VIERNES 14 DE JULIO DE 2000

* Las peleadoras estamos desprotegidas, señaló la ex chava banda


Gloria Ríos, pionera del boxeo femenil, enferma y sin ayuda

* Estoy como un recién nacido, pero me levantaré, afirmó * La CBPDF promete apoyarla

Carlos Hernández * De ser una chava banda y andar en una vida turbulenta, Gloria Ríos ingresó a una profesión igual de difícil: el boxeo femenil.

Y se convirtió, el 3 de julio de 1999, en la primera mujer en subir a un cuadrilátero del Distrito Federal. Al ser una de las pioneras de la disciplina, Gloria disfrutó de la expectación que provocó el llamado pugilismorosa, pero también sufrió las dificultades de todos los inicios.

Habla de su experiencia de tres peleas profesionales: "El boxeo fue para mí como una nueva vida, no sabes cuánto me llegó a gustar. Además, fue una válvula de escape para salir de donde andaba. Pero también me di cuenta que las mujeres estamos desprotegidas, porque cuando te pones mala no tienes ni para el médico".

Desde hace tres meses, Gloria pasa la mayor parte del tiempo recostada o sentada, porque intensos dolores en la espalda le impiden estar de pie. Camina lentamente y encorvada. Su dieta se reduce a manzana, avena con agua y gelatina, ya que su estómago se encuentra muy delicado.

"Ando como un bebé, como un recién nacido y necesito ayuda para todo, para levantarme, para comer, para ir a cualquier lado", dice con desesperación la boxeadora, quien en sus buenos tiempos combinaba el pugilismo femenil con trabajos de albañilería "para estar más fuerte y tener mejor condición, además de que así tenía un ingreso cada semana y no de vez en cuando, como sucede en el boxeo".

Sus problemas se iniciaron con fuertes dolores de estómago ų"un doctor me dijo que fue por comer pollo descompuesto, pero después se me infectaron los riñones". Aún así siguió asistiendo al gimnasio, porque tenía programada una contienda, "pero ahora ya casi no me puedo mover".

Con dos hijos y un esposo obrero, Gloria recurrió a Xoco y al Hospital General, donde le recetaron una medicina contra el dolor, "pero cuatro pastillas cuestan 500 pesos", además de que debe tomar de tres a cuatro bebidas Gatorade, que tampoco puede comprar. "También tengo que realizarme unos estudios para saber exactamente qué tengo, pero esos cuestan más caros".

A un año de su aprobación, el boxeo femenil en México se encuentra en una etapa difícil. Las pugilistas tienen contiendas cada tres o cuatro meses con sueldos de mil 200 pesos por batalla. "Para cada pelea yo realizaba un gasto como de mil pesos, así que me quedaban solo 200", señaló.

En el aspecto médico, las boxeadoras son afiliadas al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) dos días antes de su pelea y cinco días después. El resto del tiempo, la mayor parte del año, están sin alguna prestación, salvo las consultas gratuitas que reciben en los Servicios Médicos de la Comisión de Box Profesional del Distrito Federal.

"Creo que necesitamos más protección en el pugilismo, no sólo las mujeres, sino todos los boxeadores en general", expresó y mencionó que algunos de sus compañeros ni siquiera tienen dinero para el pasaje.

De 28 años, Gloria no recuerda alguna enfermedad grave que hubiera tenido antes que ésta. Por el contrario, sus planes iban en grande y le daban para soñar con un título mundial, aunque en el inicio de su carrera sumaba dos derrotas.

Sin embargo, había debutado con una victoria, lo que la convirtió en la primera boxeadora que obtuvo un triunfo profesional en la capital del país.

La peleadora no sólo solicitó ayuda de la CBPDF, sino también un aliciente moral del medio boxístico, ya que "me ausenté durante tres meses y mis entrenadores ni siquiera se han preocupado en llamar por teléfono para preguntar qué me pasó".

ųƑPiensas regresar al boxeo?

ųGanas me sobran, pero ahorita lo más importante es estar al ciento por ciento otra vez. Y lo que son las cosas, antes de enfermarme me llovían ofertas.

Después de unos instantes de silencio, Gloria recupera el ánimo y promete: "Si salí de la banda, del alcohol y las drogas, esta enfermedad no me va a dejar en la lona. Voy a levantarme y a seguir peleando".

La Comisión la apoyará totalmente

Por su parte, el presidente de la CBPDF, Víctor López Esquivel, dijo desconocer el caso, "pero vamos a ver la forma de inscribirla al Seguro Social, la comisión absorberá todos los gastos y la apoyaremos hasta las últimas consecuencias".

A su vez, el secretario del organismo, Emilio Gutiérrez Aguayo, rechazó que los pugilistas estén sin protección. "Después de la pelea tienen cinco días asegurados, por si surge algún problema. Cuando no tienen contienda, pueden acudir con los doctores de la comisión que los atienden, les dan medicinas o los canalizan con los especialistas.

Y cuando surge un caso más grave, como el de Gloria Ríos, entonces se busca la forma de ayudarlos", argumentó.

El doctor Horacio Ramírez, titular de los Servicios Médicos, dijo que los comisionados "tenemos la obligación moral de apoyarla en todo lo que sea necesario" y le pidió a la pugilista acudir a las oficinas de la CBPDF para ayudarla.