SABADO 13 DE MAYO DE 2000

* Indispensable, que pierda el PRI: Vargas Llosa


"Sería injusto decir que México es ahora una dictadura perfecta"

David Carrizales, corresponsal, Monterrey, NL, 12 de mayo * El escritor peruano Mario Vargas Llosa declaró que es un requisito indispensable que pierda el PRI para que México pueda vivir en la democracia, pues afirmó que aunque ese partido gane limpiamente el próximo 2 de julio nadie lo va a creer, ni siquiera los mexicanos.

En conferencia de prensa que ofreció en su segundo y último día en Nuevo León, Vargas Llosa dijo que "sólo habrá democracia genuina, auténtica en el momento que el PRI salga del poder a través de la forma civilizada que son las elecciones".

Puntualizó que si en estos comicios el PRI gana, aun cuando lo haga limpiamente, "nadie va a tener la sensación de que la democracia ha llegado a México, porque con un partido que está más de 70 años en el poder, se pensará que sigue ahí por inercia o por trampa".

Dijo el escritor que "esa es una realidad que comparten los mexicanos y los latinoamericanos en general, así como todos los que se interesan por lo que ocurre políticamente en México".

Insistió: "la señal más evidente, más gráfica de que hay democracia en México, será cuando haya empezado por fin a haber alternancia, y que se sucedan en el poder los partidos políticos, pues si uno mismo continúa en el gobierno, aun cuando hayan cambiado las costumbres tradicionales no va a parecer a nadie, ni siquiera a los mexicanos, que de verdad hay democracia".

Por otro lado, sobre el riesgo de que una "dictadura perfecta" del PRI pudiera ser remplazada por una nueva dictadura de derecha, como ha ocurrido en diversos momentos de la historia de México ųPorfirio Díaz luchó contra la reelección de Benito Juárezų, el escritor expuso: "no hay mejor antídoto contra la dictadura que la participación activa de una sociedad en defensa de las instituciones democráticas".

Agregó: lo terrible es que muchas veces, como la democracia es imperfecta, que no satisface las esperanzas puestas en ella, surge una apatía, un desdén en los ciudadanos por las instituciones democráticas, por los partidos políticos, y ese clima es un caldo de cultivo muy fértil para la demagogia y para el autoritarismo.

Dijo que es una gran ingenuidad pensar que una dictadura puede resolver los problemas mejor que una democracia, por imperfecta que ésta sea.

Y sin embargo, así ocurrió en Perú, cuando los peruanos se volcaron en favor de Alberto Fujimori, y ahora no saben cómo sacudirse de encima esa dictadura.

Precisó que una dictadura una vez que se instala empieza a eliminar esos espacios de libertad que la frenan, que la resisten, y llega a tener un control sobre el poder judicial, sobre la información, y empieza a utilizar todos los recursos contemporáneos, desde la tecnología hasta el sistema de tributación, para coercionar a una sociedad.

Reiteró. sobre el proceso electoral mexicano, su convicción de que haya terminado ya la "dictadura perfecta". Comentó: "tengo la impresión, me lo dicen muchos amigos cuya opinión yo respeto, que hay hoy día una apertura, una libertad de expresión, un derecho de crítica que se está manifestando y un proceso electoral que parece bastante limpio, del que puede resultar realmente una democracia".