VIERNES 28 DE JULIO DE 2000
* Nueve lesionados; aunque no hay pistas, la policía piensa en un móvil racista
Estalla una bomba en estación de ferrocarril alemana
Afp, Ap y Dpa, Duesseldorf, 27 de julio * Una bomba de fragmentación, probablemente una granada, estalló hoy en la estación de ferrocarril de esta ciudad alemana e hirió a nueve personas, de las cuales, dos se encuentran en estado crítico. La policía no tiene pista alguna sobre los autores del atentado, aunque se duda que se trate del ataque de algún grupo político, las fuerzas antiterroristas de seguridad investigan cualquier posibilidad en este sentido, y se inclinan también a pensar que el atentado tuvo un móvil racista.
Esta tesis fue recogida por el jefe adjunto del gobierno regional del Land de Renania del Norte-Westfalia, Michael Vesper. "No ha sido un accidente ni una coincidencia, sino un atentado orientado. Quien colocó la bomba quería matar al mayor número de personas. Las víctimas regresaban de un curso de alemán para extranjeros".
La policía no informó la identidad ni nacionalidad de los heridos, seis mujeres y tres hombres, pero sí trascendió que dos están en peligro de muerte, particularmente una mujer que estaba en estado avanzado de gestación, quien sufrió un aborto y le fue amputada una pierna.
Las primeras investigaciones de peritos indicaron que la bomba pudo haber sido una granada, pues se trató de un artefacto con fuerte carga explosiva, pero cuya onda expansiva fue débil y causó daños materiales menores.
Al parecer, la bomba fue colocada bajo una de las pasarelas de la estación y estalló justo cuando los pasajeros descendían de un tren, lo que hace pensar que su finalidad era exclusivamente herir a los pasajeros. El artefacto se encontraba, según los primeros dictámenes, en una botella de plástico. Ninguna de estas tesis, sin embargo, es considerada concluyente por la autoridad.
Aunque la policía rechazaba confirmar aún motivos racistas para el atentado, esta parecía ser la tesis más acertada, pues los grupos terroristas que llegaron a combatir al Estado alemán han estado inactivos desde hace años. Si bien Alemania ha tenido problemas con saboteadores y chantajistas que usan amenazas de descarrilamiento para exigir fuertes sumas de dinero, la policía confirmó que no hubo ninguna llamada de advertencia previa al ataque.
Por la noche, sin embargo, la policía recibió una llamada advirtiendo que había otra bomba en la estación ferroviaria, que se rastreó a una caseta telefónica ubicada a 500 metros de dicho lugar. Las autoridades acordonaron la zona e inspeccio- naron la estación sin encontrar ningún nuevo artefacto, pero dijeron sospechar que la llamada fue hecha por un "imitador", es decir, algún dese- quilibrado que por alguna razón quiere recibir "el crédito" por el atentado.
En total siete ambulancias y dos helicópteros proporcionados por la compañía ferroviaria Deutsche Bahn fueron enviados al lugar de la explosión para atender a los heridos, y el tránsito de trenes entre Duesseldorf y Diusburg fue interrumpido por varias horas.
La policía y la fiscalía de la ciudad anunciaron que la mañana del viernes darán una conferencia de prensa conjunta en la que esperan aportar mayores indicios sobre el incidente. Se informó que los expertos en explosivos de la policía trabajarán toda la noche.