JUEVES 15 DE JUNIO DE 2000
* Astillero *
* Julio Hernández López *
Mucho se ha hablado de la presunta alianza secreta entre Francisco Labastida y Cuauhtémoc Cárdenas, cuyo propósito esencial sería impedir que Vicente Fox llegara a ser presidente de México.
En abono de tal suposición han obrado las constantes denuncias del propio Fox (una de ellas involucrando provocadoramente a la madre del michoacano), así como el terso trato y las amabilidades discursivas que más allá de los escenarios de obligada confrontación (como fue el segundo y último de los debates) el sinaloense ha dispensado a Cárdenas y las cuidadas reciprocidades de éste.
Guiños de condescendencia
No han faltado en este tramo quienes, desde la propia cúpula del PRI, han sonreído con aires de complicidad cuando el perredista ha arremetido contra el priísta. Lo esencial, según algunos de esos estrategas, sería que el ingeniero creciera en términos electorales, aun atacando a Labastida, para así arrebatarle votos a Fox y quedar en mejores condiciones de ser un aliado fuerte a la hora de aceptar los resultados electorales artificiosamente favorables al priísta.
Tan fuerte fue la percepción que el foxismo llegó a tener de ese supuesto acuerdo que, al desplegar una campaña de ofensas contra el perredista, renunció virtualmente a la natural esperanza de que se pudiera hacer algún pacto de defensa del voto, después de las elecciones, con la Alianza por México. Por ello, Fox y sus amigos se lanzaron en pleno a denunciar lo que a sus ojos era la gran traición de Cárdenas, consumada, según ellos, a partir de la sesión aquella del famoso hoy, hoy, hoy del predebate.
La faena de El Toreo
El pasado martes, en una emotiva reunión con mujeres, en El Toreo de Cuatro Caminos, Cárdenas debe haber hecho que se borraran las sonrisas complacientes de los presuntos genios electorales priístas.
El Cárdenas que los labastidistas esperaban fuese el gran convalidador del fraude patriótico en curso (el candidato priísta recién había dejado entrever su confianza del papel que jugaría Cárdenas, en una entrevista con el periodista Fidel Samaniego), presentó una postura de difícil reversa, de complicado incumplimiento: si existiera la percepción social de que los resultados del 2 de julio no provienen de un proceso limpio, o de que el gobierno presuntamente electo no tuviese legitimidad, debería convocarse a nuevas elecciones.
Cárdenas ha planteado su nueva postura en un marco de relativa condicionalidad. No está descalificando los comicios en puerta, pero está advirtiendo que "si" éstos no son limpios, no podrá haber reconocimiento a sus resultados ni legitimidad para quien pretenda asumirse como vencedor. De hecho, en su discurso del martes enumeró dos elementos de grave distorsión del proceso electoral: por una parte, el uso de la estructura gubernamental, los recursos públicos y los programas oficiales de corte social para promover el voto a favor del PRI, y por otro lado, la presencia de "operadores" electorales como los que cometieron el fraude de 1988.
Esos dos elementos no habrán de disolverse en los días que faltan para los comicios sino, por el contrario, habrán de consolidarse. Por tanto, los elementos de limpieza y transparencia no estarán dados, y el gobierno venidero no tendría legitimidad.
ƑQuién creyó que podía persuadir y mediatizar a Cárdenas, y hacerlo traicionarse a sí mismo, con el pretexto de la lucha patriótica contra la amenaza derechista con botas?
Pantallas sin otra regulación que el rating
Metido como está en los asuntos electorales, el presidente Zedillo no ha tenido tiempo de hacer algún exhorto a los dueños de las empresas de televisión para que cesen de difundir el estiércol al que llaman talk shows. Ya antes, a propósito de los igualmente repugnantes programas de nota roja, Zedillo consiguió que se cancelaran los de mayor escándalo y, aunque luego fueron creados otros en su sustitución, sí se logró cuando menos una cierta reducción de los niveles de violencia y morbo.
