MARTES 12 DE SEPTIEMBRE DE 2000
A 27 años del golpe, exigen que Pinochet asuma sus crímenes
Chile, ni perdón ni olvido
Enrique Gutiérrez, corresponsal, Santiago, 11 de septiembre Ť El mayor retirado Carlos Jiménez, quien cumple prisión perpetua por violación a derechos humanos durante el régimen militar, exigió que el ex dictador Augusto Pinochet y los altos mandos militares asuman su responsabilidad por los crímenes que cometieron, al cumplirse este día 27 años del golpe que derrocó al presidente Salvador Allende.
Pinochet, que tenía planeado asistir este lunes a una ceremonia en la Escuela militar de Santiago con la presencia de los altos jefes de las fuerzas armadas y ex colaboradores del régimen de facto que gobernó al país entre 1973 y 1990, no se presentó por una lesión en un pie. A la ceremonia, que incluyó una misa para recordar a los soldados caídos durante el alzamiento del 11 de septiembre de 1973, asistió en representación del ex dictador su esposa, Lucía Hiriart.
Al término del acto, ninguno de los comandantes de las fuerzas armadas y carabineros quiso hacer mención alguna sobre el significado de la fecha y sólo el vicecomandante en jefe del ejército y vocero del desaforado senador vitalicio Guillermo Garín se refirió a las palabras transmitidas la víspera por el ministro del Interior, José Miguel Insulza, sobre el perdón de las fuerzas armadas, acción que, dijo, no tendría efecto práctico.
En declaraciones al vespertino La Se gunda, Garín sostuvo, por otro lado, que Pinochet pide perdón a Dios por los errores cometidos, "pero nunca va a pedir perdón político. No tiene por qué hacerlo", recalcó.
Insulza declaró ayer su deseo de ver derramar una lágrima al general por "mis hermanos muertos", a lo que se sumó este día la viuda de Allende, Hortensia Bussi, al aludir a la responsabilidad de Pinochet en los crímenes por los que enfrenta 170 querellas, luego de que la Corte Suprema lo privó de su inmunidad el pasado 8 de agosto. "Hace mucho que los chilenos queremos oír por una vez que Pinochet pida perdón y ojalá derramara una lágrima", expresó Bussi durante un homenaje ante el monumento de Allende, frente al palacio de gobierno.
El presidente del Partido Socialista, Ricardo Núñez, pidió a las fuerzas armadas tener el coraje de asumir su responsabilidad en las atrocidades cometidas bajo la dictadura.
Unos 200 manifestantes de agrupaciones de derechos humanos, representantes de los partidos Socialista y Comunista, del Movimiento de Izquierda Revolucionario y el Frente Patriótico Manuel Rodríguez, incluso de grupos anarquistas que no tenían presencia en Chile desde hacía mucho años, se congregaron ante el monumento de Allende. En otro acto, unos 300 adherentes al ex mandatario socialista acudieron hasta su tumba para rendirle un homenaje en el que también participó Bussi y su hija Isabel Allende.
Los actos, sin embargo, se vieron empañados por los desórdenes protagonizados por encapuchados que se enfrentaron con la policía por la tarde en la afueras de la Universidad Metropolitana de Educación, y en el interior y exterior de la Universidad de Santiago. En este último centro educativo los carabineros detuvieron a una veintena de estudiantes de los 300 que protestaban por el golpe militar encabezado por Pinochet hace 27 años.
En este contexto, Herrera Jiménez dijo desde su prisión al rotativo La Tercera que "llegó el momento de que aquellos que llevaron al país a la situación que hoy nos ocupa asuman su responsabilidad penal que les asiste".
El ex agente de la policía secreta señaló que la responsabilidad por la violación a los derechos humanos debe asumirla el generalato, así como los civiles que ocuparon cargos durante los 17 años de la dictadura de Pinochet, ya que los oficiales procesados como él sólo recibieron órdenes.
En La Habana, por otro lado, las autoridades cubanas inauguraron un monumento de bronce del ex presidente Allende donado por chilenos radicados en España, acto al que asistieron unas 30 personas encabezadas por el historiador Eusebio Leal y el embajador de Chile en Cuba, Germán Guerrero.