* El artista inaugura su muestra Miscelánea en el Museo de Arte Moderno


Alejado del color, Roberto Turnbull

decidió crear cosas ''más espontáneas''

* Incluye cuadros, dibujos y esculturas que se exhibieron en la Universidad de Guadalajara

* Su obra se nutre con pedazos de desecho de mármol, piedra, madera y ónix, entre otros

Merry Mac Masters * En cierto momento a Roberto Turnbull (DF, 1959) le estorbó el color. Hasta entonces su obra había sido ''más pintura", a la búsqueda de que ''funcionaran" los colores. El resultado fue que empezó a hacer cosas ''mucho más espontáneas" de cuando pretendía ''armonizar" su quehacer por medio del colorido. Ahora sus cuadros son monocromos como ocurre con las 40 piezas que integran su exposición Miscelánea que llega al Museo de Arte Moderno (MAM). Curada por Carlos Ashida, y proveniente del Museo de las Artes de la Universidad de Guadalajara, la muestra también comprende 23 dibujos y una docena esculturas.

 

Materiales para el contraste

 

Permean, la obra de Turnbull, elementos de desecho como pedazos de mármol, piedra, madera, ónix, hueso, vidrio, aplicados a manera de collage. Materiales fríos y calientes dan un buen contraste. Sobre el empleo de estos desperdicios, el artista explica: ''En primer lugar es más barato y, por otro lado, checa muy bien (la idea de) desecho con desecho. Esto viene un poco del grabado de donde tomaba todos los desechos que salen cuando cortan las planchas ųsobraban tiras de cobre o de zincų, para otras personas en talleres donde trabajo.

''Después, cuando formatean estas planchas grandes de metal en el papel, cortan éste para darles un formato y resulta que esas tiras de desecho, de grabado, si las pones en la del papel, también de desecho, entonces coinciden. O sea, el desecho formatea o encaja con el desecho.

''Allí empecé a hacer una serie muy extensa, que todavía no acabo, de grabados que me llevaron a utilizar formatos muy largos. De alguna manera y sin que fuera necesario querer repetir o hacer lo mismo, empecé a pegar pedacería, no sólo desechos, sino también pedazos de madera."

Al igual que pueden ser materiales encontrados, para otros, Turnbull tiene que ir, por ejemplo, a una marmolera, a la parte donde tiran el mármol que ya no es vendible. Trabajar con materiales en modalidades no tradicionales requiere de soluciones que el artista describe como simples, a fin de dejar que el material siga funcionando y no cancelarlo con pintura.

 

Síntesis de la intención

 

Egresado de la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda, de la generación de Germán Venegas, Gustavo Monroy y Alfonso Mena, entre otros, si hoy día tiene compañeros que ''nada más están con la computadora", Turnbull conserva el gusto por el ''trabajo físico y manual" del arte.

Del grabado siempre le llamó la atención lo ''automático" del proceso en donde ''tienes a, b, c, y no se puede alterar el orden". Apunta que el grabado le ayudó mucho, es ''la cabeza" para disciplinarse en la pintura.

No obstante que siempre le gustó la escultura, Turnbull advirtió que era de mucho oficio. Durante una estancia en Guadalajara, el artista se acercó al escultor Paul Nevin, quien lo invitó a trabajar en su taller donde permaneció un año aprendiendo ''herrería muy refinada".

Sin embargo, como sintió que nunca iba a dominar el soplete o la máquina de soldar, entonces, optó por dejarlo y hacer otras cosas, a lo mejor ''más modestas y menos perdurables", pero en donde fuera más independiente, pues para Roberto Turnbull en su obra lo que importa es la síntesis de la intención a la hora de trabajar.

(La exposición Miscelánea se inaugura hoy, a las 20:00 horas, en el Museo de Arte Moderno que se ubica en avenida Paseo de La Reforma y Gandhi, Bosque de Chapultepec.)