JUEVES 20 DE JULIO DE 2000
Ť Ejercicio 1998: CMH
En la PGJDF, manejo del gasto con apego a la ley
Raúl Llanos Samaniego Ť A diferencia de las anomalías denunciadas en años anteriores, la Contaduría Mayor de Hacienda (CMH) de la Asamblea Legislativa prácticamente no reportó irregularidades en las cuentas, programas y metas de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) durante 1998, primero año de gobierno de Cuauhtémoc Cárdenas.
Ya no fueron, como ocurrió durante la administración de Oscar Espinosa Villarreal en el ex DDF, y Lorenzo Thomas al frente de la Procuraduría, las denuncias por fraude en la instalación de equipo informático y de radiocomunicación; ni el desapego a legalidad en las licitaciones públicas nacionales e internacionales y adjudicaciones, o la falta de control y de documentos comprobatorios de convenios establecidos durante 1995, 96 y 97.
De acuerdo con el Informe de Resultados de la Cuenta Pública de 1998, dado a conocer en días recientes por la CMH, se advierte que en la revisión de programas --como capacitación y moralización--, presupuesto y remanentes, compra de bienes muebles e inmuebles, y manejo de personal, no hubo situaciones relevantes, pues se cumplió con la normatividad establecida en la materia.
Primer año de Del Villar
A lo largo de 40 cuartillas, el órgano fiscalizador de la ALDF detalla los resultados de las auditorías hechas al primer año de Samuel del Villar. De entrada, precisa que en cuanto al manejo de los recursos presupuestales hubo apego a la ley en lo ejercido y en las ampliaciones, reducciones y afectaciones presupuestales.
Establece, además, que las autorizaciones del tabulador de sueldos se apegó a la normatividad establecida; se confirmó que los importes cargados a las partidas estuvieron íntegramente soportadas con las nóminas correspondientes, mientras que el monto de los pagos ordinarios y extraordinarios se ajustaron a lo autorizado. De igual manera se verificó que los remanentes por el pago de estímulos a personal sustantivo fueran enterados en tiempo y forma a la Tesorería del DF.
La CMH asegura que revisó la documentación que sustenta las adquisiciones por adjudicación directa (requisiciones, autorización, pedido, constancias de recepción y resguardo de los bienes, facturas y registros contables y presupuestales) y al final "no se detectaron irregularidades". Mientras que la fiscalización de las adjudicaciones por invitación restringida y licitación pública reportó que "se ajustaron a la normatividad establecida". Cita, además, que en cuanto a su plantilla de personal, las contrataciones y las nóminas en la PGJDF "se ajustaron a la estructura orgánica autorizada".
En el rubro de "Estrategia de Profesionalización de los Cuerpos de Seguridad y Justicia", la Contaduría precisa que se dio cumplimiento a dicha meta. Añade que en el "Programa de Moralización", aplicado por el Instituto de Formación Profesional, "se comprobó que los cursos impartidos se respaldaron con material didáctico y casos prácticos; que los instructores contaban con la capacidad técnica requerida, que existió un estricto control de asistencias y evaluaciones, y que el calendario de cursos se cumplió cabalmente", por ende "se cubrió en tiempo y forma según las bases y lineamientos establecidos en el Acuerdo A/003/98".