LUNES 24 DE JULIO DE 2000
* Exhorto a Israel y Palestina; Clinton vuelve a EU
Plantea el Papa un Jerusalén bajo jurisdicción internacional
Afp, Ap, Dpa y Reuters, Castelgandolfo, 23 de julio * El papa Juan Pablo II emitió hoy un comunicado desde su residencia de descanso en esta ciudad, en el que exhortó a negociadores israelíes y palestinos en la cumbre de Campo David a aplicar un estatuto especial para Jerusalén, que permita que la ciudad quede bajo jurisdicción internacional. "La Santa Sede insiste en que sólo un estatus especial, garantizado internacionalmente, puede preservar efectivamente las áreas sagradas de la ciudad Santa, y garantizar la libertad de culto para todos los fieles de esa región y de todo el mundo".
El comunicado insiste en que esa solución no sólo resolvería la disputa entre árabes e israelíes, sino que sería justa para los cristianos, para los que Jerusalén también es una ciudad santa. El Vaticano ha criticado a Israel desde que en 1967 ocupó la ciudad. En 1994, el Vaticano reanudó sus relaciones con Tel Aviv y en febrero pasado firmó con la Autoridad Nacional Palestina (ANP) un acuerdo en el que las partes se comprometen a preservar los templos y la libertad de culto para musulmanes y cristianos en Jerusalén.
Mientras tanto, el presidente estadunidense, Bill Clinton, regresó a Campo David para continuar con las negociaciones israelí-palestinas. Gadi Baltiansky, vocero del primer ministro israelí, Ehud Barak, aseguró que ahora que el mandatario regresó "no va a llevar mucho tiempo darnos cuenta si vale la pena permanecer aquí y continuar las conversaciones, o empacar y marcharnos a casa".
Antes de salir de Okinawa, Japón, Clinton afirmó que durante su ausencia "hubo progresos" que no detalló. Lo cierto es que las delegaciones israelí y palestina insistían en que no había ningún acuerdo a la vista.
El representante de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Washington afirmó que si las negociaciones no han avanzado, se debe a que "la pelota está en el campo israelí", y reiteró que no habrá acuerdo alguno si Israel no acepta dar a la ANP soberanía sobre los barrios árabes de Jerusalén oriental. Hasta ahora, Barak sólo ha ofrecido "autonomía" de esta zona, pese a que el ministro de Justicia, Yossi Beilin, afirmó el viernes que estos territorios "nunca han sido nuestros".
La radio israelí, por otro lado, transmitió declaraciones atribuidas al presidente del partido Be Alia, Nathan Sharansky, según las cuales Barak le habría comunicado telefónicamente que aceptaría formar un gobierno en coalición con el opositor partido derechista Likud, en caso de fracasar las negociaciones de Campo David.
Antes de que comenzara la cumbre, hace casi dos semanas, Be Alia y otros dos partidos de derecha abandonaron la coalición de Barak en protesta porque el gobernante aceptó participar en reunión cimera. Una coalición de gobierno con el Likud implicaría aún mayores dificultades para alcanzar un acuerdo de paz con los palestinos pues este partido, al igual que el resto de la derecha conservadora israelí, rechaza de plano cualquier concesión territorial a los palestinos.
Zeev Hever, uno de los líderes de asentamientos judíos en los territorios autónomos de Gaza y Cisjordania, reiteró este domingo que haya o no acuerdo de paz, los colonos no saldrán de las comunidades donde viven.
Durante las negociaciones en Campo David, Barak ha pugnado porque la gran mayoría de las colonias israelíes en territorios palestinos permanezcan bajo soberanía israelí. Asimismo, Barak ha sido el primer líder israelí en llevar a la mesa de negociaciones el tema de los cerca de 3 millones de refugiados palestinos, que fueron expulsados de la región tras guerras con Israel en 1948 y 1967. Su oferta consiste en repatriar a unos 60 mil de estos refugiados, siempre y cuando aún tengan familia en Israel, y dar importantes donativos a organizaciones internacionales para garantizar el bienestar de los refugiados en los campamentos que habitan en Siria, Jordania, Líbano y otras regiones. La delegación palestina ha rechazado este compromiso.
Fuentes de la Casa Blanca dijeron que ahora que Clinton ha regresado a Campo David, ha comenzado la "etapa crucial" de estas conversaciones, que se han prolongado ya casi dos semanas sin que se haya dado noticia de ningún avance concreto. Por lo pronto, la secretaria de Estado estadunidense, Madeleine Albright, quien se quedó a cargo de las conversaciones durante la ausencia de Clinton, invitó hoy a Barak y a Arafat a una excursión en la localidad de Campo David, en un aparente intento por relajar el ambiente de tensión que impera en las estancadas negociaciones.