MARTES 20 DE JUNIO DE 2000

* Los iluminados, nuevo libro del escritor argentino publicado por Atlántida


Sin rodeos ni encubrimientos es preciso desnudarse ante el lector, dice Aguinis

* Autor de La cruz invertida, novela con la que se hizo merecedor del Premio Planeta

* Con los galardones ''se recompensa a los que no han sido bien tratados por editores y crítica''

César Güemes * La novela con que obtuvo el Premio Planeta, La cruz invertida, que prohibiera en su momento la dictadura militar de su país, cuenta ya con 75 reediciones. Otro tanto ha ocurrido con libros suyos como La gesta del marrano o Elogio de la culpa. Marcos Aguinis, uno de los más leídos prosistas argentinos, dos veces nominado para el Premio Educación para la Paz de la UNESCO, estuvo en México a fin de dar a conocer su nueva obra, Los iluminados, que se publica bajo el sello de Atlántida.

Desde luego que la lectura muy regular e incluso entusiasta que han venido teniendo sus producciones es un tema de interés hacia el novelista. Lo que percibe al respecto, dice en la conversación, es ''un sentimiento ambivalente. Por un lado casi la certeza de que voy a ser leído. Y por otro la tensión y la ansiedad por no defraudar al público que un nuevo libro genera. Pienso que esto me obliga a una doble responsabilidad. Para ello es importante volcar pasión, entusiasmo y riesgo en el texto. Es preciso desnudarse ante el lector y contar lo que uno desea compartir sin rodeos, sin encubrimientos".

ųEres médico, además. No es extraña una multiplicidad de intereses intelectuales, pero el tiempo siempre se antoja breve para satisfacerlos.

ųEn mi caso he sido muy metódico. Recuerdo el consejo que dio José Ingenieros: se descansa de un trabajo haciendo otro. En realidad siempre quise ser escritor, pero era una vocación secreta. Por eso tuve que hacer un gran rodeo, toqué diversos puntos hasta que terminé escribiendo. La etapa de médico, sin embargo, me fue muy útil porque el consultorio da acceso a la condición humana en toda su pluralidad: llega a uno el débil, el fuerte, el viejo, el vanidoso. Eso me resultó muy bueno para estar alerta ante los fenómenos de la emoción y la conducta humanas que por lo general pasan inadvertidos.

La justicia no existe en el arte

ųHas recibido una cantidad de premios muy considerable. Si son varios y consecutivos, Ƒpara qué funcionan?, Ƒcómo ayudan a la obra?

ųCreo que no existe justicia en el arte, porque hay una enorme cantidad de buenos libros, pinturas o partituras musicales que no salen del ámbito de su autor y se mueren antes de ver la luz. Y por otro lado hay obras mediocres que tienen periodos de éxito. La poca justicia que se da es que en general las obras mediocres terminan por perecer y las buenas que alcanzan la luz en muchos casos perduran, pero no siempre.

''De modo que los premios son un auxiliar muy útil para que autores poco conocidos se difundan y para recompensar en ciertos casos a artistas que no han sido bien tratados por los editores y la crítica. A mí, por ejemplo, el Premio Planeta me produjo un ambiente de doble cara: se extendió rápidamente mi obra y se suscitó una intensa envidia por parte de colegas y de críticos que no sabían cómo descalificar ese reconocimiento.''

ųLas afirmaciones en Los iluminados, así sea novela, son fuertes, debieron de implicar un periodo de investigación. Podemos concluir con ello.

ųMe permití incluir aspectos que necesitan el respaldo de una verdad documentada. Por una parte están las sectas destructivas, fanáticas, racistas, vinculadas a milicias y a organizaciones neonazis, y por otra la corrupción de América Latina y en el caso particular de Argentina, que nos ha hecho tanto daño.

''La problemática que da sustento a la obra se nutre también de las dudas en torno de lo que ha ocurrido con quienes sufrieron persecución y tortura durante la última dictadura militar y finalmente la instalación de la droga en Argentina, hecho que marcó un cambio en la reciente década.''