LUNES 17 DE JULIO DE 2000

* El grupo se presentó el sábado junto a Megadeth en el domo de cobre


Bajista de Motley Crue desafió a golpes a un fan

Jorge Caballero * La Maximum Rock Tour donde participan las bandas de heavy metal Megadeth y Motley Crue tocó el suelo de la ciudad de México la noche del sábado, pero los fans mexicas resultaron demasiado macizos para los glamorosos metaleros de Motley Crue. Tanto que sacaron de quicio al bajista Nikki Sixx, que invitó a liarse a golpes a uno de los fanáticos de la primera fila; al no ver respuesta, bajó para adentrarse al mosh pit y enfrentarlo, seguido del vocal Vince Neil que intento infructuosamente detenerlo; la disputa no duró mucho porque el equipo de seguridad los rescató del enardecido público.

Las hostilidades comenzaron cuando en el escenario apareció Sixx para hacer unos potentes riffs en solitario con su bajo y espetó al público un mother fuckers y otras frases con palabras altisonantes. Luego, desde el palco, se alcanzó a ver cómo el músico atacó con la parte delgada de su instrumento a un chico del público, que logró arrebatárselo, lo que puso furioso a Sixx que buscó la torre del micrófono para volver a agredir, pero el aparato corrió la misma suerte que el instrumento de cuerdas. La torre sí la regresaron, pero el bajo nunca volvió al escenario.

Una hora y media antes la actuación de Megadeth resultó impactante. Interpretó 13 rolotas, entre ellas el himno metaloso Paranoic, She Wolf, Tout le monde, Symphony destruction y Trust. El líder Dave Mustaine demostró que la buena salud que goza la música heavy y lo que debe ser una banda abridora: dejó ardiendo a los asistentes.

Las fricciones entre el sector de las primera filas y el músico de Motley Crue continuaron cuando sonaba la rola Piece of your action; Sixx aventó su bajo e hizo una seña con las manos como invitando a subir a un fan a pelear sobre el escenario; el chico como de 25 años respondió con una seña que simula el órgano reproductor masculino. Sixx encolerizó y saltó para iniciar la pelea; Vince Neil, cantante de la banda trató de detenerlo sin éxito. El equipo de seguridad actuó a tiempo y unos 30 segundos después los depositaron en el escenario. A Sixx únicamente se le observó con la camiseta rota. Neil movió las manos en señal de que eso era todo.

La solidaridad de los 20 mil asistentes en el Palacio de los Deportes, con el inmiscuido en la bronca, no se hizo esperar y, hermanados, corearon un alucinante: šuuuleeeroooos! Playeras incendiadas surcaron el espacio, acompañadas de toda clase de procacidades en contra de Motley Crue y un fuerte grito pidió al grupo telonero: "Megadeth/Megadeth".

Minutos más tarde las dos suculentas chicas que fungieron como coristas/ornatos/coreografía, salieron en bikini de cuero negro para calmar los ánimos. Cuando los integrantes del grupo volvieron a tocar el templete, para interpretar Wildside, un imponente "buuuu" los recibió. Sixx no se inmutó y atacó el escenario nuevamente, le llovieron vasos y playeras con la rabiosa intención de hacerle daño. El grupo interpretó Hell on high heels. Mick Mars hizo un solo de guitarra, el público se lo agradeció, y después el cuarteto cantó Girls, girls, girls, al tiempo en que las dos chicas bajaron de su plataforma y compartieron el micrófono con Neil. Las coristas se contonean, se pasan las manos por la pelvis, mueven circularmente sus caderas; sobre todo la rubia, Pam, quien derramó lascivia heavy, lució unas hermosas y gruesas piernas de mantequilla; al término de esta canción se despidieron.

Pero en el guión figuraron dos rolas de encore; no se dieron mucho a desear y salieron para interpretar Livewire y su mega hit Shout of the Devil. Actuación en la que lo mejor fue la corista rubia texana, los fuegos artificiales y la baterista Samantha, del grupo Hole que los acompaña en esta gira.