MIERCOLES 26 DE JULIO DE 2000
Un avión con fama de invulnerabilidad
El Concorde que se estrelló ayer en Francia fue sometido a una revisión de rutina el pasado 21 de julio y era uno de los dos aviones de ese tipo que no presentaba las fisuras en las alas detectadas en los otros cuatro aparatos que poseía Air France, afirmó el presidente de la aerolínea francesa, Jean-Cyril Spinetta. El aparato entró en servicio en octubre de 1980 y acumuló 11 mil 989 horas.
Hasta hoy el Concorde, el único avión comercial supersónico, era considerado como el más seguro del planeta. Con una capacidad de entre 100 y 144 pasajeros viaja a 18 mil metros de altura a una velocidad de 2 mil 187 kilómetros por hora.
El costo del vuelo de tres horas y media entre Londres y Nueva York es de unos 9 mil dólares, viaje redondo, por lo que viajar en él representa un símbolo de lujo que sólo pueden pagar los hombres de negocios, los poseedores de grandes fortunas y uno que otro ser humano con buena suerte que gana un concurso organizado por medios de comunicación o empresas.
Las dos primeras filas son reservadas para los clientes "importantes", mientras que los ganadores de concursos viajan en la cabina trasera, que es más ruidosa.
Generalmente el Concorde es utilizado en vuelos charter por los que Air France cobra 80 mil dólares por hora de operación. Las naves francesas transportan a unos 38 mil pasajeros al año.
La historia del Concorde, un proyecto anglo-francés, comenzó en 1969, cuando se realizó el primer vuelo de prueba. En 1976 dieron inicio los vuelos comerciales. La fama de invulnerabilidad de esta aeronave sólo se vio en peligro en 1979, cuando uno de esos aviones efectuó un aterrizaje brusco y reventó una de las llantas.
Durante algunos años, el Concorde procedente de Londres o París aterrizó en Singapur, Washington, Dallas, Miami, Caracas y la ciudad de México, pero ahora sólo llega a Nueva York y ocasionalmente a Barbados. (Afp, Dpa, Ap y Reuters)