Ť Impedían servicios
Desalojan granaderos a trabajadores del Gobierno capitalino
Laura Gómez Flores y Ricardo Olayo Ť Las autoridades capitalinas utilizaron la fuerza pública para desalojar a unos 300 trabajadores de las delegaciones Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero que impedían la prestación de servicios al público por un paro de actividades cuya demanda central fue que el Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal sea el encargado de entregar vestuario y equipo de seguridad a los empleados.
El oficial mayor, Ricardo Pascoe, advirtió que no permitirán amenazas y que se levantarán actas administrativas. Minutos antes de la acción policial, en entrevista dijo que los líderes de las secciones son quienes encabezan la demanda de recibir el vestuario, a pesar de los reportes de que venden la ropa o la distribuyen selectivamente.
Se trata de medio millón de prendas que se otorgan en el año como una prestación, y el GDF determinó hacer la entrega de manera directa, lo que generó la reacción del SUTGDF, organismo que en sus estatutos marca la obligación de ser priístas.
Los trabajadores que participaron en el paro de labores anunciaron que hoy realizarán una marcha a las oficinas del Gobierno capitalino para exigir la destitución de Pascoe, quien por "necedad y como una forma de esconder sus verdaderos motivos, como son la desaparición de horas extras y la rotación de personal incómodo, deja fuera a los dirigentes sindicales de la dotación de uniformes, bajo la suposición de malos manejos".
Ayer, cerca de 200 sindicalizados bloquearon los accesos a los módulos de atención al público, las oficinas de expedición de licencias y a la de amparos, en Cuauhtémoc. Agotados los canales de negociación, se solicitó la presencia del cuerpo de granaderos, que replegó al personal; se levantaron 25 actas administrativas, las cuales se turnaron a la Contraloría.
Se busca más transparencia: Legorreta
El delegado Jorge Legorreta explicó que por "usos y costumbres" el reparto del vestuario y equipo de seguridad entre los cinco mil trabajadores se realizaba a través de los dirigentes de las secciones 1, 6, 2, 8, 10, 15 y 20, pero ahora será de manera directa, para dar mayor transparencia al proceso y tener un control estricto sobre sus necesidades.
"No estamos acusando a nadie de malos manejos, pero la ley no nos obliga a entregarlos al sindicato, así que no cederemos a negociaciones o presiones, sobre todo cuando 80 por ciento de los ocho mil empleados están a favor".
La inconformidad, dijo, viene de pequeños grupos de las secciones 2, Operación Hidráulica; 8, Alumbrado Público; 10, Edificios y Monumentos; 15, administrativos del gobierno central y 20, de Espectáculos, cuyas dirigencias se niegan a que los 22 mil artículos, entre botas, guantes e impermeables, con un valor de 12 millones de pesos, sean otorgados de manera directa.
Una situación similar ocurrió en Gustavo A. Madero, donde el pasado miércoles, burlando la vigilancia del almacén, a cargo de sindicalizados inconformes, las autoridades sacaron los equipos, con un valor de 8 millones de pesos, y los entregaron entre los 4 mil 600 trabajadores, varios de los cuales "nunca habían sido beneficiados".
De acuerdo con versiones de empleados, varios de los artículos que por contrato les corresponden son vendidos en mercados de la Martín Carrera o del estado de México, por lo que "la tajada es muy jugosa para dejarla perder y de ahí la inconformidad de algunas secciones".