MARTES 12 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť Distinguen al poeta con el premio de literatura Juan Rulfo 2000
Vivencia, imaginación y palabra es un maridaje que aguardo: Gelman
Ť En la narrativa universal quizá sólo el escritor jalisciense supo dialogar con los muertos, dice
Ť ''La obsesión de la palabra, herida que se nos infiere al nacer y que perdura toda la vida''
César Güemes Ť Dice que no es un hombre triste, aunque sus escritos, que viene dando a conocer desde 1956, año en que editara Violín y otras cuestiones, sugieran lo contrario. Los poemas de Juan Gelman piensan por sí mismos, crecen, se multiplican y se quedan ahí, para quien quiera algo de ellos.
Su expresión, sin embargo, no es de festejo. En último de los casos es un poeta serio que en serio se toma su labor, pero escribe para acompañar, un verbo inconjugable con el vocablo tristeza.
Lo rodean y lo cercarán a partir de ahora cámaras y micrófonos, y quizá por eso se permite una sonrisa ante la pregunta:
-Vamos a ver, maestro: recibe un galardón que haría feliz a cualquiera. Sin embargo su talante es, digamos, adusto. ƑAsí ha sido su trabajo?
-Creo que la poesía es seria, sobre todo para quienes pretendemos escribirla. Pero no, no estoy serio, me veo conmovido, nervioso, todavía no me acostumbro a la idea. Pienso que quienes escribimos tenemos satisfacciones cuando logramos uno de esos momentos alegres, los de la creación, que no abundan. Y, por otra parte, parece que hay una distancia entre lo que uno hace, la conciencia que se tiene de ello y un reconocimiento de este porte. Pero no estoy triste.
Cultivador de un ardiente oficio
-El porte es el Premio Juan Rulfo 2000, Ƒqué lo vincula al escritor jalisciense?
-Lo que más me acerca, además de ser su lector, es que tal vez en toda la literatura universal casi sólo él supo dialogar con los muertos.
-Pero no es un reconocimiento a la amistad libresca sino acaso a la fidelidad literaria.
-Quizá, si bien eso habría que preguntárselo al jurado. Aunque por mi parte creo que este es un reconocimiento que conmueve a quien lo recibe por varias razones: por el nombre que lleva, por la calidad del jurado, la altura de los premiados hasta ahora y por las instituciones que lo apoyan.
-Compromete, pues.
-Es un gran honor que pesa, pero también alienta a insistir en éste, en mi caso, ardiente oficio de la poesía, como decía Dylan Thomas. Un oficio ardiente en el cual uno trabaja mientras espera que se produzca el milagro del maridaje feliz de la vivencia, la imaginación y la palabra. Y claro, como decía Chesterton, lo verdaderamente milagroso de los milagros es que a veces se producen. Para mí este premio trasciende las fronteras de lo literario porque lo confiere México y en esta tierra decidí vivir hasta el fin de mi vida. Aquí he tenido acceso a una cultura rica, variada y viva, musical, pictórica, literaria. Es aquí donde me radiqué por mi propia voluntad. De manera que esto, para mí, me conmueve profundamente, no sólo por lo literario.
-Dice que eligió al país para llegar hasta el final de su existencia, Ƒquiere decir que el tema de la muerte es algo presente?
-Lo que ocurre es que con esta vida tan vertiginosa, las viejas relaciones que uno tenía con la muerte se desdibujan un poco.
-Pero seguramente no se han desdibujado las que tiene con el mundo real, ya sea el tema de su nieta, recuperada familiarmente, o del propio reconocimiento de ahora.
-Son dos premios muy importantes y de dimensiones diferentes. Supongo que mi nieta se alegrará al saber que me lo han conferido.
-Aunque no abunde en el asunto de su nieta, diga lo que piensa del caso Cavallo, desde luego en boga y en curso.
-El ha sido reconocido como un genocida que trabajó entre comillas en la Escuela de Mecánica de la Armada, donde desaparecieron 5 mil argentinos. Su identidad es indudable y en efecto ha habido en Argentina leyes ''perdonadoras" por las cuales uno se puede tropezar con los genocidas, los torturadores y asesinos en la calle. Ojalá se le consiga extraditar a España, que es uno de los pocos países europeos donde el delito de genocidio se puede juzgar al menos hasta la creación de la corte penal internacional.
