MIERCOLES 21 DE JUNIO DE 2000
* Mueren 12 bebés en un incendio en guardería
Anuncia Cardoso plan para frenar la criminalidad
* Busca también fortalecer el combate al narcotráfico en Brasil
Dpa, Ap y Reuters, Brasilia, 20 de junio * El presidente de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, anunció hoy un Plan Nacional de Seguridad Pública para frenar el alarmante aumento de la criminalidad y fortalecer el combate al narcotráfico, que entre sus medidas prohíbe temporalmente el registro de armas y da una mayor participación al ejército en la seguridad interna.
"No podemos continuar aceptando la imagen que tenemos de nuestro país, marcada por la acción continua de la violencia y el sentimiento de falta de punibilidad", declaró Cardoso al anunciar el proyecto de mil 700 millones de dólares al año hasta el 2002, que será administrado por el Ministerio de Justicia.
El plan, también llamado "Dígale no a la violencia", es anunciado una semana después de que la televisión transmitió en vivo el asalto de un autobús con seis pasajeros, incidente que estremeció a la población con el desenlace fatal de una rehén muerta en una apresurada operación policial.
El delincuente fue asesinado por asfixia por los policías que lo trasladaban, herido, a un hospital.
La principal de un centenar de medidas es la prohibición, por seis meses, del registro de armas en el país, mientras el Congreso debate un proyecto de prohibición de posesión de armas de fuego que enfrenta duras presiones por parte de fabricantes y comerciantes de armamentos del país.
El plan incluye además la participación de militares en tareas de apoyo a los agentes de la policía federal en el combate al narcotráfico en fronteras, puertos, aeropuertos y carreteras.
"Las fuerzas armadas tendrán recursos específicos para poder reforzar sus unidades de frontera, especialmente en la región amazónica", dijo el Cardoso.
No obstante, el mandatario socialdemócrata no cedió a llamados de algunos dirigentes políticos que querían a las fuerzas armadas en las calles de los principales centros urbanos de Brasil, la nación más violenta de América del Sur después de Colombia.
La iniciativa del gobierno prevé, asimismo, la contratación y entrenamiento de nuevos policías, la construcción de nuevas prisiones, la modernización de las unidades de investigación criminal y el incremento de la iluminación pública en todas las ciudades y poblados del país.
"Por detrás de la llamada violencia social, duele ver el sufrimiento humano, personal, de las víctimas", dijo Cardoso, quien explicó que no servirían "las medidas de impacto que hacen recordar la época del autoritarismo. Precisamos de medidas continuadas, cívicas, responsables, enérgicas y duras, pero que tengan el apoyo de la sociedad".
Pero el plan fue criticado por no abordar problemas para hacer cumplir la ley, cuando sólo una fracción de los homicidios son investigados y aún menos son condenados.
Las medidas anunciadas "son bien intencionadas", dijo el analista Luciano Díaz, sin embargo "no abordan las grandes cuestiones de la corrupción policial, la falta de investigación de los crímenes y la estructura misma de la fuerza policial, que es ineficiente e inefectiva".
En otro orden, al menos 12 niños de entre uno y tres años murieron hoy en un incendio en una guardería municipal de Uruguaiana, en el estado de Río Grande do Sul.
Aunque se ignoran por el momento las causas de la tragedia, peritos del cuerpo de bomberos coincidieron en que una de las estufas eléctricas colocadas en una de las salas estalló y cayó al piso, mientras informes radiales dijeron que en el lugar sólo se encontró un extinguidor de incendios, que estaba descargado.