LUNES 5 DE JUNIO DE 2000
* Supera a naciones de Asia y del resto de AL
El país, primer lugar como exportador de mano de obra
Patricia Muñoz Ríos * México ya consiguió el primer lugar como exportador de mano de obra en el mundo, incluso supera a los países de Asia y del resto de América Latina.
Además, se caracteriza porque la mano de obra es muy "barata" y en su mayoría descalificada, incluso los bajos salarios en el país son considerados una de las principales ventajas comparativas de la economía mexicana en el mercado mundial.
En el informe Tratado de Libre Comercio de América del Norte, maquilización de la economía, empleo y salarios en México, elaborado por la Universidad Obrera, se apunta lo anterior y añade que a seis años de este acuerdo no se ha logrado frenar el flujo de trabajadores hacia el exterior, ni tampoco mejorar las remuneraciones en el país, mucho menos equipararlas con las de sus socios comerciales.
Precisa que México se ha convertido en este periodo en uno de los principales maquiladores del mundo, que para poder exportar depende de manera alarmante de importaciones, por lo que su producción reporta un escaso valor agregado.
En el marco de la apertura mundial, México se encuentra dentro de los países a los que le ha correspondido ser proveedor de mano de obra barata y abundante, tanto en territorio nacional, como en el extranjero; importador neto de alimentos a costa de la ruina del campo mexicano e importante destinatario de inversión de cartera o especulativa, indica esta investigación.
Reconoce que el país ha realizado profundas transformaciones en su estructura económica, tales como el combate a la inflación, apertura al exterior y privatización, con el fin de impulsar un crecimiento hacia afuera e insertarse a la economía globalizada y ha puesto en marcha diversos tratados comerciales para tener uno de los países más integrados a la economía externa.
Todo ello, sin embargo, no ha impedido que el país sea considerado el primer exportador de mano de obra en el mundo, sin que ello le haya producido ningún problema ético a sus gobiernos y basado fundamentalmente en el objetivo de atraer inversión extranjera directa. Así, el balance de seis años no es tan positivo para el sector laboral mexicano, dice este informe.
Indica que el país aumentó su dependencia comercial, pues el 88 por ciento de las exportaciones van al mercado estadunidense y 75 por ciento de las importaciones vienen de ese país; y aun cuando se han elevado las ventas no petroleras, 46.6 por ciento de éstas son de tipo maquilador.
Se añade que el país disminuyó sus exportaciones en estos seis años a Canadá de 2.7 a 1.56 por ciento; a Centroamérica de 1.24 a 1.2; a América del Sur de 3 a 1.61 del total y a Europa de 5.43 a 4.3 por ciento.