VIERNES 30 DE JUNIO DE 2000

* Llama a resistir las presiones de quienes invocan al viejo proteccionismo


La solución de la pobreza está en la liberación comercial: Zedillo

* El presidente Alfonso Portillo confió en que el mercado guatemalteco no sea comido por el mexicano

Patricia Muñoz Ríos * El presidente de México, Ernesto Zedillo, hizo ayer un llamado a "resistir las presiones de quienes se oponen al libre comercio con argumentos que invocan el viejo proteccionismo, caduco y desacreditado por injusto", y pidió no hacer caso a estas voces, pues la solución a problemas como la pobreza, se encuentra en el intercambio comercial y la participación activa en la economía mundial.

En un desayuno que el sector privado ofreció a los mandatarios de El Salvador, Honduras y Guatemala, con motivo de la firma del Tratado de Libre Comercio entre México y estas naciones, el jefe del Ejecutivo alertó contra "las presiones proteccionistas de algunos grupos, que argumentando supuestos propósitos altruistas nos quieren privar a los países en desarrollo de las oportunidades que ofrece la economía global".

Al referirse al acuerdo firmado ayer, aseguró que este es un gran paso hacia la integración regional y en este sentido, el presidente de Guatemala, Alfonso Portillo, señaló que adicional a la apertura comercial pactada, en el futuro cercano, estas cuatro naciones tendrán que negociar asuntos como la unificación monetaria, el libre tránsito de personas, el comercio de servicios y tomar convenios sobre derechos laborales y hasta de medio ambiente.

Estuvo de acuerdo con el mandatario mexicano en que más allá de las tendencias de los gobiernos "de izquierda o de derecha", las economías de la región, ya no pueden estar cerradas, y apuntó que aquellos que estén ahora de acuerdo con el proteccionismo, realmente "no saben lo que pasa". Reconoció sin embargo, que el talón de Aquiles de la globalización, es que a pesar de que ha crecido el intercambio económico y comercial, casi la mitad de la población mundial vive con menos de dos dólares por día.

Alfonso Portillo se mostró confiado en que el mercado guatemalteco no será "comido" por México e incluso apuntó que no hay miedo de este tratado, ni siquiera de que los grandes corporativos financieros, bancarios o comerciales mexicanos se puedan asentar en su país, y advirtió: "Guatemala dejará de ser ese lugar folclórico para empezar a convertirse en un país respetado, que puede competir en el mundo globalizado".

Al respecto, el presidente Zedillo aseguró que los países que han logrado vencer el atraso económico en el último siglo han seguido una estrategia con elementos comunes que son: apertura al libre comercio, a la inversión y a la tecnología.

Dijo que las economías abiertas tienden puentes de progreso con el resto del mundo, mientras que las cerradas se aíslan y caen en la inmovilidad, e instó a "resistirnos a las presiones proteccionistas".

El mandatario aseguró que la solución a los problemas más importantes de nuestros países, como las carencias sociales, la pobreza, la desigualdad, la injusticia, tienen que resolverse a través de una participación activa en la economía mundial y particularmente en el comercio.

El presidente de El Salvador, Francisco Flores, a su vez, señaló que su gobierno es "amigable" a la inversión extranjera, pues establecer ahí una empresa sólo cuesta 50 dólares y cinco días de trámites, además, los bancos ofrecen tasas competitivas y tienen una legislación sencilla.

A nombre del presidente de Honduras, William Handal, expuso que el tratado firmado ayer ofrece oportunidades de desarrollo para la región y mecanismos para impulsar el intercambio económico, lo cual es fundamental para la zona, pues el comercio centroamericano no ha alcanzado su potencial.

En el acto ųorganizado por el sector empresarialų fue evidente el desorden, ya que ni siquiera se contó con acreditaciones para la prensa nacional y extranjera, y los reporteros locales y los centroamericanos que acompañaron a los presidentes visitantes sólo tuvieron acceso al final del mismo.