Es probable, sin embargo, que ahora el propio presidente Zedillo se abstenga de hacer exhorto alguno a sabiendas de que la voracidad empresarial de las televisoras no parece respetar ni atender otro criterio que no sea el del llamado rating. El Fondo Internacional de las Naciones Unidas de Ayuda a la Infancia ya intentó que los celosos burócratas de la Secretaría de Gobernación obligaran a los teledifusores a cambiar cuando me nos de horario las transmisiones de los programas que, a pesar de tratar temas absolutamente impropios para niños, son puestos en pantalla entre las 4 y las 6 de la tarde. La carta del órgano de Naciones Unidas no mereció la atención de los funcionarios mexicanos, embebidos como están en tratar de impedir la derrota de su partido.
Hoy, como continuación de esa travesía infructuosa, directivos del citado UNICEF se reunirán con miembros de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, para tratar de valorar los daños que a la audiencia infantil provocan tamaños dislates al aire. Alberto Ciurana, vicepresidente de programación de Televisa, mientras tanto, ha hecho emocionadas declaraciones respecto al éxito de programas como el de Hasta en las mejores familias, que habría alcanzado š30 puntos de audiencia! y que, como orgullosa muestra de las buenas cosas que hacemos los mexicanos, pronto se difundirá en Univisión, en Estados Unidos.
(Por si de algo les sirviera a los señores Zedillo, Carrasco y Limón Rojas, se les informa que en Venezuela, el gobierno de Hugo Chávez acaba de prohibir la transmisión de Laura en América, la porquería que ha sido recibida con alfombra roja en México. Diosdado Cabello, presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones, dijo que el gobierno de aquella nación ha tenido cierta tolerancia en espera de que los canales "se autorregulen", pero que esto no se ha dado sino en función "del rating", pues las televisoras entienden tal autocontrol "desde el punto de vista comercial y no social". El secretario de Educación (de Venezuela, desde luego), Héctor Navarro, expresó igualmente la preocupación por tales programas de sucio escándalo. Aquí, en las televisoras de México, mientras tanto, a la pionera Cristina Saralegui se han sumado las versiones nativas de Carmen Salinas ųaunque ayer condujo ese programa Talina Fernándezų, Rocío Sánchez Azuara, la tal Laura en América y el más reciente éxito, con Marta Susana...)
El 2 de julio ganará el que ya lo hizo en 1988
Si la contienda es limpia, y prevalece la justicia, el 2 de julio ganará quien ya lo hizo en 1988. Es decir: Holanda. Tan sugestivo comentario fue enviado por Oscar Velasco Fuentes a esta columna, enmedio de diversos correos electrónicos en los que se aborda la coincidencia de la final futbolística de la Eurocopa con los comicios mexicanos.
Francisco Javier Zaragoza, de la Universidad de Waterloo, reporta con buen sentido del humor que ese hecho ya había sido difundido cibernéticamente a otros mexicanos que como él viven en Canadá, dedicados a tareas académicas, a través de la AN5P, que es la Agencia de noticias del quinto piso, que es el nivel en el que está ubicada su oficina en la universidad mencionada. La falta de espacio impide compartir otros correos interesantes, de entre los que destacan los enviados por Salvador Barrera Figueroa, Juan Carlos Navarro, Jaime Sánchez García (de Ensenada), Karl Overmayer y Edgar Pavia. Todos ellos, por lo demás reparan en la pifia cometida por el fideicomiso de asuntos internacionales de esta columna, que convirtió de manera equivocada la hora anunciada para la citada final, que será a las 20:00 horas, en Rotterdam, y que pasará acá, en México, a las 13:00 horas, en pleno jolgorio electoral, y no a las 4 de la mañana del siguiente lunes. Total, futbol interesante para ver el 2 de julio, a la hora de votar, sí habrá...
Astillas: Porfirio declinó a favor de sí mismo... Cero censura, promete Fox en materia de creación artística, mientras unos jóvenes provocadores le gritan vivas al tiempo que ondean una bandera de Estados Unidos.
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