SABADO 20 DE MAYO DE 2000
* Reclaman saber "la verdad" sobre 175 casos
Batlle no participará en marcha de familiares de desaparecidos
Reuters, Afp, Dpa y Ap, Montevideo, 19 de mayo * El presidente de Uruguay, Jorge Batlle, confirmó que no participará en la Marcha del Silencio convocada para este sábado por el Movimiento de Madres y Familiares de Desaparecidos (Fedefam), para reclamar "la verdad" sobre 175 detenidos desaparecidos en éste y otros países de la región durante las dictaduras militares de la década de los años 70.
Aunque Batlle comenzó la búsqueda de soluciones para las desapariciones en el país, "el reclamo sigue siendo el mismo que hace cinco años", dijo Alberto Hein, de la organización católica Cifre, que apoya a Fedefam en la manifestación, la cual se realiza desde 1976 en completo silencio y sólo portando banderas uruguayas como único emblema.
Los convocantes de la marcha piden la verdad sobre los uruguayos detenidos desaparecidos en este país, Argentina, Chile y Paraguay, dijo Hein.
La Marcha del Silencio se realiza como es habitual cada 20 de mayo, aniversario de los asesinatos, en Buenos Aires, de los legisladores uruguayos Zelman Michelini y Héctor Gutiérrez por un comando paramilitar en el marco de la Operación Cóndor, mecanismo de terror que coordinó la represión entre las dictaduras sudamericanas de la época.
Luisa Cuesta, de Fedefam, comentó que después de la ubicación, por el gobierno de Batlle, de la nieta del poeta argentino Juan Gelman, desaparecida durante la dictadura en Uruguay, entre 1973 y 1985, la realidad ha cambiado "porque estamos encontrando a nuestros niños... pero la lucha sigue siendo la misma porque queremos saber qué fin tuvieron nuestros familiares", señaló.
En Brasilia, el presidente Fernando Henrique Cardoso condenó el intercambio de información entre los militares de los países sudamericanos para detener a opositores de izquierda, con lo que admitió la existencia de la Operación Cóndor.
La prensa destacó este viernes las declaraciones de Cardoso hechas durante la víspera, en las que calificó de "espurias y sombrías" las formas de cooperación entre los países de América Latina durante las dictaduras militares.
En este marco, el gobierno brasileño anunció que investigará las causas de la muerte del ex presidente Joao Goulart, presuntamente víctima de Cóndor.
De acuerdo con el parte oficial, Goulart, que fue derrocado por el golpe militar de marzo de 1964, falleció en 1976 de un ataque cardiaco en la provincia argentina de Corrientes, lugar adonde se trasladó para después mudarse con su familia a Londres, pero se presume que en realidad fue envenenado con medicamentos.
El hijo de ex mandatario, Joao Vicente Goulart, dijo que dependiendo de la información que se recabe durante la investigación y si hubiera la convicción de que existen condiciones tecnológicas para compro- bar que realmente hubo envenenamiento, su familia aceptará la exhumación de los restos de su padre.
La investigación coincidirá con otra más amplia emprendida por el Congreso en torno a la presunta participación de Brasil en la Operación Cóndor.
Así, el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Velloso, decidió dar curso a una comisión rogatoria del magistrado bonaerense Claudio Bonadío para averiguar el paradero de tres argentinos desaparecidos, en 1980, en Brasil.