JUEVES 13 DE JULIO DE 2000
Ricardo Olayo y Angel Bolaños * El juez 55 penal, Rafael Guerra Alvarez, encargado del caso Stanley, será cambiado desde hoy al juzgado 64 como una medida que ha generalizado el Consejo de la Judicatura del DF para evitar que surjan vínculos de dependencia con el personal o alguna otra instancia, anunció el presidente del Tribunal Superior de Justicia, Juan Luis González Alcántara.
El magistrado indicó que la rotación pretende también anular la sospecha en el manejo del turno en que se asignan las averiguaciones previas de la Procuraduría de Justicia a los jueces, mecanismo que hasta hace dos años era controlado por el propio tribunal.
Ayer, a punto de separarse del caso Stanley, el juez Guerra admitió: "desde el punto de vista jurídico es un expediente muy interesante que me hubiera gustado resolver", y rechazó las acusaciones de "juez de consigna" que en algún momento hizo en su contra el abogado de Mario Rodríguez Bezares, Marco Castillejos.
La rotación no representa ningún problema ni demora alguna para este caso, "lo único que cambia es el titular", dijo Guerra, quien hace casi un año, el 27 de agosto de 1999, recibió la consignación de Paola Durante Ochoa, Luis Ignacio Amezcua Contreras, Mario Rodríguez Bezares, Erasmo Pérez Garnica, José Luis Martínez Delgado y Jorge García Escandón, por el homicidio del comediante de Tv Azteca.
Por separado, el presidente del tribunal coincidió en que el nuevo titular del juzgado 55, Rafael Santa Ana Solano, deberá dictar una resolución conforme a derecho según las pruebas que se encuentran en 56 tomos y 39 anexos.
De la existencia de jueces de consigna, el magistrado estableció: "Lo que la literatura popular y en los medios se dice juez de consigna es porque tenían una vinculación estrecha a la Procuraduría General de Justicia. Si notáramos que hubiera un sometimiento a una de las partes, ese juez sabe que tiene una responsabilidad. De ahí deriva un poco la política que adoptamos en el Consejo de la Judicatura para que los jueces no permanezcan en su juzgado en forma indefinida".
Guerra reviró por su parte los señalamientos y quejas que hay en el Consejo de la Judicatura: "Los jueces de consigna sólo existen allá afuera; nosotros siempre hemos actuado en estricto apego a la ley y con total transparencia".
Para reforzar su declaración, dijo que en los dos años y ocho meses que estuvo al frente del juzgado, de aproximadamente 200 sentencias, tanto absolutorias como inculpatorias, sólo cuatro fueron revocadas. Y entre los casos "especiales" que le tocó resolver, recordó el del líder priíosta de los pepenadoresm, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, a quien absolvió en un caso de despojo.
Otro caso: el juezs 61
Al final de la celebración del Día del Abogado, el presidente del TSJDF se refirió al manejo del turno en que se reciben las averiguaciones de la PGJDF. Esa era antes una tarea del tribunal y ahora, agregó, "hay personas que se quejan de que está siendo dirigido el turno.
Pero en el Consejo de la Judicatura hemos considerado que independientemente de que pudiera en alguna medida --no nos consta que así se haga-- dirigirse, pues tomamos decisiones que afectan esa cuestión del turno porque a los jueces los estamos cambiando. El que se envíe un expediente a un juzgado y después se cambie al juez, pues ese posible compromiso que hubiera, pues se desbarata".
En el caso concreto del juez Rafael Guerra, dijo que le reconoce su desempeño por las presiones propias de su trabajo y a pesar de las quejas que ha habido de la Procuraduría de Justicia del DF y de la defensa de los inculpados en el caso Stanley, por una supuesta iniquidad en la promoción de pruebas.
El magistrado indicó que el Consejo de la Judicatura puede analizar si abre un expediente de oficio para investigar administrativamente al juez Eugenio Ramírez, encargado del caso Parcero López, pues se ha hablado de irregularidades en su proceder.
Dijo que desconoce que el citado juez se hubiera llevado el expediente de Parcero de su anterior juzgado, el 58, a su nueva responsabilidad en el 61, pero anticipó que a algunos abogados les gusta litigar en los diarios y su denuncia no puede ser tomada en cuenta sin elementos.
"Desde hace seis meses estamos cambiando a los jueces, y aunque eso crea un gran temor en algunas personas, lo hacemos por higiene, por cumplir con el requisito de transparencia", sin riesgo de que haya dependencia con el personal del juzgado o alguna otra instancia.
Una de las ideas que animan la rotación es que "no se hable del juzgado del juez", sino que éste pueda atender los asuntos en otras sedes y de hecho los cambios se dan entre cinco y 10 por mes, a partir de enero pasado, informó el magistrado presidente del TSJDF
Como opciones en el caso del turno, dijo que algunos legisladores del PRI, PRD y futuros del PAN han hablado de la necesidad de cambiar este mecanismo para ganar transparencia y que la procuraduría pueda anticipar a qué jueces les corresponde. Lo cierto es que hay una desigual carga de trabajo de la que ha enterado a la dependencia.
* Es un proceso de rotación normal, afirma el magistrado González Alcántara
Cambian al juez que seguía el caso Stanley