SABADO 29 DE JULIO DE 2000

* Retrasan comunicado


Polémica en la CEM

ante tesis del grupo interinstitucional

Alma E. Muñoz * Será hasta la próxima semana cuando la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) emita una postura oficial respecto al trabajo realizado por el grupo interinstitucional creado para investigar el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo. Lo anterior, debido a que la diferencia de posturas sobre los motivos del crimen impidió lograr un consenso entre la jerarquía católica.

En este sentido trascendió que ayer en la tarde circulaba entre los obispos y arzobispos un escrito en el que no se aceptaban totalmente las conclusiones dadas a conocer el jueves por el grupo interinstitucional, el cual concluyó sus trabajos con dos tesis irreconciliables: que la muerte del cardenal fue por confusión y/o premeditada.

La difusión del comunicado que emitiría la CEM se detuvo de última hora, por un presunto desacuerdo del cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, con el contenido del mismo.

Tan pronto se dieron a conocer los resultados de las pesquisas sobre el caso Posadas, los obispos recibieron una instrucción superior de evitar comentarios al respecto para no dar la imagen hacia el exterior de confrontaciones al interior de la Iglesia católica, aunque algunos religiosos ignoraron esa indicación.

Por otra parte, ayer por la mañana, el obispo de Nuevo Laredo, Ricardo Watty Urquidi, dijo que sería hasta septiembre próximo cuando el Consejo Permanente de la CEM emitiría su posición acerca del trabajo elaborado por el grupo interinstitucional, creado para investigar la muerte del prelado.

"Lo que hemos acordado es escuchar a las tres partes: la Procuraduría General de la República, el gobierno de Jalisco y la posición de don Luis Reynoso, obispo de Cuernavaca; el arzobispo de Chihuahua, José Luis Fernández Arteaga, así como el cardenal Juan Sandoval Iñiguez para tener en claro cómo ocurrió el asesinato".

Al interior del Episcopado, según mencionó el prelado en la Basílica de Guadalupe, existe la posibilidad de que se mantengan opiniones encontradas sobre cómo ocurrió el crimen.

Los religiosos Luis Reynoso y José Luis Fernández Arteaga apoyan la versión de la PGR de que el cardenal Posadas Ocampo perdió la vida al encontrarse circunstancialmente en el aeropuerto internacional de Guadalajara el 24 de mayo de 1993, donde se desarrolló un tiroteo entre las bandas de narcotraficantes de Joaquín Guzmán Loera y los hermanos Arellano Félix. Mientras, el cardenal Juan Sandoval Iñiguez mantiene su apoyo a la tesis del gobierno de Jalisco, el cual afirma que el homicidio fue premeditado.

"Hay libertad para que cada quien tenga una opinión, pero vamos a ver si podemos llegar a una declaración determinada y expresarla en su momento. Sabemos la postura que el cardenal Juan Sandoval ha sostenido y también conocemos la de la PGR, pero en este caso tan complejo escucharemos a las tres partes para dejar en claro lo que sucedió".

Cada obispo, añadió el prelado, "pudiera tener un punto de vista, una opinión hasta donde él y cada uno conocemos, pero precisamente queremos conocer más a fondo y también, de hecho, hay libertad para que cada quien tenga una opinión. Por eso digo, a ver si podemos llegar a una opinión determinada y expresarla en su momento".