VIERNES 2 DE JUNIO DE 2000

* Lucha de gigantes en el soundtrack

Amores perros, ejercicio artístico y honesto

Arturo Cruz Bárcenas * La película Amores perros es un ejercicio artístico honesto y directo que refleja una parte de la realidad que nos atañe y da un punto de vista personal acerca del nada fácil oficio de vivir. La opera prima de Alejandro González Iñárritu, director de la cinta, fue ganadora del Premio de la Crítica del reciente Festival de Cannes, en Francia.

La obra cinematográfica es acompañada de una banda sonora cuya primera selección fue Lucha de gigantes, de Nacha Pop, y a partir de ahí se eligieron otros temas interpretados por Celia Cruz, The Hollies, Control Machete, Titán, La Banda Espuela de Oro, Los Gatos Negros, La Banda de El Garrote y el chileno Cristian Fiebre.

La música incidental cobra importancia dentro de la cinta, pues enfatiza varias secuencias. Este trabajo fue realizado por el músico, compositor y productor argentino Gustavo Santaolalla, productor de Café Tacuba, La Maldita Vecindad, Molotov y Julieta Venegas.

Al mercado en este mes

La banda sonora original y el disco Amores perros serán lanzados al mercado en este junio al mismo tiempo que la película, bajo el sello Surco/Universal. Ayer, Julieta Venegas filmó el primero de tres videos que llevarán el mismo nombre: Amores perros, con la dirección de Jorge Aguilera y la producción de Z Films. Los otros dos temas correrán a cargo de Control Machete/Ely Guerra y Café Tacuba.

Durante la filmación del video, en Cuajimalpa, Julieta Venegas dijo que para ella Amores perros es "un poco como de sufridera; no es así como tragedia terrible. La canción que yo interpreto trata el tema de una persona que se siente traicionada. En el coro se dice 'tus amores perros me van a matar'. Es cuando uno se confía y el otro lo traiciona. Se palpa ese sentimiento, esa sensación".

Se declaró fanática del cine mexicano y a Amores perros la definió como una gran película. "Por eso quise participar. Muchos de los actores ya los había visto antes, pero aquí se ven fenomenales".

ųƑPara ti, hay amores perros?

ųSí, sí hay. Son terribles... no, pueden ser buenos o malos. Los míos han sido buenos; incluso los amores malos han sido buenos.

Añadió que le han gustado los soundtracks de varias películas, como el de El fin del mundo, de Wim Wenders, pero que no ha aceptado actuar en películas porque respeta a los actores y ella no es uno de ellos. "Lo mío es la música; no soy actriz".

Expuso que le cuesta trabajo definir su estilo, "es muy personal; sí puedo diferenciarlo del primero al segundo disco (saldrá a la venta en agosto de este año). En este último compacto como que descubrí la guitarra; tiene acordeón, pero no me gusta basarme en una sola tonalidad, sino en varias. Las letras suelen ser personales... hablo en primera persona como un tipo, como alguien al que la vida lo ha tratado mal o bien".

Agregó que sí le agrada grabar videos. Para el de Amores perros el contacto se realizó por medio de Lyn Fainchtein. Expuso que no cree que se esté imponiendo el gusto de Lyn (antes, ésta estuvo involucrada en la selección de los temas de la película Todo el poder, de gran éxito comercial).

En referencia a que en el soundtrack participa el grupero Espuela de Oro, Julieta afirmó: "No escucho mucha música grupera, pero cuando llego a oír algo, pues me gusta; lo entiendo, pero no como para decir que en mi casa tenga discos de ellos".

--ƑA poco no te gusta la música grupera?

--ƑPor qué me lo preguntas así como (con tono de enojada) por qué no te gusta la música grupera? Sí me gusta, cómo no me van a gustar Los Tigres del Norte, si yo soy de Tijuana. Pero no es de que llegue a mi casa y ponga Tigres del Norte.

Sobre la estética visual de los gruperos, Julieta dijo que el hecho de que se vistan y se muevan como rockeros, está bien, porque lo importantes es entender que el rock es sobre todo una actitud. "He visto a un sonero tener una actitud rockera, Ƒcómo no la va a tener un grupero? Lo que define al rock es la gente que lo hace; es una forma de expresión. Si no hay lugares para tocar, pues la gente los inventa. Ahí está el caso de el Zócalo".

Por lo pronto, Julieta escucha, en su casa, el disco de Sonia López con la Sonora Sanatera y a Dámaso Pérez Prado.