MIERCOLES 20 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť Podrían soportar un sismo de magnitud similar al de hace 15 años, aseguró González Roaro
Estructuralmente seguras, las escuelas de educación básica del DF
Carolina Gómez Ť Benjamín González Roaro, subsecretario de Servicios Educativos para el Distrito Federal, aseguró que las 8 mil 400 escuelas de educación básica de la capital del país son estructuralmente seguras para enfrentar un sismo de similar magnitud al del 19 de septiembre de 1985, y dijo que cada año se destinan 10 millones de pesos para dotar de materiales de protección civil a los centros educativos.
Al presidir el acto La escuela, un puente hacia el hogar en la cultura de la protección civil, realizado en la secundaria número 35 Vicente Guerrero, el funcionario informó que cada año se capacita a 3 mil maestros en técnicas para enfrentar desastres naturales y en primeros auxilios, con el apoyo de la Secretaría de Gobernación, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), la Cruz Roja Mexicana y la Dirección General de Protección Civil del Distrito Federal.
Durante el acto se entregaron de forma simbólica 8 mil 400 ejemplares de la guía para elaborar un programa interno de seguridad escolar, 60 mil folletos de acciones preventivas para el hogar, mil extintores y mil 400 botiquines, y al igual que en todas las escuelas de educación básica de la ciudad de México se realizó un simulacro de sismos en el que docentes y alumnos desalojaron las instalaciones en 17 segundos.
Ante Luis Wintergest Toledo, director general de Protección Civil del gobierno capitalino, González Roaro resaltó que la generación que egresó en 1999 es la primera que cursó la totalidad de su educación básica en una nueva cultura de prevención y protección civil.
En entrevista, descartó que las escuelas que fueron dañadas por el sismo de 8.1 grados en la escala de Ritcher representen un riesgo para la población estudiantil.
Dijo que cada año la Secretaría de Educación Pública y el Gobierno del Distrito Federal impulsan un programa de mantenimiento de planteles, en cumplimiento de la Ley de Protección Civil local, y además de identificar prioridades se detectan escuelas en las que el dictamen estructural determine que el edificio no es apto para resistir de manera favorable un temblor de más de cinco grados.
Agregó que las escuelas particulares deben someterse a un escrutinio similar y "tienen la obligación" de presentar un dictamen de seguridad estructural realizado por peritos, además de efectuar simulacros mensuales e incorporar apartados alusivos en los libros de texto.
Explicó que en caso de que el reporte señale que una institución educativa requiere reparaciones, es obligatorio que sea desalojada temporalmente mientras se realizan las tareas de rehabilitación.
Informó que ayer quedaron integrados los comités de seguridad escolar, que con las respectivas brigadas se encargarán de desarrollar durante el año lectivo las actividades de protección civil, en las que participan alumnos, padres de familia y miembros de la comunidad cercana a los planteles.
González Roaro confió en que el doloroso recuerdo del 19 de septiembre de 1985 servirá a los mexicanos para no bajar la guardia en el desarrollo de mecanismos de seguridad y prevención, que ayuden a mitigar las posibles consecuencias de un fenómeno natural que puede presentarse en cualquier momento.