SABADO 27 DE MAYO DE 2000
Ť La controlaban priístas
Reabre Arizmendi Esquivel parroquia de San Pedro Chenalhó
Elio Henríquez, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 26 de mayo Ť El obispo Felipe Arizmendi recuperó para la diócesis de San Cristóbal la parroquia de San Pedro Chenalhó, que desde el 26 de febrero de 1998, fecha en que fue expulsado el párroco francés Michel Chanteau, permanecía bajo el control de las autoridades priístas del lugar, sin que permitieran el acceso de ningún sacerdote vinculado a Samuel Ruiz García.
Este día, Arizmendi llegó a San Pedro Chenalhó e instaló en la parroquia al sacerdote José Carmelo Jiménez -procedente de la diócesis de Tuxtla Gutiérrez-, quien junto con los jesuitas Pedro Arriaga y Rodrigo González atenderá a la población católica local. En principio, estos dos últimos continuarán atendiendo a las comunidades, y el primero la cabecera municipal.
La bienvenida a las puertas del templo se la dio -en visible estado de ebriedad- el alcalde priísta de Chenalhó, Antonio Pérez Arias, cuyos padres, bases de apoyo del EZLN, viven como desplazados en Polhó.
Al final de la celebración Arizmendi dijo en entrevista que la apertura del templo ''es un signo de unidad y un proceso para ir construyendo la unión. Parece increíble, pero lo que estamos viviendo significa que para Dios nada es imposible''. Señaló que ''este es el Chiapas que todos queremos, un Chiapas reconciliado, unido''.
Seguiré trabajando por la paz: Ruiz
Por otra parte, en su último día de estancia en San Cristóbal de las Casas, el obispo emérito Samuel Ruiz García aseguró que desde Querétaro o donde quiera que esté seguirá trabajando por la paz en Chiapas, y destacó que los nombramientos y ratificaciones hechos esta semana en la estructura de la diócesis local por el obispo Felipe Arizmendi Esquivel son ''signos de continuidad'' en el trabajo pastoral.
''La relación no es de un recuerdo de que estuve aquí, sino de una permanencia actual hasta el momento presente, porque continuaré actuando en favor de la paz y de la transformación del país donde quiera que esté'', recalcó el tatic, durante un breve mensaje para despedir esta tarde a unos 150 católicos de las 42 parroquias que partieron en peregrinación hacia la Basílica de Guadalupe y luego lo acompañarán a Querétaro.
-ƑLleva en su corazón alguna preocupación por lo que se vive en Chiapas?
-Bueno, todos, si no tenemos una preocupación por lo que se vive en Chiapas y en México, porque no sólo es Chiapas sino toda extensión del país, pues dejaríamos de ser mexicanos. Todos debemos tener una preocupación, pero más que eso son las acciones que debemos emprender para evitar que esas preocupaciones crezcan y generen una situación caótica.
''Todos debemos cumplir nuestra tarea'', dijo el prelado. Añadió que en Chiapas ''no hay una cosa predecible, pues aquí es lo inédito lo que sucede''. Al sintetizar el trabajo que realizó en esta diócesis durante los últimos 40 años, Ruiz García destacó la ''toma de conciencia generalizada de la presencia histórica del indígena en todo el continente'', lo que ''le ha permitido hablar aunque no lo oigan, y eso es irreversible''.