La Jornada martes 16 de mayo de 2000

ASTILLERO Ť Julio Hernández López

La Secretaría de Gobernación ha decidido continuar con la recta actitud (iniciada con el caso Muñoz Ledo) de denunciar públicamente todo tipo de maniobras sucias habidas en su santo seno. Por tanto, ayer decidió relevar a Miguel Angel Yunes de la Dirección de Reclusorios que, oficialmente, se llama "de Prevención y Readaptación Social". A Porfirio lo enfiló hacia el purgatorio (por lo pronto, ni PARM ni PAN) la espada flamígera que en sus caras lleva inscritos los anuncios de sus patrocinadores, "Bucareli" y "Los Pinos". A Yunes simplemente se le nombró coordinador de asesores de Diódoro Carrasco.

El asunto, sin embargo, no es tan sencillo, y esta columna cada vez más imbuida de responsabilidad histórica no puede dejar pasar así como así tal movimiento burocrático: ƑQuién ejercerá ahora la función de ama de llaves del preso Raúl Salinas de Gortari e, inclusive, quién garantizará buenos tratos, frazadas y room service a otros Salinas que acaso podrían pisar la cárcel en razón de los requerimientos judiciales a los que han sido sometidos aunque se nieguen, como casta divina, a siquiera darse por enterados, a someterse al interrogatorio oficial, al rendimiento de cuentas?

Y aún peor: Ƒquién le cumplirá a El Cocinero las promesas hechas a cambio de su oportunísima retractación en el asunto de Paola Durante, los Amezcua y Paco Stanley? ƑQuién le organizará ahora, a cualquier reo que así lo desee (siempre y cuando se digne ordenarlo con un chasquido de dedos), una conferencia nocturna, en auditorio bien preparado, con notario público y cámaras y micrófonos de Televisión Azteca y Televisa?

Lo dicho: ya no hay valores.

Nomás medio millón de votantes

Los adversarios de Andrés Manuel López Obrador han celebrado el hecho de que sólo haya concurrido la mitad de la gente que era esperada en la consulta ciudadana organizada para saber el grado capitalino de aceptación a la impugnada candidatura del tabasqueño.

Tanta emoción produjo ese incumplimiento de las metas de participación en la mencionada consulta dominical, que el mismo Jesús Silva (Flores) Herzog se declaró revitalizado y consideró, por tanto, posible alcanzar al ex presidente nacional perredista.

Deseosos de encontrar algún asidero para sus necesarias esperanzas, los adversarios de López Obrador poca atención prestan a la esencia del movimiento ciudadano expresado este domingo. Consideran poca cosa que medio millón de personas haya concurrido por su voluntad a depositar un voto circunstancial a favor del candidato perredista. Acostumbrados a los actos de magia como el del pasado 7 de noviembre, cuando se apuntaron diez millones de votos (ja ja ja) en una falsa elección interna, hubiesen valorado más que en la consulta de este domingo se hubieran dado números inventados.

Nada puede depreciar el hecho de que pretendiendo un millón de votantes sólo se tuvo la mitad. Pero ese dato, por sí mismo, no puede desatar sensatamente expectativas triunfales en los candidatos que a todas luces y según todas las encuestas disponibles van a la zaga. El propio Silva (Flores) Herzog ha reconocido una distancia de diez puntos porcentuales a favor de López Obrador. Oscar Levín Coppel, según notas periodísticas, también aceptó unos 5 o 6 puntos de ventaja para el perredista. A esos puntos de distancia hay que sumarle medio millón de capitalinos movilizados para defender la candidatura del ex líder nacional perredista.

Sigue el embate contra Porfirio

Semanas atrás se produjo el banderazo de salida para el linchamiento político de Porfirio Muñoz Ledo, cuando reapareció en escena aquel secretario de Gobernación llamado Patrocinio González Garrido, quien trató de disfrazar de alegato político lo que en realidad pretendía ser una oportuna descalificación personal del ex priísta y ex perredista que ya entonces se apuntaba para ser ex parmista y enrolarse en su nueva aventura, la foxista.

