JUEVES 21 DE SEPTIEMBRE DE 2000
Ť La economía mundial seguirá creciendo, asegura el director gerente del FMI
Llama Köhler a dejar de dramatizar sobre el impacto de los petroprecios
Ť Zedillo y Fox, convencidos de la apertura de los mercados, asegura el titular del organismo mundial
Roberto González Amador, enviado, Praga, 20 de septiembre Ť El director gerente del Fondo Monetario Internacional, Horst Köhler llamó a gobiernos y a analistas a dejar de dramatizar sobre el impacto del aumento en el precio del petróleo en la economía mundial.
La economía (mundial) seguirá teniendo un gran crecimiento. El aumento en los precios del petróleo ciertamente es una sombra en la perspectiva de crecimiento, pero este incremento nos sirve para no dormirnos en los laureles y recordar que la complacencia es una poderosa enemiga de las buenas políticas, dijo.
Köhler, un ciudadano alemán nacido en Polonia, aprovechó su primera aparición en la reunión conjunta del FMI y el Banco Mundial, que inició ayer en esta ciudad, para lanzar un mensaje conciliador y de apertura hacia los críticos de ambos organismos, que se espera lleguen por miles a Praga el próximo fin de semana.
No sólo ofreció más apertura del FMI a la sociedad civil. En una conferencia de prensa aprovechó para ubicar a México, junto con Brasil, como ejemplos de lo que debe hacer un país en materia de apertura y reforma estructural.
Al recordar un viaje que hizo a mediados de este año por América Latina, Horst Köhler dijo estar "fuertemente impresionado" con lo que había observado en México y Brasil. "No es necesario aconsejar a las autoridades y a los gobiernos de esos dos países acerca de la necesidad de promover la economía de mercado y la democracia. Ellos lo saben", comentó.
"Con respecto a México, el gobierno del presidente (Ernesto) Zedillo y ahora del presidente electo (Vicente) Fox, no es necesario pedirles que abran los mercados, porque ambos están convencidos de ello", añadió.
Köhler abrió su participación en el foro con el mensaje de que piensa dar mayor peso a la opinión de los países menos desarrollados en las decisiones que tome el Fondo y a reforzar junto con el Banco Mundial la lucha contra la pobreza. El anuncio pareció responder a los críticos del organismo, quienes consideran al FMI un ente dedicado en exclusiva a imponer los deseos de las naciones industrializadas y las corporaciones multinacionales.
"No tengo problema en aceptar que a veces decimos más de lo que hacemos en cuanto a combate a la pobreza. Por eso me he comprometido a abrir toda esta discusión sobre el papel futuro del Fondo", manifestó. Sostuvo que el crecimiento económico generalizado permitirá combatir la pobreza, e insistió en la "necesaria apertura" de los mercados de los países industrializados a las naciones pobres.
Para Köhler, no basta con el perdón de las deudas a los países más atrasados para combatir efectivamente la pobreza. Aseguró que el FMI está comprometido en ampliar el alcance de una iniciativa conjunta con el Banco Mundial para condonar deuda a una veintena de naciones pobres, principalmente africanas, al finalizar este año.
A su juicio, son cuatro los puntos que deben ser atendidos para atacar con efectivad el problema de la pobreza en el mundo: crecimiento económico fuerte sin inflación, apertura de los mercados de países más ricos a productos de naciones pobres, otorgar más ayuda al desarrollo y luchar contra la corrupción y el mal gobierno.
También trató de tender puentes con los grupos críticos del FMI. "En esta reunión hablaremos de la globalización y de sus elementos negativos", apuntó. Sostuvo que la internacionalización de la economía, "un fenómeno que no es nuevo", genera oportunidades y riesgos. "En el comienzo del milenio, hemos tomado nota de que el impresionante crecimiento en la productividad después de la (II) guerra (mundial) dejó a una parte muy grande del mundo con grandes desigualdades en el ingreso, lo que genera un gran problema para los próximos años, señaló.
Además, los mercados financieros y el aumento en el volumen de recursos que manejan son una "gran fuente de crecimiento; pero también factor de crisis", aseguró. El punto a debatir es encontrar la forma cómo los recursos manejados por esos mercados puedan financiar el desarrollo en las naciones más pobres, refirió.