DOMINGO 25 DE JUNIO DE 2000
* Famoso en su país, era exponente de la música cuartetera
Muere el cantante argentino Rodrigo Bueno
Afp, Buenos Aires, 24 de junio * El conocido cantante cuartetero Rodrigo falleció este sábado en un accidente de tránsito a los 27 años, cuando se encontraba en la cima de una insólita fama, sustentada en la veneración de adolescentes de sectores populares y en la gran exposición mediática.
Rodrigo Bueno, conocido como El Potro, murió hoy en un accidente de tránsito en una autopista próxima a Buenos Aires, cuando retornaba a la capital argentina de un recital que había ofrecido en la ciudad de La Plata (62 km al sur). La camioneta que conducía chocó contra otro vehículo.
En el accidente también falleció Fernando Olmedo, hijo del extinto actor cómico Alberto Olmedo.
Rodrigo había desarrollado una meteórica carrera que lo llevó a ganar una gran popularidad en muy poco tiempo, con masivos recitales de música cuartetera, un ritmo con gran arraigo en la provincia de Córdoba (centro del país), pero que se extendió a toda Argentina por su influencia y la de Mona Jiménez, el precursor de ese género.
Los fines de semana ofrecía hasta tres recitales por noche en clubes de barrios populares de todo el país, ante el creciente fanatismo de miles de adolescentes, principalmente del sexo femenino.
Medios de prensa resaltaron que el joven artista falleció el mismo día en que se cumple el 65 aniversario del deceso de Carlos Gardel, en un accidente de aviación en Medellín, Colombia.
Sólo minutos después de su muerte, centenares de jóvenes se acercaron con flores y fotos del cantante hasta el cementerio de Ezpeleta, cerca del lugar del accidente, en donde se le hizo una autopsia.
Se estima que serán miles los que se acerquen al velatorio en el municipio de la ciudad de Lanús (suburbio sur de la capital argentina), donde esta noche iba a ofrecer un recital.
Semanas atrás, el artista cumplió uno de sus sueños al visitar en Cuba a su ídolo, el futbolista Diego Armando Maradona, quien realiza en La Habana un tratamiento contra las drogas, y ambos jugaron un partido de futbol.
Su rápida proyección estuvo basada en una impresionante presencia en los medios de comunicación, con apariciones diarias en varios canales de televisión, notas en las revistas del corazón y en otras publicaciones que se dedicaban a analizar su gran arraigo popular.