La metralla pesada contra el locuaz Porfirio continúa. Se llegó a pensar en la posibilidad de habilitar a la senadora Irma Serrano como su sustituta en la candidatura presidencial parmista. Tal vez alguien consideró que sería rudeza excesiva enderezar los dardos de La Tigresa contra las fragilidades del todavía diputado federal perredista. Por ello se prefirió que el propio presidente del PARM, Carlos Guzmán, se asumiera como relevista. Ello no redujo, sin embargo, el encono: el susodicho presidente nacional parmista ha comenzado a acusar a Muñoz Ledo de haber dado mal uso a 13 millones de pesos gastados en campaña, y además advirtió que estará presente en el próximo debate, si allí va Porfirio, para reclamar para sí, para el tal Guzmán, el lugar correspondiente a la candidatura parmista. De lo que se trata, como lo podría adivinar hasta un columnista político, es de degradar el impacto de la alianza que hicieron Fox y Porfirio, y acaso convertir a éste en un aliado indeseable.

Huellas en el camino

Por cierto, Francisco Labastida ha dejado huellas discursivas que ayudan a quienes juegan a adivinar sus alianzas secretas. Este fin de semana, elogió a los presidentes de la República que el PRI ha llevado al poder pues, según esa sinaloense interpretación, a ellos se deben obras, servicios y progreso actuales. Sólo de uno de esos presidentes pronunció nombre y apellidos: Lázaro Cárdenas del Río. El público reconocimiento al cardenismo hizo que se fortalecieran las especulaciones (que tantas agruras provocan en algunos segmentos de izquierda) en el sentido de que el riesgo real del triunfo de la ultraderecha está tejiendo discretos entendimientos entre PRI y PRD.

Otra pista dejada en el camino se relaciona con el presunto aliado cómodo, Gilberto Rincón Gallardo, a quien Labastida intenta insertar en la próxima pasarela electrónica de los tres candidatos mayores. Según el priísta, el aspirante del Partido Democracia Social se ganó en el pasado encuentro de los seis abanderados el derecho a participar en la segunda reunión que había sido pactada para realizarse sólo entre PRI, PAN y PRD. El uso labastidista del recurso llamado Rincón Gallardo tiene como objetivo tener un pretexto más o menos aceptable para que el priísta rehúya un nuevo enfrentamiento televisado con Fox y Cárdenas.

Astillas: Elías Morales Hernández y Benito Ortiz Elizalde son dos nombres que nada habrán de decirle a ningún candidato de los que hoy buscan votos por doquier. Ellos dos son las más recientes víctimas del sistema inquisitorial con el que se mantienen encima de los trabajadores los líderes del sindicalismo oficialista. Morales Hernández y Ortiz Elizalde han sido expulsados del sindicato nacional de trabajadores mineros por oponerse a que Napoleón Gómez Sada pretenda que su cacicazgo de décadas sea heredado por su hijo del mismo nombre, a quien ha nombrado secretario general sustituto. Pero, bueno, dos nombres, dos votos, qué tanto pueden importar a los señores candidatos en campaña... En Pisaflores, en el corazón de la sierra hidalguense, policías municipales fueron emboscados por lo que el reporte oficial denominó "gatilleros desconocidos"... El avance de las mujeres en las actividades públicas es tal, que ya más de algún varón rebasado ha pensado en la posibilidad de crear un frente o movimiento de reivindicación del machismo herido. Este domingo, en Sofía, Bulgaria, la mexicana Soraya Jiménez ganó el primer lugar en una competencia internacional femenil de levantamiento de pesas. La medalla de oro de Soraya en esa disciplina de fuerza hará llorar lágrimas de amargura a quienes estimen que hasta en esos menesteres fibrudos va en declive el orgullo viril... Otro orgullo sangrante es el de los seguidores de las Chivas del Guadalajara: casi todo el segundo tiempo de su encuentro contra el Atlas estuvieron con dos hombres más, pues al equipo de Trino le expulsaron a dos jugadores, y aún así, apenas pudieron los rayados empatar a uno con los llamados niños héroes... Los machines rines sufrimos por maternal partida doble.

Fax: 55 45 04 73 Correo electrónico:
[email protected]