

* Dice a Greenspan que su cliente es honorable


Poderoso ex legislador apoya a Hank Rhon para invertir en EU

* Contrata a Warren B. Rudman, quien tiene acceso a las altas esferas del poder * Expertos en inteligencia, parte de su defensa

Jim Cason, corresponsal, Washington, 12 de mayo * Carlos Hank Rhon contrató a un poderoso ex legislador federal, con acceso a las más altas esferas del poder, y un equipo de expertos de inteligencia de Estados Unidos para defender su nombre y convencer a la Reserva Federal de desechar una acción legal pendiente contra el empresario mexicano, programada para el próximo julio en Texas.

El ex senador Warren B. Rudman sostiene ahora que la acción legal de la Reserva Federal contra su cliente, que busca prohibirle invertir en la industria bancaria estadunidense, es resultado de una campaña secreta de intereses empresariales, cuyo propósito es dañar la reputación del financiero mexicano.

Esta supuesta campaña, llevada a cabo por intereses privados no identificados, está de alguna forma relacionada, argumenta Rudman, con un informe secreto de inteligencia, alegando que Hank Rhon está vinculado con el narcotráfico en México. La campaña también fue utilizada para promover una nueva ley estadunidense que obliga al gobierno federal a aplicar sanciones contra individuos y empresas asociadas con el narcotráfico.

El mes pasado, Rudman anotó su primer triunfo en la defensa de su cliente cuando obligó a la procuradora general, Janet Reno, a declarar que el gobierno estadunidense no adoptó las conclusiones de un informe de inteligencia de ese país que señala posibles vínculos entre Hank Rhon y el narcotráfico.

La Jornada se ha enterado, por documentos registrados en torno al caso, que el ex senador Rudman también habló directamente con Reno y con el presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, sobre el caso contra Hank Rhon. Fuentes cercanas al asunto legal informaron que abogados que representan al empresario mexicano están buscando postergar las fechas de la acción legal o negociar un acuerdo que evitaría una audiencia legal en público en torno a este caso.

Pero los investigadores de la Reserva Federal insisten en que proceda el caso con base en acusaciones de que Hank Rhon fue "personalmente deshonesto", al presentar documentos oficiales ante las autoridades bancarias estadunidenses, en referencia a una investigacion sobre sus inversiones en en banco en Texas (que fue reportada por La Jornada).

En particular, la Reserva Federal sostuvo formalmente en diciembre de 1998 que Hank Rhon escondió el hecho de que su padre, Carlos Hank González, se había convertido en un inversionista secreto en el Laredo National Bancshares. Hank Rhon ha negado esta acusación, pero el caso, políticamente sensible, se ha ampliado al incorporar declaraciones formales tanto de Hank Rhon y Hank González y de varios ejecutivos de Citibank y otras instituciones financieras que ahora se encuentran de alguna forma involucradas en el asunto.

En una carta enviada a la procuradora general Reno a principios de febrero de este año, el ex senador Rudman acusó que la acción legal de la Reserva Federal contra Hank Rhon, así como la filtración del borrador del informe de inteligencia federal, eran resultado de acciones de intereses comerciales no identificados que obraban en contra del empresario. Rudman se ha negado a nombrar estos intereses detrás de la "campaña" contra su cliente, pero señaló que continúa investigándolos.

El influyente ex senador, tambien miembro de la Junta Asesora Presidencial de Inteligencia Exterior ųque asesora al presidente en las actividades de la CIA y otras agencias de inteligenciaų también realiza una enfática defensa pública de su cliente mexicano. "El señor Hank... es miembro de una prominente familia mexicana que ha contribuido en gran medida al desarrollo económico del país", escribió Rudman en una carta fechada el 3 de febrero de 2000 y enviada a Reno, cuya copia fue obtenida por La Jornada. "En su tierra él goza de una reputación impecable por la honestidad y trato justo en sus asuntos de negocios".

El primer objetivo de Rudman fue convencer a Reno de disasociar al gobierno estadunidense de un análisis de inteligencia sobre supuestos vínculos de Hank Rhon con narcotraficantes, preparado por el Centro Nacional de Inteligencia de Drogas (NDIC) y dado a conocer por los diarios El Financiero y The Washington Post. Como parte de este esfuerzo, los abogados de Hank Rhon contrataron a Investigative Group International (IGI), empresa de investigaciones privada con fuertes vínculos con Bill Clinton. El IGI preparó un análisis de 24 cuartillas del informe del NDIC con la intención de refutar las conclusiones de ese documento de inteligencia.

En su carta a Reno, Rudman sostiene que carece de bases y que sólo repite acusaciones presentadas por Eduardo Valle, ex funcionario de la PGR, el ex agente de la DEA Phillip Jordan y de un académico estadunidense, Andrew Reding. "El señor Hank está dispuesto a refutar los alegatos en el informe del NDIC", escribió Rudman a Reno. Pero aparantemente la procuradora decidió que no se requería de una refutación personal de Hank Rhon, y el 21 de marzo respondió a Rudman vía carta señalando que "la materia del informe iba más allá de la especialidad sustantiva y el área de responsibilidad de la NDIC", y que, por lo tanto, sus conclusiones no fueron adoptadas como parte de la posición oficial del gobierno de Estados Unidos en este asunto.

Rudman también habló por teléfono con el presidente de la Junta de la Reserva Federal, Alan Greenspan, sobre la declaración de Janet Reno. Como titular de la Reserva Federal, Greenspan encabeza la agencia oficial que realiza la acción legal que busca obligar a Hank Rhon a vender sus intereses en su banco en Laredo y prohibir todo negocio suyo en el sector financiero estadunidense. Sin embargo, Rudman insiste en que no estaba cabildeando a Greenspan en favor de suspender la acción legal, sino sólo asegurándose de que había recibido las declaraciones de Reno.

No obstante, en sus comunicaciones con la procuradora, Rudman no dejó duda de que si las conclusiones del informe de inteligencia no son válidas, el caso contra su cliente debería ser desechado por la Reserva Federal. "Es patentemente claro que el informe del NDIC ha contaminado la percepción de la Junta sobre el señor Hank, porque es la fuerza promotora detrás de la demanda de que el empresario mexicano desinvierta su interés en el Laredo National Bancshares Inc.", escribió Rudman.

Sin embargo, los abogados del gobierno federal no están de acuerdo, y con base en diversas declaraciones por escrito, como las de la vicepresidenta de Citibank, Amy Elliot, sostienen que Hank Rhon asistió en secreto a su padre para invertir en un banco estadunidense con la intención de ocultar la transacción. Representantes de Citibank contactados por La Jornada se negaron a comentar sobre el caso, ya que es un asunto legal pendiente.