MARTES 25 DE JULIO DE 2000

* Luis Felipe Bravo Mena y Amalia García Medina


Panistas y perredistas, dispuestos a dialogar y alcanzar consensos

José Antonio Román y Matilde Pérez U. * En el PRD y en el PAN existen buena voluntad y disposición para iniciar un diálogo constructivo y alcanzar consensos en torno a la agenda nacional que debe ocupar hoy a todos los partidos políticos en el Congreso, señalaron los dirigentes nacionales de los dos partidos, Amalia García y Luis Felipe Bravo Mena, respectivamente.

Entrevistados al término de la reunión de la llamada Alianza por Chiapas, integrada por ocho partidos políticos, ambos dirigentes expresaron su buena disposición para que en breve, de acuerdo con la agenda de cada uno, se puedan reunir y avanzar en este acercamiento, al igual que con el resto de los partidos.

Bravo Mena señaló que esta coincidencia que se ha dado en torno a Chiapas puede ser el inicio de la convergencia en muchos otros temas de trascendencia nacional. "Yo creo que todos los partidos estamos demostrando madurez y espero que en los días subsecuentes y en casos concretos, vayamos demostrando todos que tenemos la capacidad de que con el diálogo podemos sacar adelante los grandes temas que el país tiene en su agenda y que necesita del consenso de todos, porque el electorado nos ordena que logremos acuerdos y consensos".

Y aunque señaló que todos los partidos deben ajustarse a los nuevos tiempos y aceptar los resultados del 2 de julio, también dijo tener la convicción de que sobre la madurez democrática demostrada por los ciudadanos, las instituciones y los partidos, el país transitará magníficamente bien por esta nueva etapa que se vive.

Por separado, la dirigente nacional del PRD, Amalia García, dijo que el ánimo de su partido es de buena voluntad para iniciar un diálogo y alcanzar consensos con el PAN, aunque se tengan legítimas diferencias, lo cual es normal en un régimen democrático.

Indicó que uno de los temas pendientes es revisar precisamente el juicio político, con el propósito de que se convierta en una figura que pueda funcionar y que no sea letra muerta, porque actualmente no han existido los mecanismos para hacerlo más ágil.

Respecto a las diferencias con el PAN, sobre todo en materia económica y social, la dirigente perredista señaló que esos son temas que se tienen que conversar, e insistió que no en todo se debe tener acuerdos, aunque sí se deben hacer los esfuerzos necesarios para acercar las diferentes posiciones, siempre en forma respetuosa.