LUNES 5 DE JUNIO DE 2000

Ť El conductor se fugó y no pudo ser identificado; investigará el MP

Muere arrollado el ciclista Fernando Avila; buscaba su pase a Sydney

Ť No llevaba casco y la ambulancia llegó media hora después, relata su compañero Luis Martínez

Rosalía A. Villanueva y Jorge Sepúlveda Marín Ť El ciclista Fernando Avila Vázquez, quien buscaba un lugar dentro de la selección que participará en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, murió ayer al ser arrollado por un automóvil cuando realizaba un entrenamiento por el Periférico, frente a Perisur. La agencia 64 del Ministerio Público en Tlalpan levantó la averiguación previa A64/825/00-6 y conjuntamente con la Policía Judicial investiga al conductor de un volkswagen sedán oscuro que no pudo ser identificado y se dio a la fuga.

El pedalista capitalino de 25 años acompañaba a un grupo de 70 competidores que cada domingo realizan los tradicionales paseos Bici-Gatos con trayecto de ida y vuelta de diagonal San Antonio a Cuemanco. El fatal accidente ocurrió entre las 8:30 y 9:00 horas, cuando los ciclistas apenas habían completado la primera de dos vueltas por el interior del Periférico.

"El iba adelante del pelotón. Ibamos rodando tranquilos. Yo venía enmedio cuando vimos que un vocho intentó cerrarse, parecía que el conductor estaba jugando y le pegó a la rueda trasera de Fernando. Salió volando y cayó de cabeza en el asfalto. No llevaba casco.

"Hubo una caída múltiple por la impresión, algunos chocaron entre sí y cuando reaccionaron y trataron de alcanzar al conductor pegando gritos de 'párenlo, párenlo', éste huyó. Ni tiempo tuvimos de ver las placas, sólo recuerdo que era negro. Vimos a Fernando sangrando, tratábamos de reanimarlo y le hablábamos; unas personas se acercaron para ayudarnos mientras otros pedían con un teléfono celular una ambulancia.

"Pasaron cinco minutos. La ambulancia llegó media hora después. Ya no había nada que hacer'', relata su compañero de equipo Luis Martínez, quien compartió vivencias deportivas y personales con el apodado Capi, que gustaba que le dijeran así porque se identificaba con el personaje del capitán cavernícola, decía en vida, por sus finos cabellos.

Martínez y Avila disputaban la única plaza varonil olímpica en la prueba por puntos que Fernando ganó en los Mundiales de Berlín en 1999, y como pareja, aspiraban calificar en Madison, luego de sus recientes actuaciones en las copas del Mundo en Rusia y Colombia, donde ocuparon la posición 17 y 10. "Eramos como hermanos y su muerte es una pérdida irreparable para el ciclismo.

"Cómo son las cosas. Hace una semana regresamos de Cali, habíamos hechos muchos planes en la pista del CDOM, porque estábamos seguros de que, por tener la sede mundial aquí en dos semanas, había más chance de ganar, y hoy, no hubo tiempo ni de saludarnos ni alcancé hablar con él'', dijo Martínez

-ƑCuando salen a carretera, tienen el apoyo necesario?

-Si lo dice porque Fernando no llevaba casco, por lo general entrenamos sin protección, pero a veces los automovilistas no tienen cultura y ponen en riesgo nuestras vidas. En el paseo ocurrió algo curioso antes del accidente. Hubo una caída y las dos camionetas que venían protegiéndonos se quedaron para atender a los muchachos. Cuando regresaron, a mi amigo, ya lo habían matado.

Como preseleccionados olímpicos, Avila y Martínez, quienes representaban al equipo Química San José, propiedad del padre del presidente de la Federación Mexicana de Ciclismo, Guillermo Gutiérrez, disfrutaban de una beca económica de CIMA, de 10 mil pesos mensuales, seguro médico y de vida.

-ƑQué pensaba de la participación olímpica en Sydney?

-El me decía que a quien le tocara o quien fuera a los juegos que representáramos a México dignamente. Yo nací en Cuba y me naturalicé mexicano, pero los dos teníamos muchas expectativas de competir en Madison, porque era un sueño que compartíamos. Lamentablemente él se nos fue y ahora me dejó a mi ese compromiso. Espero no defraudarlo.

El Ministerio Público Arturo Lona informó que la muerte del ciclista fue de traumatismo craneoencefálico, y que por ser "un hecho violento'' se levantó una averiguación previa. El ciclista fue enviado al Servicio Médico Forense para practicarle la autopsia, y sus familiares esperaban la entrega del cuerpo para ser velado anoche en una agencia funeraria al sur de la ciudad.

Al Capi, le sobreviven sus hijos Luis Fernando (2 años)y Cecilia (8 meses), y su esposa Claudia Martínez.

Ivar Sisniega Campbell, presidente de Conade, manifestó que el deporte mexicano está de luto por el fallecimiento de Fernando Avila, pues hasta donde sabía el pedalista no llevaba casco y muchas veces los automovilistas no calculan la separación de seguridad entre su auto y las bicicletas, lo que pudo haber ocurrido en esta ocasión.

Mantuvo el compromiso de que la Conade pagará el seguro de un millón de pesos a los familiares.