VIERNES 29 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť CLASE POLITICA

Miguel Angel Rivera Ť Por primera vez en el continente americano, una empresa dedicada a la administración de terminales aeroportuarias cotiza en la Bolsa de Valores de Nueva York. Esa posición de avanzada le correspondió al consorcio mexicano Grupo Aeroportuario del Sureste (Asur). El secreto está en un nombre: Cancún.

En efecto, el aeropuerto internacional de ese destino turístico está incluido en las terminales administradas por el grupo que colocó ayer un importante paquete de acciones en la más importante bolsa de valores del mundo. Después del aeropuerto de la ciudad de México, el de Cancún es el segundo en número de operaciones diarias, por encima de Monterrey y de Guadalajara, las dos principales ciudades mexicanas después del Distrito Federal.

A Cancún llegan vuelos que no tocan otros puntos del territorio nacional y su crecimiento no cesa, así que por ello es un gran atractivo, pero no es todo; el paquete cuyas acciones se cotizan a partir de ayer en la Bolsa de Nueva York comprende otras ocho terminales aéreas en el país. Pero también tiene su enlace internacional, pues anteriormente Asur había vendido 15 por ciento de sus acciones a una empresa internacional que opera el aeropuerto de Copenhague, Dinamarca.

Esto es parte del fenómeno de la globalización que, por otra parte, tan criticado ha resultado en los últimos días por la reunión del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial en Praga, Checoslovaquia. Pero también hay quienes están sinceramente convencidos de sus bondades. Por eso, el secretario de Comunicaciones y Transportes, Carlos Ruiz Sacristán, estuvo en Nueva York para el lanzamiento del paquete accionario de Asur.

La cosecha

Tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado se aseguraba ayer que prácticamente se habían concretado acuerdos entre los tres principales partidos, PRI, PAN y PRD, para la distribución de las comisiones legislativas, los cuales se darán a conocer hoy mismo. Uno de los puntos que quedaban por definir en el Palacio Legislativo es el aumento en el número de esos grupos de trabajo, que en realidad sería una vuelta a lo que existía antes de 1997, cuando por influencia de los grupos de PAN y PRD se "compactaron" varios de ellos... En la nueva distribución el más afectado será el PRD, en razón de su menor número de diputados en relación con la anterior Legislatura... Tal vez lo más difícil son los tironeos internos, pues en las tres fracciones parlamentarias hay destacadas figuras que consideran de justicia presidir una de esas comisiones, pero la lucha es probablemente más intensa dentro del PRD en virtud de que sólo serán tres las presidencias de comisiones que les corresponda presidir a sus legisladores y una más si finalmente se opta por el aumento. Las diferencias enfrentan a los llamados perredistas "históricos" con los llegados del PRI o de la sociedad civil. Sólo por citar un caso, entre los recién llegados está el guerrerense David Augusto Sotelo, quien ganó en las urnas a su ex partido, y con experiencia en la tarea legislativa, pues renunció al tricolor cuando era oficial mayor del Congreso de su estado.

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