DOMINGO 25 DE JUNIO DE 2000

* Representan un riesgo para el derecho al sufragio, informan al IFE


Reportan consejeros locales la existencia de 65 retenes

Mireya Cuéllar * Los consejeros de Chiapas informaron al Instituto Federal Electoral que en esa entidad existen alrededor de 65 retenes (seis del EZLN), 21 campamentos y diez instalaciones militares; entre 15 y 16 grupos de civiles armados (paramilitares), que implican un riesgo para el derecho ciudadano del sufra- gio, en cuando menos cuatro de los doce distritos.

En un informe elaborado a petición del Consejo General ųen el que reiteradamente se pide al IFE que solicite al Ejército el acuartelamiento de las tropas, situación que ya fue anunciada por el secretario de la Defensa Nacionalų, los consejeros del distrito uno, con cabecera en Palenque, refieren que "identifican siete retenes" en los municipios de Palenque, Chilón, Tila; once bases o instalaciones militares en Chilón, Palenque, Sabanilla, Salto de Agua, Tila y Yajalón.

En el distrito dos, de Pichucalco, la presencia militar es en El Bosque y Simojovel, donde se localizaron tres retenes ųen el tramo carretero entre la cabecera municipal de El Bosque y la de Simojovel; tramo carretero de puerto Cate-San Andrés Larráinzar.

Con cabecera en Ocosingo, el distrito más conflictivo del estado es el número tres. Hay presencia militar en sus municipios de Altamirano, Las Margaritas y Ocosingo, mediante retenes eventuales y permanentes.

Además están las instalaciones de la 39 Zona Militar, en Ocosingo, y destacamentos en El Momón y Amatitlán, Las Margaritas. También, un destacamento de seguridad pública en La Trinidad y un cuartel militar en San Quintín, Ocosingo.

En el municipio de Altamirano los consejeros identificaron dos retenes eventuales del Ejército; en el de Las Margaritas otros siete intermitentes y uno permanente, y en Ocosingo ocho eventuales y 19 permanentes.

Es en Altamirano donde el Ejército Zapatista de Liberación Nacional mantiene tres retenes eventuales; otros dos en Las Margaritas y uno permanente en Ocosingo.

Los consejeros del IFE en ese distrito consideran que "la inseguridad que prevale en el municipio de Altamirano implica un riesgo para el derecho ciudadano del sufragio libre en varias casillas", y señalan que los trabajos de capacitación electoral y educación cívica se han visto obstaculizados por la polarización política que divide a varias comunidades, a la apatía y al temor a sufrir agresiones durante la jornada electoral.

Otro de los problemas que el IFE tuvo en esa región se derivó de la práctica comunitaria de los usos y costumbres. A 7 mil 823 mujeres no se les permitió ser funcionarias de casilla y 6 mil 80 notificaciones ni siquiera se pudieron entregar.

Así, en el distrito tres los consejeros no sólo pidieron al IFE que se suspendan las movilizaciones del Ejército, sino "que los ciudadanos militares que deban ejercer su derecho al sufragio, acudan a la casilla que les corresponde sin uniforme, en vista que el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, en su artículo 219 párrafo cinco, establece que no tendrán acceso a la casilla personas que se encuentren armadas".

El cuarto distrito, de Ocozocuautla, tiene una gran cantidad de instalaciones militares; el campo 31 C, en Berriozábal; el 31 E, en Chicoasén, que resguarda las instalaciones de la presa hidroeléctrica Manuel Moreno Torres; la base naval del municipio de Tecpatán, que protege la presa Nezahualcóyotl, y la guarnición del aeropuerto Francisco Sarabia, en Cozocuautla. Ahí las condiciones para la emisión del voto están dadas siempre y cuando no haya "lluvias torrenciales o cortes de caminos".

En el distrito cinco, con cabecera en San Cristóbal de las Casas, hay 16 campamentos, y cinco retenes militares permanentes, en Chenalhó. Mientras que en Larráinzar los campamentos son cuatro y los retenes tres; en Pantelhó hay un campamento y un retén eventual, y tres en San Juan Chamula.

Son los consejeros de este distrito los que reportan que, además de los miembros del Ejército, en su jurisdicción hay elementos de Seguridad Pública estatal, de la Policía Federal Preventiva, de Migración, así como entre 15 o 16 grupos paramilitares o civiles militarizados, "que operan en diferentes regiones del estado".

En los distritos seis, siete y ocho no habrá problema, ya que no hay retenes ni cuerpos policiacos en abundancia, según el reporte. En el noveno distrito, de Tuxtla Gutiérrez, no existen retenes, pero están asentadas las sedes de la Séptima Región Militar y la base aérea militar número seis.

En Motozintla, en el décimo distrito, por su condición de frontera, "existen retenes de manera habitual". En Mazapa de Madero hay un reten de migración, donde también hay elementos de la Policía Motorizada. En Frontera Comalapa también hay dos retenes. En Huixtla, que es la cabecera del distrito 11, hay un solo retén en la caseta de cobro de Caminos y Puentes Federales. Mientras que en Tapachula, cabecera del distrito 12, los retenes son dos.