DOMINGO 14 DE MAYO DE 2000

PAGINA 9

* Lourdes Galaz *

De políticos, intelectuales... y periodistas

* Vargas Llosa: habrá democracia cuando pierda el PRI * Voto útil para entregar el país a la reacción más inmunda * Se gastan en política más de $3 mil millones del presupuesto federal

Hace unos días, ante cientos de voceadores de diarios y revistas que se editan en la megalópolis, también de periodistas y de dueños de empresas periodísticas, el presidente Ernesto Zedillo decía que, "como nunca, México está viviendo la democracia en este año electoral", aunque horas después haya sido desmentido por un político extranjero, también escritor de novelas, que hace unos años declaró que la nuestra, más que una democracia imperfecta, es una dictadura perfecta (o mejor dicho, una dictablanda). Mario Vargas Llosa ahora llegó a decir en Monterrey que "sólo habrá democracia genuina y auténtica en el momento que el PRI salga del poder", y un público derechoso y panista lo aplaudió a rabiar. Más aún, el escritor peruano, nacionalizado español luego de que perdió las elecciones como candidato presidencial hace diez años contra Alberto Fujimori, fue más allá en su análisis: "Si en estas elecciones el PRI gana, aun cuando gane limpiamente, nadie va a tener la sensación de que la democracia ha llegado a este país"... Bueno, el hombre que ha escrito tres novelas ųla última, La fiesta del chivoų donde los protagonistas son dictadores, se queja aquí y allá en su país natal: "šLas dictaduras me persiguen!" Y aunque no fue respuesta al peruano, vale el comentario de un escritor me xicano que jamás ha participado en política y aun así calificó de "una farsa" el proceso de democratización priísta: "...echar al PRI del poder puede ser equivalente, en estos momentos (el competido proceso del 2000) a entregar el país a la reacción más inmunda", escribió Fernando del Paso.

Preocupados por el peligro de la polarización de la sociedad ahora que "está viviendo como nunca la democracia", por la falta de encuentros, de voluntades y de diálogo, por la ausencia de tolerancia y concordia, esta semana más de cien artistas e intelectuales (los más antipriístas) que en su mayoría se encontraron el jueves 11 en la fiesta de Nexos para celebrar la nueva época (con Luis Miguel Aguilar y Rafael Pérez-Gay) de la revista, whisky en mano brindaron porque ese día se hizo público el manifiesto que firmaron para llamar a los candidatos presidenciales a que respeten los resultados de las elecciones del 2 de julio. Los intelectuales, que saben de política y conocen bien de la historia mexicana, están dispuestos a trabajar en una cruzada civil por la democracia. Proponen un pacto político nacional que permita el desarrollo del país sobre nuevas bases razonables, justas y respetuosas, una vez que se oficialice el resultado de las elecciones presidenciales y del Congreso, gane quien gane, aunque vale tener en cuenta que luego del sondeo para conocer la intención del voto entre la gente de la intelectualidad y el mundo artístico (Milenio, número 139), el equipo del candidato oficialista confirmó que Francisco Labastida y el PRI están muy alejados de las preferencias de esos personajes que hacen opinión pública aquí y en el extranjero... Los intelectuales y artistas consultados mostraron su preferencia por Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano (aunque con sabiduría Fernando del Paso nos recuerde que "parece que el sol de Giordano Bruno de tanto mirarlo ha cegado algunos"). Ciertamente, un buen porcentaje de los pensantes encuestados estima la conveniencia del voto útil por Vicente Fox Quesada (aunque el autor de Noticias del Imperio alerta que "es un voto a favor del fascismo que se revuelve en las entrañas del PAN... de la injerencia altanera de la Iglesia católica en la política nacional...del conservadurismo y del puritanismo más siniestros").

Y en este ambiente con olor a democracia que estamos viviendo, mucho tienen qué ver los medios de comunicación masiva, que se han vuelto el espacio más importante de la vida política. No es gratuito que en este año electoral se entregue a los partidos contendientes más de 3 mil millones de pesos que podrán gastarse en espacios de prensa, radio y televisión. Los políticos entienden que son los medios la vía privilegiada para llegar a los ciudadanos y fomentar su potencia electoral. Pero además, recordó hace unos días el presidente del IFE, José Woldenberg, la autoridad electoral compró tiempo adicional en los medios electrónicos para distribuirlo entre los partidos. Aunque usted no lo crea, en este proceso del 2000, adicionalmente a lo que puedan comprar libremente con los 3 mil millones de pesos, los partidos y las coaliciones tienen en total más de mil 620 horas de radio y más de 420 horas de televisión (šmuchos millones de pesos!) para difundir sus diagnósticos (encuestas) y propuestas, sin gastar un solo centavo. En sí, el enorme gasto en publicidad y mercadotecnia resulta el elemento central de la larga, dilatada campaña electoral, que como nunca es un excelente negocio para los empresarios de la comunicación que no sólo recogen ganancias, sino que invierten a futuro: hacen alianzas económicas con los partidos, con grupos de poder y contratan a informadores, politólogos, líderes de opinión con fama de "honorables", de "democráticos". También inventan, maquillan a quienes tienen a su servicio para usarlos en campañas a favor o en contra de ciertos partidos y de algunos personajes de la política y del gobierno. Para muestra: la persecución de la televisión privada contra el procurador Samuel del Villar por el caso Paco Stanley. ƑEl affaire de Lilly Téllez tiene qué ver con el desempeño del oficio periodístico? ƑLas acusaciones, sin pruebas, contra algunos políticos del PRI, del PAN o del PRD y las campañas de difamación orquestadas por periodistas honorables en ciertos medios nacionales o extranjeros no son parte del gran negocio de hacer política en un ambiente democrático? Y todo esto viene a cuento porque esta semana los quehaceres y queveres de los medios de comunicación fueron la noticia... Y felicidades a Carmen Lira por sus primeros cuatro años como directora general del corporativo La Jornada. Por unanimidad, los jornaleros la reelegimos cuatro años más. Salud, suerte y mucha visión.