-ƑQué otro placer encuentra, además del hecho de que en el mundo se haga justicia concreta y hasta poética?
-El escribir mismo es uno de mis grandes placeres. Además, en mi caso es una actividad inevitable.
-ƑAhora mismo escribe, tiene a mano algún proyecto en el que trabaje?
-Casualmente este domingo me propuse preparar un nuevo libro, lo cual me fue imposible por la noticia del premio. El caso es que siempre se escribe, como digo. Aunque a veces me pregunto si lo que empieza por vocación no se convierte en costumbre. Y no tengo respuesta para eso. Luego, es muy difícil al menos para mí saber qué canales del corazón o del alma recorrerán todos estos hechos interiores e íntimos que vivo para convertirse en poesía. Alimento la idea de que a lo mejor a veces la poesía se hace más de silencios.
-Y de lectores, como los tendrá en México ahora con este apoyo a su obra.
-Eso me alegra mucho. No pierdo de vista a los lectores mexicanos.
-Si le interesan los lectores, Ƒle agradaría ser recordado por algún trabajo en particular?
-Ojalá me recuerden por un poema o dos. Con eso me doy por bien servido.
-Eliseo Subiela se ha encargado de que poemas suyos, junto con algunos de Benedetti y Oliverio Girondo se recuperen a través de un trabajo como El lado oscuro del corazón.
-Sí, eso me parece muy bien. La poesía siempre ha sido la Cenicienta de las artes, tiene un público pequeño, pero fiel. En la medida en que los distintos medios contribuyan a difundirla, me parece una buena noticia. Además, en esa película en particular se cumple en la pantalla un viejo sueño que yo jamás pude realizar: cambiar un poema por un buen bife.
Olga Orozco, poeta mayor
-ƑCuándo se da cuenta de que es poeta?, Ƒcómo llega a esa conclusión sobre todo si pensamos que inició a publicar a muy temprana edad?
-Todavía lo estoy averiguando. Una de las mayores satisfacciones que tuve fue una vez que nos hacían una entrevista a varios escritores y nos pidieron que leyéramos un texto cada uno de nosotros. En mi caso se trataba de la reedición de un viejo libro. Elegí un poema de amor, corto, casi al azar, y cuando terminó la audición una de las jóvenes que estaban ahí se me acercó para preguntarme: ''ƑEse poema es suyo?'' Sí, le dije. ''Ah, qué desgraciado'', me respondió. El poema no es demasiado bueno, alcancé a replicar, pero no es para tanto. ''No es con usted -dijo la joven-, me refiero a un antiguo novio mío que me hizo creer que ese poema me lo había escrito él a mí''. Bien, pues si alguien recrea el poema haciéndolo suyo, ese es un motivo de felicidad.
-Hace poco tiempo obtuvo este mismo premio Olga Orozco, Ƒcómo la recuerda?
-Como una gran amiga. A mi juicio ella es tal vez la poeta mayor de nuestra lengua. Me hubiera gustado mucho que estuviera aquí presente. Se fue ya pero queda su obra, que es una manera de estar con nosotros.
-Ya que el Juan Rulfo se otorga en México, hable de sus cercanías con las letras mexicanas.
-Octavio Paz, Jaime Sabines, José Emilio Pacheco y Rubén Bonifaz Nuño. No sé si puedo pretender ser cercano de todos ellos, pero sé que los admiro y los leo.
-ƑCuál es el tema de su nuevo libro, en el que ya no podrá trabajar sino hasta nuevo aviso?
-En realidad uno escribe sobre pocas cosas. Esas obsesiones se repiten una y otra vez a lo largo de la vida, en el mejor de los casos en forma de espiral cada vez más amplia, más abarcadora. Pero los temas de un solo poeta son unos cuantos. En todo caso se tiene la obsesión de la palabra, esa herida que se recibe al nacer, que nos infieren desde fuera y sigue abierta toda la vida.
Sonríe de nuevo, la segunda vez en toda la tarde. Rubrica:
-Pero estoy alegre, Ƒeh?, que conste.