SABADO 17 DE JUNIO DE 2000

* Matiza su alerta ante el Grupo de Río


Hay nubarrones, no fragilidad democrática en AL: Zedillo

* Se comprometen mandatarios a realizar elecciones transparentes * Insisten en que se organice una nueva ronda de la OMC

zedillo-chavez-pastrana-jpg Rosa Elvira Vargas, enviada, Cartagena de Indias, Colombia, 16 de junio * El Grupo de Río matizó. Al final de un día de sesiones y frente a las reacciones provocadas la víspera, al propio presidente Ernesto Zedillo correspondió despejar suspicacias: vislumbrar "nubarrones'' sobre las democracias latinoamericanas, dijo, no significa que hoy éstas se encuentren frágiles. Y ex profeso, los presidentes elaboraron un documento en el que se comprometen a realizar elecciones periódicas en sus países, bajo principios de legalidad, transparencia y equidad, organizadas y sancionadas por autoridades de Estados independientes.

Apremiados por afinar la agenda regional con la de aquellas latitudes vitales para el logro de asociaciones y alianzas económicas, los mandatarios que integran el Grupo de Río reforzaron en varias "declaraciones especiales'' la Declaración de Cartagena, que con antelación habían consensuado sus cancilleres.

Sobre eso, el presidente mexicano admitió, al término de la conferencia de prensa: "le metimos un refuerzo'' al documento elaborado por sus equipos de trabajo. Así, producto de sus deliberaciones privadas, los mandatarios particularizaron en temas como la democracia, el mercado petrolero y, de manera especial, en el comercio internacional. Hubo uno más, dedicado a respaldar el proceso de paz en Colombia.

En lo que fue advertido por muchos como una especie de apoyo a los planteamientos que el jefe del Ejecutivo ha llevado a diversos foros internacionales ųy que no se ha cansado de recalcar en el paísų, el Grupo de Río insistió hoy en que "sin dilación'' se lance una nueva ronda de negociaciones en el foro de la Organización Mundial de Comercio (OMC), y que aquella sea "global, integral y sin exclusión de sector alguno''.

Se trata de concluir por esa vía ųsubrayaronų en la reducción efectiva de las barreras arancelarias y no arancelarias, para bienes y servicios, y asegurar la eliminación de subsidios a las exportaciones agrícolas de los países desarrollados, así como de cualquier factor "que distorsione'' el comercio mundial.

Para el Grupo de Río, en esa lógica, que además ųsiempre en voz del presidente Zedilloų no soslaya la censura recurrente a los globalifóbicos, resulta central que "en el corto plazo'' se logren condiciones de acceso "libre y transparente'' a los mercados, en especial de los países desarrollados, mismos que todavía "restringen el ingreso mediante requisitos de carácter técnico, cuantitativo, sanitario y antidumping, entre otros''.

Tres grandes apartados: democracia, seguridad humana y sistema financiero ocuparon la atención de este cuasi quinceañero instrumento regional de cooperación y co COLOMBIA_SUMMIT nsulta ųy del que, por cierto, se hará una revisión de objetivos y mecanismos, a propuesta del presidente venezolano, Hugo Chávez.

Por la mañana, Fernando Henrique Cardoso, de Brasil, introdujo el tema de la democracia, que si bien se movió en sentido similar al expresado por Zedillo en la ceremonia de apertura del jueves, fue percibido de manera distinta por algunos participantes. Concretamente ųa decir de representantes gubernamentales mexicanosų, el presidente peruano, Alberto Fujimori, intervino y no se refirió a los discutidos comicios recientes en su país, pero sí manifestó su esperanza de que se genere "un cambio de mentalidad'' en el mundo y ello conduzca a "un mejor entendimiento'' de las distintas realidades de los países.

En la conferencia de prensa, Zedillo hizo hincapié en el sólido avance democrático de América Latina: "lo que hemos señalado es que de tiempo en tiempo han ocurrido hechos que deben alertarnos y ocuparnos, pero que de ninguna manera nos llevarían a considerar que la democracia está frágil; no es lo mismo hablar de nubarrones que de cielos cerrados y tormentas, pues eso sí significaría fragilidad''.

