MIERCOLES 20 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť Asumirá el nuncio nuevos encargos del Papa
Corresponderá al relevo de Sandri concluir la creación de arquidiócesis
José Antonio Román Ť Aunque el papa Juan Pablo II ya decidió elevar a rango de arquidiócesis las actuales sedes episcopales de San Cristóbal de las Casas y de León, corresponderá al nuevo nuncio, al sucesor de Leonardo Sandri, realizar esa tarea, así como informar de la creación de las diócesis de Chalco, Piedras Negras, Irapuato y Puerto Escondido, con lo que el número de circunscripciones eclesiásticas en el país llegará a 87, ya que hace unos meses se crearon las de Córdoba y Orizaba.
Esta tarea, prácticamente terminada desde la gestión del nuncio Justo Mullor, no la pudo concluir Leonardo Sandri debido a su breve estancia en el país. Llegó a México el pasado 25 de abril, y hoy espera a su relevo tras la decisión de Juan Pablo II de nombrarlo secretario sustituto para Asuntos Generales de la Secretaría de Estado, cargo de trascendental importancia en el gobierno del Vaticano.
Junto con el nombramiento de Sandri hubo otro más importante, el del arzobispo italiano Giovanni Battista Re como nuevo prefecto de la Congregación para los Obispos, quien sustituye en el cargo al cardenal brasileño Lucas Moreira Neves, quien presenta un precario estado de salud.
Muchos pensaban que el Papa colocaría a Battista Re, de 66 años, al frente de la congregación, desde donde lo asistiría en el nombramiento de obispos de dos tercios de las diócesis del mundo (con excepción de las orientales y las de países de misión), según la agencia especializada Zenit.
Battista Re ha trabajado con el Papa durante once años como sustituto de la Secretaría de Estado, cargo muy importante pues le corresponde despachar prácticamente todos los días con el pontífice los asuntos ordinarios del Vaticano.
El nuevo prefecto también será presidente de la pontificia Comisión para América Latina, cargos que conllevan la dignidad cardenalicia, por lo que en el próximo cónclave Battista Re debería ser elegido cardenal. Algunos observadores consideran que es uno de los dos purpurados in pectore del último cónclave, es decir, ya son cardenales pero su nombre no ha sido revelado por el Papa.
Leonardo Sandri, argentino de 57 años, debe viajar a Roma para sustituir a Battista Re. Este cargo también tiene importancia, pues en caso de fallecimiento del Papa, a él le corresponderá despachar los asuntos ordinarios de la Secretaría de Estado hasta el nombramiento del nuevo obispo de Roma, pues el secretario de Estado -Angelo Sodano- cesa automáticamente en sus funciones.
Entre 1992 y 1997 Sandri fue asesor para Asuntos Generales de la Secretaría de Estado y trabajó con Battista Re, por lo que está familiarizado con las tareas que le encomendó el Papa. Tras tres años como nuncio apostólico en Venezuela, Juan Pablo II lo envió a México como embajador en mayo pasado, y hoy regresa al Vaticano.