DOMINGO 10 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť Postura de la CNDH

Positiva, la firma del Estatuto de Roma por parte de México

Triunfo Elizalde Ť José Luis Soberanes, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, manifestó anoche que es positivo para México que el presidente Ernesto Zedillo haya firmado en Nueva York el Estatuto de Roma, básico para la creación de la Corte Penal Internacional (CPI).

Hizo notar que en la actualidad se vive una globalización en todos los aspectos, económicos y financieros básicamente, por lo que no se puede evitar que los países estén buscando también la globalización de los derechos humanos, como una forma de luchar en contra de quienes cometen violaciones.

Señaló que para que en México llegue a tener injerencia la Corte Penal, primero habrá que ratificar el estatuto jurídico, y éste deberá tener como base el que el Congreso de la Unión lleve a cabo una serie de reformas constitucionales para adecuar las leyes mexicanas al sistema penal internacional; sin embargo, añadió que no es posible pensar que la ratificación se lleve a cabo rápidamente, aunque ésta deberá hacerse antes de julio del 2002, fecha límite para la creación de la CPI.

Dijo que la sola adhesión al Estatuto de Roma compromete a México, y ya no habrá manera de echarse para atrás en la lucha por el respeto a los derechos humanos a nivel internacional, en particular en los casos de genocidio, crímenes de guerra, de lesa humanidad y de agresión, cuando ésta sea reconocida también como un delito grave.

Señaló que, al firmar el Estatuto de Roma, el presidente Zedillo obtiene dos ventajas: una, que abre para México una mejor imagen a nivel internacional en la lucha, defensa y promoción de los derechos humanos, y otra, de imagen personal a la cual tiene derecho.

Por otro lado, el ombudsman nacional hizo saber que en esta semana emitirá la recomendación correspondiente al caso de Paulina Ramírez Jacinto, ya que el gobierno de Baja California no pudo llegar a un arreglo con la familia de la menor violada a la que se impidió abortar.

Comentó que la CNDH tenía ya preparada la recomendación sin firmar, pero a petición del gobierno de BC la detuvo, en espera del arreglo con los familiares de Paulina. Pero éste no se dio y la recomendación cobró vigencia.