MARTES 5 DE SEPTIEMBRE DE 2000
* La guerrilla hizo estallar 14 bombas en diversas ciudades colombianas
Este mes propondrán las FARC un cese del fuego
Dpa, Afp, Ap y Reuters, Santafé de Bogotá, 4 de septiembre * La guerrilla hizo explotar este lunes 14 bombas en importantes ciudades de Colombia que causaron daños materiales pero no víctimas mortales, en medio de la escalada de ataques iniciada hace una semana en rechazo a la visita del presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, y que ha dejado casi un centenar de muertos.
Por lo pronto, en la zona desmilitarizada del sur del país, el comandante Carlos Antonio Lozada, un negociador de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), adelantó que el grupo rebelde propondrá el 22 de septiembre al gobierno un cese del fuego bilateral sin condiciones. Los únicos requisitos, dijo, son dos, que sea bilateral y que no tenga otro tipo de condicionamiento distinto a que sea el cese de las operaciones militares de carácter ofensivo.
La violencia ha ocasionado el desplazamiento de cientos de colombianos hacia Venezuela, y aunque el ministro del Interior de ese país, Luis Alfonso Dávila, insiste en negar los hechos, la representante en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Leyla Lima, confirmó que 120 familias que huyen de las acciones armadas en el noreste del país se encuentran en territorio venezolano en busca de asilo político.
En declaraciones a la radio Caracol, Lima señaló que representantes del ACNUR en Caracas se desplazaron a la selva colombo-venezolana, donde constataron que desde hace varios días se encuentran en la zona más de 500 colombianos desplazados del conflicto colombiano.
El primero de los ataques de este lunes ocurrió en la ciudad de Barrancabermeja, en el departamento de Santander, donde está ubicada la más importante refinería de petróleo y donde un comando rebelde activó una bomba de 70 kilos de explosivos contra la oficina de la Dirección Nacional de Impuestos y Aduanas, de acuerdo con un despacho de Reuters.
La explosión causó heridas a siete personas y destruyó varios establecimientos comerciales, indicó la policía, que atribuyó el atentado al insurgente Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Otras 13 bombas estallaron en igual número de oficinas de apuestas en la ciudad de Medellín y en otras ciudades de Antioquia, que igualmente causaron daños materiales. Las autoridades imputaron los ataques a los Comandos Armados del Pueblo (CAP), una célula urbana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en represalia porque los dueños de las oficinas de apuestas se negaron a pagar millonarias sumas de dinero por extorsiones.
La policía secreta colombiana anunció la captura de seis presuntos insurgentes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), una disidencia del desaparecido grupo insurgente M-19, en la ciudad de Barranquilla, mientras cinco paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) fueron abatidos este día por tropas del ejército en la localidad de Génova, en Quindio.
En otro tema, el ministro de Hacienda, Juan Manuel Santos, viajó a Washington para reunirse con directivos del Fondo Monetario Internacional, ante quienes realizará un balance de la situación económica de su país y abrirá el camino para la aprobación de un crédito de entre mil 200 y mil 800 millones de dólares para el año 2001.