LUNES 24 DE JULIO DE 2000
* Según estudio, sufre trastorno histriónico de personalidad con elementos narcisistas
Bezares, con capacidad criminal media
* La Dirección de Reclusorios del GDF sugiere tratamiento psicológico y laboral para el interno
Angel Bolaños Sánchez * El estudio clínico criminológico de Mario Rodríguez Bezares, presunto coautor del homicidio del comediante Francisco Stanley, concluyó que por sus características de orden intelectual y de personalidad", es un sujeto con "capacidad criminal media e índice de peligrosidad media".
Elaborado por la Dirección General de Reclusorios y Centros de Readaptación Social del gobierno capitalino el diagnóstico criminal del procesado expone algunas de sus características: egocentrismo, agresividad canalizada, "inintimidabilidad alta" y nocividad media, por lo que sugiere para el interno un tratamiento psicológico y laboral.
De hecho se le dictamina un "trastorno histriónico de la personalidad con elementos narcisistas".
El estudio también refiere que Rodríguez Bezares "se adapta de manera adecuada a las exigencias sociales y busca cauces ilícitos para satisfacer sus necesidades" y en cuanto a su situación dentro del Reclusorio Oriente, señala que éste demostró "alta adaptabilidad social" en el interior del Centro de Observación y Clasificación, (COC), en donde se encuentra desde que ingresó al penal el 27 de agosto de 1999.
No se involucra en problemas de convivencia y hace uso de su imagen para "obtener ganancias como son: atención a su persona, no ser molestado e intimidado; respeto y apoyo de la población si la situación lo amerita", añade el informe y como "pronóstico intrainstitucional" indica que al tratarse de un sujeto "intimidable a la sanción se abstiene de cometer actos ilícitos dentro de penal.
El informe, elaborado y suscrito por Silvestre Rosas Rivera, indica que Rodríguez Bezares "explota adecuadamente sus capacidades intelectuales y rasgos de personalidad siendo un sujeto con características de líder, posee empatía, poder de convocatoria, seducción e induce a los demás a actuar en la dirección que él señala. Es capaz de planear, organizar, dirigir y hacer toma de decisiones en momentos de crisis".
Asimismo, "sus estados de animo varían de excitación hacia la tristeza lo cual tiende a dramatizar de manera exagerada, buscando con ello atención y quedar como víctima de los sucesos en los que se ve involucrado".
"Si la situación le es favorable ųsigue el documentoų es factible que asuma el papel de directriz, aun cuando las consecuencias que su actuar le acarreen lo intimidan".
Del mismo documento se desprende el tipo de relación que mantenía con Francisco Stanley, donde refiere que el procesado se inició laboralmente a los 14 años en diversos empleos y a los 17 inicia en el teatro y la televisión donde conoce al comediante "quien le ofrece la 'oportunidad' de trabajar con él, cosa que acepta. Menciona relaciones interpersonales abundantes pero sin compromiso afectivo pues son básicamente laborales".
De hecho, en general el estudio revela que Rodríguez Bezares se conduce por "relaciones superficiales y sin compromiso, por lo que hace uso de la influencia sugestiva con lo cual persigue un beneficio personal, mostrándose seductor mediante una emotividad excesiva".
Clínicamente, Rodríguez Bezares admitió consumir bebidas alcohólicas, así como mariguana y cocaína, aunque dijo que lo hacía de manera "experimental" y negó tener antecedentes penales, no obstante que la PGJDF ha tenido conocimiento de dos indagatorias en las que se le involucra en fraudes.