SABADO 27 DE MAYO DE 2000
Ť SNTE y gobierno de Guerrero abren mesa negociadora para mentores locales
Maestros deciden hoy si intensifican protestas
Georgina Saldierna, Alma E. Muñoz y La Jornada/El Sur Ť Tras la negativa de las autoridades federales para negociar, la disidente Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) determinará hoy el plan de acción que refuerce su protesta ante al gobierno federal. A unas horas de la reunión, algunas asambleas estatales pugnaban por emprender otra marcha a la residencia oficial de Los Pinos, otra a la Secretaría de Gobernación, así como el cierre de anillo Periférico.
Mientras los contingentes estatales efectuaban sus reuniones de evaluación sobre los resultados de la marcha del jueves y planteaban la estrategia para los días subsecuentes, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la dirigencia nacional del SNTE informaron que ayer se instaló en Guerrero una mesa negociadora para atender las demandas del magisterio local.
La SEP mencionó que con esta medida los maestros de aquel estado "entran en la segunda fase de negociación, la cual ocurre en todos los casos, entre las autoridades educativas estatales y cada sección sindical. En estas negociaciones se deciden las modalidades de aplicación de las prestaciones obtenidas y se tratan diversos problemas de orden administrativo y laboral".
Por su parte, el SNTE informó que en la apertura de la mesa del diálogo estuvieron presentes el secretario general del Comité Ejecutivo Nacional, Tomás Vázquez Vigil, y el gobernador René Juárez Cisneros. "El líder nacional del magisterio manifestó su confianza en que a partir de esta propuesta se regularicen las labores educativas en Guerrero y que los 500 maestros que se encuentran en la ciudad de México inicien el retorno a su lugar de origen".
Juárez se comprometió a que a más tardar este lunes, "hará lo posible, hasta donde alcance el presupuesto" para dar cumplimiento a las demandas de los disidentes.
Según un comunicado del SNTE, la mesa se concentrará en tres ejes básicos: atender con más recursos la educación indígena en la región, incrementar las pensiones de los jubilados y aumentar prestaciones, como aguinaldo --que pase de 80 a 90 días--, recursos para licencias económicas no disfrutadas y el monto de las primas vacacionales.
La negociación -dijo el SNTE- involucrará a 49 mil trabajadores de la sección 14 de Guerrero y con ello "todas las expresiones ideológicas del magisterio se encuentran en la mesa, en busca de llegar a un pronto arreglo a sus demandas".
Pese a lo anterior, la fracción institucional del sindicato aprovechó para llamar a "todos los mentores que se encuentran en paro de actividades para que pronto se encuentren negociando en sus estados -incluido Guerrero- para cumplir puntualmente con la obligación primaria de todo el magisterio, el proceso de enseñanza-aprendizaje".
Hasta el cierre de la edición, se desconocía si los profesores de ese estado, participantes en el plantón en el Zócalo capitalino, regresarían a la entidad para participar en el diálogo. No obstante, con anterioridad denunciaron que el gobierno estatal pretendía "resquebrajar el movimiento de la CNTE" al ofrecerle, desde el inicio de la protesta, 10 días más de aguinaldo a cambio de no trasladarse a la ciudad de México.
Durante todo el día, la mayoría de los profesores disidentes consensuaron las propuestas que hoy presentarán para conformar el nuevo plan de acción. Humberto Alcalá Betanzos, líder de la sección 22 de Oaxaca, la más numerosa en el plantón, no descartó que ante la "cerrazón" de las autoridades federales, mantengan la protesta hasta después de los comicios presidenciales.
Ratificó que se "recrudecerán" las movilizaciones. De esta manera se habla de la posibilidad del cerco al aeropuerto internacional de la ciudad de México y el cierre de las principales arterias del Distrito Federal, incluido el anillo Periférico.
La SEP reiteró que no hay recursos para responder a los reclamos económicos de la disidencia magisterial, que hoy cumple 12 días en la capital, y los conminó a regresar a sus estados para negociar las soluciones.
Benjamín González Roaro, subsecretario de Servicios Educativos para el Distrito Federal, lamentó que los maestros inconformes hayan dejado de atender sus actividades en las aulas, pues "un día sin clases es un día que interfiere en el ritmo de aprendizaje; la dinámica se trunca y es difícil recuperarla".