Al parecer, sin embargo, en la reunión bilateral que tuvo con el propio Fujimori, el presidente mexicano habría abordado ampliamente el punto, pues la charla se prolongó casi 45 minutos, y más tarde, en la "declaración especial'', se subrayó la disposición del Grupo de Río a profundizar la calidad de la institucionalidad democrática mediante una mayor integración social y una participación "efectiva, ética y responsable de los ciudadanos''. Una creciente integración regional, apuntaron, incidirá en el fortalecimiento de la democracia y la convivencia pacífica.

Respecto a lo que ha dado en llamarse la "arquitectura financiera'', el tema fue introducido ųa petición expresa de los anfitrionesų por Zedillo, y más tarde, en conferencia, precisó que para lograr las reformas a las instituciones económicas multilaterales no debe usarse la presión, sino los métodos diplomáticos de la "persuasión''.

Dijo que en las deliberaciones matutinas se asumió, de entrada, que al haber pasado los momentos de mayor riesgo financiero que se presentaron en 1998, no hay las condiciones para desatar una reforma radical a ese sistema, pues no existe el mismo grado de temor que entonces.

Lo conveniente, subrayó, es fortalecer los organismos multilaterales internacionales, "porque precisamente en los países más avanzados existen corrientes y fuerzas que recientemente, con un gran impulso, han expresado su oposición a éstos o han producido propuestas para acotarlos en su actividad''.

Así, esas instancias no deben disminuirse, acotarse, ni mucho menos desaparecer, y sí, dotarlas de la flexibilidad necesaria para que ųcomo expresó apenas hace unos días en Washington ante los titulares de BID, FMI y BMų se doten de una mayor capacidad de financiamiento e incidan con más congruencia en relación con los objetivos de desarrollo nacionales, como el combate a la pobreza.

"Queremos ųhabía dicho Andrés Pastrana, a manera de resumen y ante el propio presidente del BID, Enrique Iglesiasų financiamiento para el desarrollo social, no sólo para el crecimiento económico''.

Insistió en que la atención al funcionamiento del sistema financiero no debe llevar, sin embargo, a soslayar las perspectivas del comercio mundial, pues "silenciosamente, a veces, y en otras ocasiones con estruendo, han irrumpido fuerzas ųreclamando incluso defender los intereses del puebloų que tratan de frenar la apertura de los mercados de los países más desarrollados para nuestras exportaciones. Los presidentes lamentamos hoy el fracaso de la reunión de la OMC (Seattle, diciembre de 1999)'', y ante ello acordaron llamar a remprender una nueva ronda liberalizadora que permita la definitiva apertura comercial.

De Cartagena, los mandatarios del Grupo de Río se van también con un perfil de lo que el subcontinente llevará como posición conjunta a la Cumbre del Milenio, a celebrarse en septiembre en Nueva York. Asimismo, exhortaron a los principales países exportadores de petróleo a realizar esfuerzos adicionales para estabilizar los precios, "congruentes con los intereses de mediano y largo plazos de oferentes y demandantes''.

El anfitrión, Andrés Pastrana, clausuró el encuentro, y precisamente para él resultó central destacar la coincidencia de la cumbre en la responsabilidad compartida de enfrentar el narcotráfico y todos los delitos que le son inherentes, así como establecer un mecanismo multilateral de evaluación de los compromisos adquiridos en ese sentido.

En su turno, el presidente de Costa Rica, Miguel Angel Rodríguez, pidió un aplauso de despedida para el mandatario de República Dominicana, Leonel Fernández, quien en agosto entregará el poder.

De pronto, en la misma sesión de clausura, y disculpándose por romper el protocolo, el nuevo presidente de Uruguay, Jorge Batlle, solicitó hacer lo propio con el presidente Zedillo, de quien ųdijoų se extrañarán sus intervenciones "siempre inteligentes y atinadas''. Pidió felicitarlo "por todo lo que ha hecho por su país''.